#15

Esa misma noche Tomás dejó a Samael en la casa de Lucifer.

(El peor error que pudo cometer.)

.... . ....

Samael - ¿Es seguro estar aquí?

Tomás - Claro, mi padre no vendrá creo...

Samael - Si vas a salir, asegúrate de que nadie te vea.

Tomás - Solo quiero buscar a Yadael...lo necesito conmigo.

Samael - Ten cuidado.

El príncipe lo abrazó.

Samael - ¿Uh?

Sam no es mucho de dejarse abrazar pero le correspondió.

Tomás - Muchas gracias por ayudarnos...

Samael - No te me pongas sentimental ahora, ¿Uhm?

Tomás - Tienes razón...perdón jaja...

- se separa y se talla un poco los ojos -

Samael - Si ya de por si te ves horrible, ahora peor, deberías descansar.

Tomás - Volveré a dormir cuando sepa que Yad está bien.

Samael - Suerte.

- se acuesta en la cama -

Tomás - Gracias, te veo a la noche...

Samael - Ajá.

Tomás salió rápidamente.

. . .

Por otro lado el trabajo que tenía Adán lo dejó a manos de Abimael.

El ángel se encontraba dañando psicológicamente a Yadael de una manera lenta pero efectiva.

Yadael - ¿¡POR QUÉ NOS HICISTE ESTO!?

Abimael - ¿Qué les hice?

Yadael - NO TE HAGAS, NOSOTROS CONFIAMOS EN TI.

El peliblanco se acercó y le agarró bruscamente el mento acercándolo a su rostro.

"Es culpa de ustedes por confiar en el primer ángel que les dice "¡Ay!, ¡Esta voluntad es totalmente injusta!"

Abimael - Por amor a Dios, ¿Realmente el príncipito del infierno fue tan ingenuo para confiar tan rápido?

Yadael - Tomás tiene mejor corazón que tú y que todos en este maldito lugar...

Abimael - Sí, ajá.

Yadael - ¡Intentaste culpar a Samael encima!

Abimael - Samael...oh Samael...él siempre fue tan poco común, igualito a tu príncipe demoniaco, ¿Por qué será?

Yadael - ¿Qué intentas decir?

Abimael - No lo sé, quizá solo estoy jugando contigo un rato.

Yadael - ¡¡¡SOLO DÉJAME IR CON TOMÁS DE VUELTA AL INFIERNO Y CREEME QUE TODO ESTO TERMINARÁ!!!

El ángel golpeó fuertemente la mesa y lo miró.

Abimael - AQUÍ NO SE TRATA DE LO QUE TÚ QUIERAS.

Yadael - Por favor solo...déjame ir...

. . .

De pronto Lucifer llegó a casa y abrió la puerta de Tomás para entrar.

Samael - (Me lleva la puta verga.)

El ángel al ver a Samael quedó demasiado sorprendido.

Lucifer - ¿S-Samael...?, ¿Q-qué haces...aquí?...

El arcángel agachó sus orejas por el mal rato que se acababa de llevar, se levantó y se quedó de brazos cruzados mirándolo.

Samael - ¿Acaso te sorprende verme aquí?

Lucifer - P-pues sí...tanto tiempo y en la recámara de Tomás...que sorpresivo...

Samael - ¿Por qué será qué no me ves en tanto tiempo?

Lu se quedó callado.

Samael - Que descaro el tuyo de veras.

Lucifer - Sam...tenía qu-

Samael - Shhh, no me vengas a intentar manipular, ve y manipula a Alastor si quieres pero a mí no.

Lucifer - A él no lo nombres.

Samael - Y tú no actues como si te importara.

Lucifer - Me importa.

Samael - ¿Crees qué no sé la doble moral de ustedes dos?

Lucifer - Cállate Samael.

Samael - No soy Tomás, ni Charlie, como para que vengas a callarme.

Lucifer - Pero t-

Samael - ¿Sabes?, te recomiendo llevarte a tu esposita y a Charlie al infierno, vamos a arrasar con todo el cielo.

Lucifer - ¿Acaso tú estarás del lado de Tomás...?

Samael - No, estoy del lado de la justicia, no de la conveniencia.

Lucifer - Si nos ayudas puedo volver a hacer que te acepten en el cielo.

El arcángel se acercó y lo miró fíjamente.

Samael - ¿De verdad?

Lucifer - Claro que sí...puedo hacer eso y más. (En el fondo eres un corrupto como nosotros.)

Samael - ¿Y sabes qué puedo hacer yo?

Lucifer - ¿Qué?

Samael - Esto.

Este con algo de su poder celestial formó un agujero en sus pies y levantó a Lucifer.

Lucifer - (Mierda...no puedo moverme...)

Samael - Puedo enviarte de vuelta al infierno y bloquearte cada maldita entrada de vuelta al cielo.

Lucifer - ¿Serías capaz?

Samael - ¿Quieres apostar?

Lucifer se quedó en silencio mirándolo.

Samael - No te hagas el muy muy, con un simple chasqueo te suelto, deberías bajarle un poquito a tu ego.

Lucifer - Bien, tú ganas...suéltame.

Este sin querer formar más problemas cerró el agujero y lo soltó.

Samael - Maldigo este momento en el que te volví a ver la cara.

Este estaba por salir pero Lucifer lo agarró de la muñeca.

Lucifer - Sam...perdón...pero lo hice por buena causa...

El arcángel se soltó bruscamente y lo miró furioso.

Samael - ¿¡BUENA CAUSA FUE HACER TRAMPA POR QUIÉN SE QUEDARÍA EN EL CIELO!?

Lucifer - ¡ENTIÉNDEME!, YO...

Samael - FUISTE CAPAZ DE MANDAR A MATAR AL MEJOR AMIGO DE TU PROPIO HIJO.

Lucifer - Pero tú...¿Por qué no le has dicho...?, ¿Acaso sigues teniendo consideración conmigo...?

"¡JA!"

Samael - ¿Realmente te piensas qué tendría consideración con un corrupto cómo tú?

Lucifer - Samael es que tú...

Samael - Mejor haz lo que te digo con tu esposa e hija.

Lucifer - YO NO TENDRÉ NINGÚN TIPO DE REMORDIMIENTO EN LA GUERRA, ¿¡ENTIENDES!?, POR ESO TE DIGO QUE ESTÉS DE MI LADO.

Samael - ¿Y qué hay de Tomás?, ¿Uhm?

El arcángel solo ríe y lo mira de vuelta.

"Tu tiempo se va a acabar te deberías de callar."

Lucifer - Tsk...

Este caminó hasta la puerta pero antes de cruzar se detuvo en seco y volteó un poco la cabeza para mirarlo de reojo.

"Y recuerda una cosa, un padre nunca traiciona a su hijo, pero veo que eso ya va contigo, ¿Verdad?, espero jamás volver a verte, adiós, papá."

Lucifer - Sigo siendo tu padre de todos modos.

Samael - Claro que no, que tenga tu sangre no significa nada, ni tú ni Alastor son mis padres, para mí ambos están muertos.

Lucifer - ...

"Ah y una cosa, actúa como si nunca me hubieras visto, porque por mí borraría este momento de mi memoria, como todos los que tengo contigo desde que nací."

. . .

Samael llegó corriendo a la casa de Azrael y abrió la puerta.

El arcángel le había dejado abierto por si llegaba Sam.

Este llegó bastante agitado y con sus orejas gachas.

Azrael - ¿Sam?

- se acercó rápidamente -

¿Estás bien?...

Samael - Solo...déjame abrazarte por favor...

El arcángel lo abrazó y acarició su cabeza.

Azrael - ¿Qué ocurrió?

Samael - Luego te cuento...ahora solo quiero relajarme contigo...

. . .

Tomás de tanto correr se chocó con Yadael.

Estos se miraron y se quedaron en shock.

Tomás - Yad...

Yadael - ¡T-TOMÁS!

- Corre a abrazarlo -

El príncipe lo abraza desde la cintura y lo besa profundamente.

Yadael abrió los ojos un poco sorprendido pero aún así, sonrojado correspondió.

. . .

En el palacio.

Sera - ¿¡CÓMO QUÉ DEJASTE HUIR AL AMIGO DE MORNINGSTAR!?

Adán - ¿¡QUÉ MIERDA TE PASA ABIMAEL!?

Abimael - Déjenlo, tengo todo controlado.

Lute - Más te vale porque si no al que vamos a desterrar es a ti.

. . .

Rato después llegó Tomás y Yadael a la casa de Azrael.

Samael y Azrael los vieron bastante contentos.

Yadael - ¡Samael!

Samael - Yadael...que bueno volver a verte.

Tomás - Estoy tan feliz...

Samael - Que bien.

Azrael - (Algo no me cuadra...)

Sam mira a Azrael.

Tomás - No sabes cuanto te extrañé...te ves...perfecto Yadael...

Yadael - ¡Yo me moría por verte otra vez!

El príncipe lo agarró de la cintura y lo lanzó al sofá.

Samael - ¿Estás bien, Azy?

Azrael - ¿No habían dicho qué Sera buscaba a este chico?

Samael - ¿Quién dijo eso?

Azrael - Lo escuché de Adán, se lo decía a Abimael.

"Ugh."

Se quejó y se dió la vuelta.

Samael - Ni siquiera lo nombres.

El arcángel lo abrazó por detrás y puso su cabeza en su hombro.

Azrael - No te enojes...no vuelvo a mencionar su nombre.

Samael - Nunca me cayó bien Abimael.

Azrael - Lo sé...

Samael - ¿Entonces para qué lo nombras?, ¿Acaso te gusta o qué?

Azrael - No, me gustas tú.

Este se sonrojó y agachó sus orejas nuevamente.

Azrael - Mírate que lindo te ves así, dame una sonrisita.

El caído estaba sonriendo inconscientemente pero trataba de evitarlo.

Azrael - Ándale, muestrame los colmillitos.

- ríe un poco mientras lo sujeta firmemente de la cadera -

Samael sonrió y lo besó.

Por otro lado Tomás y Yadael andaban en las mismas.

Tomás - Te necesitaba...

Yadael - Diría lo mismo pero estaba muerto.

- ríe un poco -

Tomás - No me es gracioso.

Yadael - Que amargado.

. . .

Rato después se encontraban ya todos más relajados.

Azrael - ¿Tienen listo el plan ahora qué están juntos?

Tomás - Sí, ahora con Yadael lo llevaremos al cabo.

Dijo mientras este estaba frente al príncipe y él le abrazaba la cintura.

Samael se encontraba callado.

Azrael sabía que estaba así por tener que pelear en contra.

Tomás - ¿Tú estás listo, Samael?

Samael - Sí. (NO)

Tomás - Bien porque yo...juré venganza.

Azrael - Bueno pues...no me quedará de otra más que desearles mucha suerte y tú ten cuidado Sam.

Samael - ...

El pelinegro le tomó los hombros al caído y lo miró.

Azrael - Un golpe fuerte devolverás.

Samael - A-Azy...

Azrael - Pero al contraatacar, ya no podré estar a tu lado.

Samael - No importa como lo quiera arreglar, no funcionará...

El arcángel le tomó el mento y lo miró.

"No tienes porque sentirte mal, Samael."

Este no aguantó más y lo abrazó entre lágrimas.

Yadael - (Pobrecito...)

Tomás - (Ya me siento culpable.)

Azrael - Lo llevaré a mi cuarto un momento para calmarlo, si quieren algo van y tocan la puerta.

Tomás - ¿No era qué si queríamos algo íbamos por él?

Azrael - Van y tocan la puerta.

Este se llevó a Sam a su cuarto.

Yadael - ¿Crees qué sea buena idea qué Samael vaya a la guerra?

Tomás - Él es la clave si queremos ganar...

Yadael se acercó y volvió a besar al príncipe.

Este correspondió dulcemente y muy feliz...

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...🦋 La canción de "El hijo de Hernández" de Cuarteto De Nos le queda perfecta a Samael en la escena con Lucifer.🦋...

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