capitulo 20

—Cómo es posible que esta información sea una farsa? —dijo Daven, enojado, mientras lanzaba cualquier cosa que tuviera cerca, impactando al asistente de Haci— ¿Dónde mierda la conseguiste?

—Eso es imposible, Duque, ya que mi fuente de información es confiable —respondió el hombre, esquivando los objetos que Daven seguía arrojando.

Daven había estado en ese pueblo durante un mes completo, pero no había encontrado a la persona que estaba buscando. Todos decían no conocerla y no haberla visto nunca, pero su actitud era extraña para él, lo que aumentaba sus sospechas.

Después de ese mes, Daven no tuvo más opción que volver a la capital, dejando algunos de sus guardias vigilando el pueblo por si surgía alguna pista. Sin embargo, los meses siguieron pasando y no recibía ninguna información relevante.

—No me importa, quiero que busquen hasta debajo de las piedras. ¡Quiero a mi futura esposa aquí! —gritó— Y si es verdad que ese maldito pueblo nos engaña, me encargaré de ello después de que ella esté junto a mí".

—Hacemos todo lo que podemos, Duque. Aun así, no descansaremos hasta encontrar a la Princesa Evelyn—el asistente hizo una reverencia y salió de la habitación.

Daven se dejó caer en la silla con una cara ensombrecida. —Estrellita, estrellita, sigues siendo demasiado escurridiza—sonrió de una manera siniestra— Cuando te tenga, no podrás escapar de mí, no esta vez—dijo recordando cómo la había conocido.

(Este es el relato de su primera vida desde la perspectiva de Daven o David, de cómo conoció a Estrella).

DAVID

Me gusta, me gusta desde que la vi por accidente. Tan frágil, tan sensible, con sus mejillas enrojecidas y ojos rojos. Me gusta cómo corre la sangre en su labio partido. Quisiera acercarme, pero me gusta ser su sombra, estar detrás de ella sin que me note, observarla llorar. Es lindo.

—¿Quién está ahí? —carajo, debió escucharme al tropezar.

—Soy yo, lo siento, no quise asustarte—digo saliendo de mi escondite sonriéndole.

Ella niega con la cabeza, secándose las lágrimas. —No, no te preocupes, está bien—agacha su cabeza tratando de ocultar su cara.

Yo sonrío sin que ella se dé cuenta y me acerco aún más.

—¿Estás segura? —pregunto— Ese golpe no se ve bien—ella levanta la cabeza mirándome a los ojos.

—Si no es grave, solo me caí —me miente descaradamente.

—Bueno, si es así, haré que te crea —ella sonríe (solo debes sonreírme a mí).

Seguimos hablando y me arrepiento de no haberme acercado desde antes.

—Por cierto, soy Estrella —Estrella sonríe.

—Mucho gusto, mi estrella. Yo soy David —ella ríe y tuerce los ojos, negando con la cabeza.

Fue fácil acercarme a ella y crear al hombre que ella cree perfecto. Me volví su hombro de lágrimas y me contó todo respecto a lo que vivía con el asqueroso de su padre. Le prometí el cielo y la luna, diciéndole que la sacaría de ese infierno. Pero lo que ella no sabe es que entrará en el mío.

Cuando el viejo se dio cuenta de que salíamos, me amenazó, pero no tengo que ser amable con él. Le dejé muy claro que sus palabras no significan nada para mí.

—Oye, ¿y cómo vas tú con esa chiquilla, nada de nada o qué? —pregunta burlón Carlos.

—No creo que te debiera importar. Además, solo hay que dejar que las cosas fluyan —digo terminando mi cerveza.

Carlos niega con la cabeza. —David, tú y yo sabemos que solo las estás usando. Pero como va la cosa, el que terminará mal eres tú.

—Cállate, ¿quieres?

Pasaron los meses y cada vez me fascinaba más, aún más, con su cara hinchada y roja de tanto llorar. Me gustaría que llorara así solo para mí.

En su cumpleaños número 16, le regalé un libro que conseguí al hacer las compras. Ni me molesté en leer el título. Ese día, ella se entregó a mí. Pude ver su piel desnuda, marcada por golpes nuevos y viejos. Fue tan excitante.

Pensé que esto nos acercaría más, pero después de un mes, ella se alejaba o siempre estaba enferma. Quise sacarla de esa casa a la fuerza, pero sabía que no podía. Así que comencé con mi plan. Primero organicé el sótano de mi casa, todo para que su invitada estuviera cómoda. Pero antes de que pudiera llevar a cabo todo esto, todo se arruinó. Mi madre se dio cuenta de mis intenciones y, debido a su culpa, no volví a verla nunca más.

Ella le mintió diciéndole que estaba muerto, pero eso era solo una sucia mentira de su parte. Cuando me enteré, ya era muy tarde. Ella había muerto, había acabado con su vida. De la rabia, casi maté a mi propia madre, pero no me contuve con el asqueroso viejo y el que supuestamente era su mejor amigo. Los maté a los dos, pero antes de que pudiera irme, la policía me emboscó y me mataron. Así desperté en el cuerpo de este extraño. Luego caí en cuenta de que era esa estúpida historia que le había regalado.

De la historia sé muy poco, ya que Estrella la atesoraba y me la contaba, pero nada más allá. Ahora que desperté y sé que ella está aquí, la recuperaré y terminaré lo que no hice en mi primera vida.

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—¿Cuál es la sorpresa? —preguntó Estrella emocionada.

—Si te lo digo, ya no será una sorpresa —Alexander la guió por toda la mansión con los ojos vendados.

Estrella estaba ansiosa por saber cuál sería la sorpresa de Lex, quien le negó cualquier respuesta.

—Está bien, pero ¿cuánto falta?

—Ya llegamos, ten paciencia, Florecilla —le susurró quitándole lentamente la venda.

Cuando Estrella abrió los ojos, volteó a mirar incrédula a Alexander, quien solo sonrió— ¿Es en serio? ¿Tú hiciste esto? —preguntó asombrada.

Alexander asintió— Claro que sí, ¿acaso no te gusta? —preguntó nervioso.

—Qué dices, me encantó. No sabía que mi esposo tuviera esos talentos artísticos —dijo sonriendo.

—Y no solo en eso, ¿eh? —dijo acercándose para luego besarla con intensidad.

Estrella siguió el ritmo del beso, las manos de Alexander empezaron a bajar por todo el cuerpo de Estrella hasta llegar a su cintura. La cargó a su esposa y la montó en la mesa, comenzó a quitarle el vestido mientras besaba su cuello...

—Me gustó mucho el cuadro —dijo Estrella agitada, mirando al cuadro detrás de Alexander.

El cuadro era un retrato de Estrella y Caled en el jardín, en el cual Caled besaba el vientre de Estrella, que esta en la habitación del bebé que también fue parte de la sorpresa.

—Bueno, uno está aquí y otro está en mi despacho —dijo, terminando de quitarle el vestido a Estrella.

—No puedo creer que vayamos a hacer esto en el cuarto del bebé —Alexander la interrumpió con un beso.

—Igual no creo que él se entere —dijo Alexander, bromeando.

---------------nota del autor---------------

¡Hola! Según yo, este iba a ser el primer capítulo del maratón, pero no se pudo. Sin embargo, como ya estoy mejor, habrá actualizaciones diarias desde hoy a la misma hora, ya que es cuando tengo tiempo.

¡Importante!

—Vimos un poco de las verdaderas intenciones de David con Evelyn.

—David está loco e iba a secuestrarla y tenerla en un sótano de por vida porque, según él, así ella podía ser solo de él.

—El papá de Estrella en su primera vida no mató a David. Fue un invento de la madre de este para alejarla de él porque sabía lo que su hijo haría.

—Es importante que recuerden este cuadro porque gracias a él todo saldrá a la luz.

¡Gracias por leer!

Besos y abrazos 😘💋.

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