capítulo 18

Una semana después, ya estaba todo listo para ir a la casa de campo a las afueras de la capital.

—¿Estás emocionado? —Estrella miró a Caled.

El niño sonrió varias veces —Sí, yo nunca he ido a la capital —respondió feliz.

—Yo tampoco, oh bueno, que recuerde —dijo ella sonriendo.

Los dos estaban en el jardín por última vez antes de irse. Estrella cerró los ojos al sentir el viento en su cara.

~No te preocupes, solo sé feliz~.

Ella abrió los ojos de golpe.

—¿Qué fue eso?—penso en voz alta

—Mami, mamá —llamó Caled.

Estrella reaccionó y miró a Caled.

—¿qué pasa, cariño? —preguntó preocupada.

—¿Estás bien, mami? —preguntó Caled, mirando a su madre con una expresión de preocupación.

Estrella se esforzó por sonreír y le acarició suavemente la cabeza.

—Sí, mi amor, estoy bien. Solo... pensando en voz alta, supongo. Vamos, creo que ya es hora de irnos—dijo, tratando de disimular su incomodidad.

Caled asintió y corrió hacia adentro de la mansión.Estrella se quedó en el jardín, observando el paisaje y tratando de recordar qué había provocado esa extraña sensación. Pero, no pudo encontrar una explicación.

Finalmente, decidió dejarlo ir y se unió a Caled para terminar de preparar sus cosas antes de partir hacia la casa de campo a las afueras de la capital.

Ya adentro, el mayordomo les avisó que el archiduque los estaba esperando afuera de la mansión. Los dos asintieron y se encontraron con Alexander afuera.

—Florecilla, Caled —llamó Alexander al verlos.

Estrella corrió hacia Alexander y se abalanzó sobre él.

—¿Lex, ya está todo listo? —pregunto emocionada.

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—Sí, duque, todo está listo para partir —respondió el mayordomo.

Daven asintió con seriedad en su rostro.

—Está bien, entonces, arranquemos —ordenó.

Daven se montó en su caballo.

(Pronto volveremos a estar juntos, mi estrella).

Daven partió hacia el condado Si, donde según la información, se encontraba Estrella, su Estrella. Antes de despertar en aquel cuerpo, un hombre le había dicho que Estrella lo estaba esperando y que debía buscarla.

Cuando despertó, comenzó su investigación. No duró mucho tiempo, ya que, según algunos recuerdos de ese cuerpo, Evelyn, la prometida de aquel hombre, comenzó a escribir cosas extrañas y a llamar a alguien llamado David. A partir de eso, Daven se dio cuenta de que Evelyn era su Estrella, pero al parecer, él llegó tarde, ella ya no estaba.

Pero él la encontró, y decidido a no perderla nuevamente, se dispuso a buscarla y reclamarla como suya. Sentía que Estrella era su alma gemela, destinada solo para él, y él solo para ella.

—No importa lo que tenga que hacer para que vuelvas a mí. Siempre serás mi pequeña indefensa estrellita. Necesitas de mí para salir de tu infierno—Con una sonrisa en su rostro, Daven susurró

Sin embargo, su alegría se vio rápidamente opacada por la noticia de que Estrella había desaparecido de nuevo.

La molestia se apoderó de él y preguntó enojado: —¿Cómo es posible que ya no esté aquí? ¿A dónde demonios fue?—

—Yo, yo no lo sé, duque. Según la información que tenemos, se supone que ella debería estar aquí—Tartamudeando nerviosamente, el asistente de Daven respondió

La frustración crecía en Daven mientras escuchaba la respuesta de su asistente. Ordenó con autoridad: —Tienen que encontrarla. Ella debe estar aquí en algún lugar. Pregunten a cada persona en este maldito condado. No descansaré hasta tener a mi Estrella de regreso—.

Su asistente solo asintió, desde entonces él comenzó a preguntar por alguien que conociera a una mujer de ojos verdes y cabello castaño, pero nadie respondía o trataba de evadir el tema, hasta un día.

—Se llama Evelyn, tiene poco de 20 a 21 años, ojos verdes...

—No hay nadie que se llame Evelyn, ni mucho menos una mujer de ojos verdes —dijo la mujer de cabellos rubios. —He vivido toda mi vida aquí y nunca conocí a alguien con esas descripciones —esa mujer era Greeicy, quien mintió al hombre y también influenció para que nadie en el pueblo dijera algo.

(Te estoy dando tiempo, Alexander) - pensó ella. - (Nunca pensé que después de dos años la encontrarían).

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Cuando llegaron a la casa de campo, todo era muy hermoso y deslumbrante. Nunca antes había salido del pueblo, ver caras nuevas era emocionante. Había muchos locales y puestos que vi en el camino, todo se veía increíble.

—Es lindo, ¿verdad?— preguntó Lex.

—Sí, todo esto se ve increíble, nos hace falta salir —responde ella y miró a Caled.

Caled asintió, también asombrado por el nuevo paisaje y aire.

Lex sonrió al verlos, los dos estaban embobados mirando todo a su alrededor. Ellos eran su familia, junto con ese pequeño bebé que está en camino. Nadie se los arrebatará

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—Lex, estoy embarazada, no soy inválida —protestó Estrella.

Alexander rodó los ojos.

—Pero tienes que tener más cuidado, tanto por ti como por el bebé —dijo él.

—solo quiero hacer un poco de jardinería, además no lo voy a hacer sola, por fa— Estrella le hace ojitos a Alexander.

—no, no me vas a convencer con esos ojos— Estrella hizo un puchero y Alexander solo suspiró —está bien, pero ten cuidado, nada que te haga hacer más esfuerzo de lo necesario—

Estrella sonrió y besó a Alexander —está bien, te amo Lex, iré a decirle a Caled que aceptaste—dijo ella emocionada.

Sin más, ella iba a salir del nuevo despacho de Alexander cuando él la llama.

—florecilla...

—eh, ¿qué pasa?— Estrella se volteó a mirarlo.

—te ves tan sexy con esa barriga— dijo él haciendo que Estrella se sonrojara.

—Qué cosas dices, Lex—dijo avergonzada, saliendo del despacho.

Al verla salir, Alexander rió.

(Tan hermosa)

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Estrella ya tenía seis meses de embarazo. Su panza era grande y ya no podía hacer muchas cosas como antes. Además, Alexander se volvió muy sobreprotector con ella.

Estos meses fueron tranquilos, aunque Greeicy dejó de enviar cartas antes de que Estrella cumpliera los tres meses, algo que preocupó a Estrella y Alexander. Sin embargo, a diferencia de Estrella, Alexander estaba preocupado por no recibir ningún avance en el caso de Estrella.

Pero, como Estrella debía estar tranquila, Alexander la tranquilizó diciéndole que quizás Greeicy estaba ocupada con Larissa, intentando calmarla un poco.

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Ese día, en el despacho de Alexander, tocaron la puerta.

—Adelante —habló él.

La puerta se abrió y entró su asistente.

—Su excelencia —El hombre hizo una reverencia —ha llegado una carta del palacio.

Alexander dejó de hacer lo que estaba haciendo y miró al hombre.

—Ignórala—ordenó.

—Su excelencia, creo que esta vez no es posible ignorarla—dijo en voz baja —Sus altezas, el emperador y la emperatriz, ya saben que usted está en la capital.

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Los sirvientes guiaban a Alexander por el palacio hasta que llegaron a una puerta.

—Su alteza, el príncipe... —dijo uno de los sirvientes.

Alexander lo detuvo.

—Ya no soy un príncipe, ahora soy el archiduque— dijo seriamente.

El guardia hizo una reverencia y abrió la puerta, revelando a la emperatriz. En cuanto ella lo vio entrar, se puso de pie.

—Hijo... —Alexander solo hizo una reverencia, miró a su padre y a su madre y dijo—Saludo a su alteza, el emperador, y a su alteza, la luna del imperio.

La emperatriz quedó estática por la seriedad de su hijo.

— Yo, hijo, no sabes cuánto te extrañé—ella intentó abrazar a Alexander, pero él la esquivó.

—¿Para qué me llamaron?—preguntó Alexander seriamente.

—Alexander, deja tu falta de respeto, no sabes con quién estás hablando—intervino el emperador.

—Déjalo, Lucas, entiendo su enojo —suspiró la emperatriz con tristeza. — Te llamamos porque queríamos saber cómo están tú y mi nieto— dijo el hombre abrazando a su esposa.

—Caled y yo estamos bien, así que no veo por qué tenía que venir— respondió él.

—Alexander, hijo, sabemos que ustedes están bien, pero ¿no crees que Caled necesita una madre en su vida después de que te divorciaste y no te has vuelto a casar?— preguntó la emperatriz.

—¿Qué estás intentando decir?—preguntó él irritado.

—Por qué no te casas, hijo. Mira, tu padre y yo ya hemos seleccionado a unas que de seguro te gustarán —habló la mujer.

—Aunque lamentablemente, la que sí quería que fuera tu esposa desapareció, mi pobre ahijada—dijo con tristeza.

— Jajaja, ¿casarme en serio? Después de todos estos años, no han aprendido nada. No me casaré con quien sea que hayan elegido. Además, no me puedo casar —respondió Alexander.

— ¿Y por qué? — preguntó la emperatriz.

— Porque ya estoy casado y amo a mi esposa. Además, ya estoy muy grandecito como para que me digan con quién debo estar—

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Estrella tropezó sin querer con una mujer.

—Yo lo siento, iba distraída y no la vi —dijo apenada Estrella.

Uno de los escoltas de Estrella ayudó a la mujer a recoger lo que se había caído, ya que Estrella no podía agacharse.

— No se preocupe— la mujer miró a Estrella— mi señorita— la mujer volvió a dejar caer sus bolsas y se tapó la boca sorprendida.

—¿Su señorita? Creo que me confunde... —dijo Estrella confundida.

— Sara, mi nombre es Sara. Mi señorita, digo, señora—dijo ella nerviosa.

—Mucho gusto, Sara. Soy Estrella—dijo mientras sonreía y ponía una mano en su barriga.

Sara se sorprendió aún más al ver que Estrella estaba embarazada. (Mi señorita, ella está embarazada), pensó con alegría. (Definitivamente es ella, mi señorita. Espero que ahora sí sea feliz)

- Mamá, estás aquí. Mira lo que compré - dijo Caled mostrando un algodón de azúcar.

Sara estaba cada vez más sorprendida.

—Caled, cariño, ¿qué son esos modales?— preguntó ella.

—Perdón, señorita. Un gusto, yo soy Caled—dijo Caled con una voz tierna.

—El gusto es mío, pequeño. Soy Sara—Sara le sonrió a Caled.

Después de eso, Estrella y Caled se despidieron de Sara, quien se quedó un buen rato mirando por dónde Estrella se había ido.

Sara sonrió al recordar lo feliz que Estrella se veía.

---------------nota del autor---------------

Hola,Voy a aclarar varias cosas del capítulo de hoy:

- David ha transmigrado a Daven.

- David sabe que Evelyn es Estrella, pero no es tonto y no la buscará como Estrella.

- David está un poco obsesionado, aunque no lo admita, y manipuló a Estrella en su primera vida. Tenemos en cuenta que Estrella era vulnerable debido a su situación, lo cual hizo que ella confiara mucho en David.

- David no sabe que Estrella estuvo embarazada de él, ya que no tiene todos los recuerdos del cuerpo de Daven. Tampoco recuerda haber leído el diario de Estrella.

Con estas cosas aclaradas, También quiero mostrarles como se ven los personajes principales

alexander

estrella/Evelyn

caled.

espero que les haya gustado el capítulo.

Besos y abrazos. 😘💋.

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