capitulo 2

Niccolò bajó inmediatamente la mirada hacía su pantalón y lo que vio lo dejó petrificado, la mayor vergüenza de su vida, sentía la cara caliente, sabía sin la necesidad de un espejo que estaba más rojo que un tomate y las carcajadas de esa hermosa secretaria no ayudaban mucho a su herido ego, nunca le había pasado algo como eso, normalmente tenía un control total sobre su cuerpo y sólo se permitía estar así en las paredes de algún elegante y muy exclusivo hotel, no le gustaba que las mujeres más experimentadas pensaran que podían aprovecharse de los bajos instintos de un hombre para conseguir lo que quieren, al menos no con el, pero ahora viene una chiquilla, hermosa pero chiquilla que se ve no pasa de los 20 a despertar sus más bajos instintos.

— *¡No puede ser! Años de práctica física y mental para controlar a mi hombría se van a la basura cuando éste traidor decide que ya es hora de revelarse, en cuestión de segundos y ¡por una niña! ¡pero que rayos!*— pensaba un muy nervioso y avergonzado Niccolò, pero lo que tiene de guapo lo tiene de orgulloso y no va a permitir que la chiquilla se de cuenta de cómo se siente en este momento, así que tomó aire y lo soltó lentamente, luego dijo:

—Mira Linda, ¿así te llamas verdad? bueno a parte de que eres lenta para hacer tu trabajo también me has hecho pasar un momento desagradable así que dame una razón para no reportarle a Edgar que su secretaria es una incompetente y mal educada—

—Te puedo dar más de una pero la más importante es que espero que ella no oiga lo que acabas de decir por qué Linda es la persona más eficiente, educada y dulce que conozco— no terminó de hablar cuando entró a la oficina una señora de unos 46 años con un porte elegante y sofisticado, su rostro reflejaba armonía y con una voz dulce se dirigió a la chica:

—Señorita ya atendí al personal de limpieza, los manteles y las nuevas cortinas ya están en el almacén planchadas y dobladas cómo lo solicitó, yo me encargué personalmente de verificar que estén en perfectas condiciones y así fue, no tienen ni una sola mancha ni arruga, todo está impecable—

—Muchas gracias, te presento al señor Niccolò Grimaldi, para él es ésta oficina—

—Señor Grimaldi le presento a la señora Linda Pérez, la secretaria personal del Ceo— dijo la hermosa chica con una encantadora sonrisa al ver la furia en los ojos del italiano, ya que para él no pasó desapercibido el tono de burla en sus palabras.

—Un placer sr. Grimaldi, señorita sí me permite, iré a revisar la agenda del señor Reynosa—

—Adelante— contestó la chica

— * ¡genial como no es la tal "Linda" voy a poder llevarla a la cama sin tener problemas con el Sr.Edgar! * — luego luego el empresario vió la ventaja de la situación o eso era lo que el creía.

La secretaria se fué dejando un silencio muy incómodo en la oficina, después de unos minutos Niccolò fue el primero en hablar:

—Ya que no eres la secretaria de mi socio, tu y yo podríamos conocernos más íntimamente, tu sabes... aunque... primero me gustaría saber el nombre de ésta descarada chica, ya que al parecer no te llamas Linda, es una lástima el nombre encajaba bien contigo, a todo ésto, ¿me dirás cómo te llamas?— preguntó

La hermosa chica de largas y tupidas pestañas reía a carcajadas, dejandolo confundido, irritado y deslumbrado por su hermosa risa, por un momento se quedó estático admirando la belleza de la chica, su hermoso cabello rubio, sus ojos color miel y esos labios... estaba perdido ante ella, pero lo más extraño es que la situación se le hacía conocida, era como estar viviendo un déjà vu y entonces empezó a unir las pistas

— *Esa risa yo la he oído antes, su belleza en un principio se me hizo conocida, Linda se dirigió a ella con respeto como si fuera una figura de autoridad, está en un lugar al que no cualquiera tiene acceso y definitivamente no pasa de los 20, debe ser... * — Aunque ya creía tener la respuesta a sus sospechas, éstas fueron confirmadas cuando la chica pudo parar de reír y la escuchó decir:

—Mi hermana tenía razón, ¡eres realmente malo en ésto!— sigue riendo, —Escucha no lo tomes a mal hace algunos años me contó sobre tí y el otro día por casualidad salió al tema el nombre del nuevo socio comercial de papá, entonces le pedí a mi padre atenderte personalmente, idea que inmediatamente él rechazó, por lo que no me dejó de otra más que idear un plan para ser yo quien te recibiera sin que mi padre pudiera negarse.

No lo sabes pero la novia de papá está embarazada, ella me ayudó llamándole a papá y diciendo que el bebé ya estaba por "nacer" pero todavía le faltan un par de semanas, por eso papá salió como bala, en cuanto a la broma que te hice, eso fue un pedido especial de mi hermana y yo como buena hermana menor debo obedecer a mis mayores— Ésto último lo dijo con un toque de sarcasmo en sus palabras, poniendo la sonrisa de inocencia más falsa que Niccolò había visto en su vida.

—Ahora me presento formalmente, Hola Niccolò Grimaldi Rossi, mucho gusto, me llamo Valeria Reynosa López, soy la hija menor del matrimonio entre el empresario Edgar Reynosa y la distinguida Samantha López, tengo 20 años, soy amante de la carne y me encanta nadar, es un placer conocerte— Dijo Valeria muy risueña y con su verdadera sonrisa que sí bien la fingida ya era hermosa, la auténtica es totalmente deslumbrante.

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play