Capítulo 17 • Desayuno con amigas.

...Domingo 19 de diciembre....

El auto avanza por la carretera mientras Diana presiona el botón para bajar un poco el vidrio y sentir la brisa de una mañana de domingo.

—Ya faltan pocos días para navidad, me emociona esta época del año—exclama Estefanía mientras se toma una fotografía con Diana observando al exterior.

En las calles se puede sentir el espíritu navideño, adornos en casas y locales de venta, algunas figuras de Santa Claus en las calles, muñecos de nieves inflables, personas con robustas chamarras y algunos árboles con decoraciones navideñas.

—A mi me también me gusta—complementa Diana mientras toma una fotografía al exterior, aprovechando que el auto está detenido en el semáforo.

—Las chicas dicen que también van en camino, así que las veremos allá. Mi mamá dijo que pasaríamos navidad en casa y que esta ves vendrían unas primas y primos, me emociona porque tengo mucho sin verlos. Así que ya quiero que sea navidad—ríe mientras sube la fotografía a Instagram y etiqueta a Diana con una leyenda:

Sin que se dé cuenta y mientras observa las calles navideñas. 🫧❤️

—Si, a mi también me emociona—ríe.

Finalmente llegan al restaurante y las chicas están afuera esperándolas. Lizbeth, Lety y su novia Damaris.

Diana viste una blusa color vino, un abrigo color arena, jean entubado azul marino y botines de color oscuro.

—Por fin llegan chicas—exclama Lizbeth mientras levanta los brazos.

—Que exagerada, tenemos aquí como 10 minutos nada más...—interrumpe Damaris.

—El Uber se tardo un poco por el tráfico en la ciudad, ya saben, por las épocas navideñas y demás, toda la gente haciendo compras a ultimo momento—ríe Estefanía.

—Pudimos ver la foto de Diana, que diosa...—agrega Lety mientras muestra la foto en Instagram y mientras las 5 chicas ingresan al restaurante.

Paola y sus amigas se sientan en una mesa para 5.

—¿Es cierto lo que comentaste la otra vez? Que pasarás navidad fuera de la cuidad—comenta Lizbeth mientras acomoda su bolso.

—De hecho sí, David irá conmigo—se sonroja.

—Esa relación parece que está dando sus frutos, me alegro por ti amiga—comenta Liz.

—Y eso no es todo, tiene a varios pretendientes detrás de ella, y en especial hay uno que no está nada mal—agrega Estefanía antes de ser interrumpida por el mesero que está listo para tomar sus órdenes.

—¿El desayuno traducido al que incluye?—inquiere Damaris.

El mesero responde. —Dos huevos, dos tiras de tocino, dos salchichas, dos rebanadas de Jamón y 2 pancakes

—Yo quiero el desayuno tradicional—comenta Pao. —¿Ustedes chicas?—voltea a mirarlas.

—Lo mismo, creo que a todas será lo mismo—responde Lizbeth.

—El jugo de naranja viene incluido en el desayuno, ¿desean cambiarlo por algo más?—pregunta el mesero.

Las chicas responde que así está bien y el mesero se retira.

—Entonces, ¿quién es ese chico del cual hablabas Fanny?—de inmediato Lizbeth retoma la chafla que tenían antes que el mesero llegará.

—Ay Fanny...—Diana baila los ojos y solo niega con la cabeza, mientras que espera que su mejor amiga comience a hablar.

—Ponlos a que peleen entre ellos por ti, mientras tú estás en una torre esperando como una princesa—agrega Lety entre risas.

Estefanía sonríe. —Es un chico que parece ser un repartidor de pizza, aquí mi amiguis ya lo tiene en WhatsApp y creo que aún no inicia una conversación con él, un chico un poco delgado, blanco y un cabello teñido de rubio, al menos así lo alcancé a ver porque se quitó su casco solo por unos segundos—comenta Estefanía con una sonrisa.

—Vaya vaya, bueno, aprovechando que tú ya tienes novio, creo que ese me lo deberías dejar a mí—responde Lizbeth mientras observa a Diana.

—De hecho hoy me escribió un mensaje de buenos días, le respondí pero ya no entré a WhatsApp para revisar sus demás mensajes—ríe. —De igual forma tengo novio y el es solo un amigo, solo que parece un chico cool para conocer—agrega Diana mientras observa a lo lejos que el mesero trae los vasos con jugo de naranja.

El mesero llega y comienza a colocar los vasos de jugo de naranja sobre la mesa. Anuncia que en unos minutos traerá los desayunos.

—Cambiando un poco el tema, creo que Lety y Damaris quieren dar una noticia, ¿no es así chicas?—inquiere Estefanía después de darle un sorbo a su jugo de naranja.

—Así es—sonríe Damaris.

—El próximo año salimos de bachillerato, así que planeamos casarnos el próximo año y mudarnos a Canadá, allá continuaremos nuestros estudios—responde Lety con una sonrisa mientras se toma de la mano de su novia.

—Wow, que hermosa noticia—exclama Lizbeth.

—También me alegra mucho...—comenta Diana mientras se lleva sus manos a su boca.

Las chicas sonríen después de la noticia y una especie de melancolía llega a Fanny.

—¿Recuerdan las tarde de verano cuando jugábamos en el patio? Con globos y pistolas de agua, cuando comíamos helado por el intenso calor que hacía, no parece tan lejano, pero eso sucedió en 2015, ya hace 4 años—comenta Fanny mientras las chicas recuerdan perfectamente.

—Lo recuerdo perfecto... cuando Lizbeth le lanzó un globo de agua al vecino de Diana, porque quería que le hiciera caso ya que le gustaba, lejos de eso el chico se enojó—agrega Lety entre risas y escupiendo su jugo de naranja.

Damaris toma una servilleta y le ayuda a limpiarse.

—Yo también recordé eso—ríe Fanny a carcajadas.

Diana tiene algunos breves recuerdos de ese verano, comienza a sonreír después de recordar y ve a sus amigas sonreír mientras están sentadas, el tiempo pareciera congelarse y siente, nuevamente, que está en el lugar indicado, con las personas correctas y en el momento perfecto.

Horas más tarde Diana está afuera de su hogar, esperando la llegada de David mientras está sentada en una banca observando el pasar de los autos y personas.

—No sé si quedarme o irme...—susurra para sí misma, baja la mirada y se lleva la manos a su rostro.

Observa como el cielo se oscurece poco a poco y el sol le da paso a la luna, algunas estrellas se aprecian poco a poco con el pasar de los minutos. Recuerda algunas noches cuando se quedaba en la ventana de su habitación observando la noche, a veces a la mitad de la madrugada, esperando que su vida cambiara, una estrella de fugaz que le cumpla su deseo.

Mientras esta perdida en sus pensamientos ve llegar a su novio, su rostro pasa de seriedad a alegría en cuestión de minutos. Se pone de pie y le saluda. —Hola, amor—le besa en los labios.

—Hola, cariño—se anuncia él mientras sostiene un pequeño bolso. —Compre algo...—sonríe mientras le pide que cierre los ojos.

—Que puede ser...—responde ella mientras con una de sus manos se tapa los ojos.

—Extiende tu mano derecha...—le pide él.

Diana extiende su mano mientras sonríe y la ansiedad le mata por saber que será lo que su novio le tiene reservado. En cuestión de segundos siente algo frío en su mano, algo pequeño que se desliza...

Finalmente abre los ojos y en su mano tiene una gargatilla con la letra "D", mientras que David sostiene otro con la misma letra.

—David...—atina a decir mientras sostiene el collar en su mano. —Está muy hermoso...

—Que bueno que te guste, ambos tiene la letra D, así que no hay problema sobre cuál elijas...—comenta entre risas y se acerca a ella para colocárselo, ella sonríe mientras David le besa su frente. Después ella con delicadeza extiende el collar y se lo coloca, sonríe y también le deposita un beso en la frente para después abrazarse mientras ella observa a las pocas estrellas que se ven en el cielo, con lágrimas en los ojos por la batalla interna que vive en esos momentos.

—Así nunca nos olvidaremos, pase lo que pase—sentencia él.

David y Diana están abrazados mientras sentados sobre la banca fuera de la casa. —Quisiera que tuviéramos más noches así...—exclama David mientras ve al cielo.

—Veo que también disfrutas de la vista nocturna, siempre me ha fascinado a mí. Paso algunas noches mirando las estrellas y la luna, me pone nostálgica...—se acurruca en los brazos en su novio.

—Es extraño como los humanos reaccionamos a la noche, en especial a la madrugada.  Nunca he entendido eso, pero también me agrada pasar la noche mirando las estrellas, a veces no le ponemos atención a cosas tan simples que nos hacen tan felices...—agrega él mientras Diana tiene recostada su cabeza en su hombro.

A ella le sorprende un poco como David pareciera haber olvidado lo que ella le contó, sobre su pasado y su verdadera razón de cómo llegó. Lo haya olvidado o no, le hace sentir bien que no se lo esté recordando demasiado.

—¿Y como te la pasaste con tus amigas en el desayuno? Y también con Fanny durante el fin de semana, que eso fue la causa que casi no habláramos—inquiere entre risas.

Diana ríe. —Aún así estuvimos chateando, así que no exageres mi amor. Y fíjate que el desayuno fue cool, algunos recuerdos de la adolescencia e infancia se hicieron presentes, la pase bien con las chicas. Y luego, ¿qué crees? ¡Lety y Damaris se casarán y se irán a estudiar a Canadá! Me impacto y me alegro esa noticia, que bueno que ambas se están alejando de la toxicidad de la familia de Damaris—responde ella con mucha energía y entusiasmo.

—Me sorprendí un poco con lo de Lety y Damaris, pero me da mucho gusto por ellas—sonríe.

—Luego charlamos sobre algunas cosas después de finalizar bachillereo y de nuevo sobre cosas del pasado, somos muy nostálgicas... en especial ellas recuerdan mucho el verano de 2015–agrega entre risas y suspira al recordar brevemente ese año.

—Y sobre Fanny, pues pasamos viernes y sábado mirando películas, la pasamos muy bien. En especial ayer sábado, que mis padres salieron de casa, tuvimos la casa para nosotras solas...y creo que ahí está mi reporte—complementa ella con una sonrisa.

—Que fin de semana tan interesante, pensé en venir a visitarte, pero no quería interferir en su noche de chicas—comenta él con una sonrisa.

Al mismo tiempo suena una notificación en el iPhone de Diana.

"Mensaje de Jonathan: Buena noche, ¿cómo estuvo tu día con tus amigas?" Lee la notificación en su mente y evitando que David alcance a leer.

—¿Quién es?—interroga él.

—Nadie, un amigo de la escuela—sonríe y vuelve a recordarse su cabeza en el hombro de él.

...

Apenas Diana se despide de su novio, entra a su casa y sube a su habitación. Recuerda que Jonathan le envió mensaje, camina a su cama y se recuesta para comenzar a chatear y conocerlo un poco más.

...Jonathan ...

...En línea...

...8:58 PM...

Jonathan: Buena noche, ¿cómo estuvo tu día con tus amigas?

...10:57 PM...

^^^Diana: Hola, buena noche, andaba ocupada y por eso hasta ahorita contesto jaja. Y me la pase bien, gracias por preguntar. ¿Tú qué tal?^^^

Jonathan: Me alegro. Yo bien, hoy trabajé. Es curioso como la primera vez nos miramos en Walmart y después de eso nos volvimos a encontrar en tu casa, ¿no?

^^^Diana: Cosas del destino, una simple coincidencia. También me pareció muy extraño jajaja.^^^

Jonathan: No creo que haya sido una simple casualidad, además, acepta que querías que eso sucediera jaja

^^^Diana: Si, creo que sí. Quería que eso pasara, eres muy lindo, por eso me alegra conocernos y ser amigos.^^^

Jonathan: Creo que tendré que entender mi posición. Da igual, me agrada conocernos y que seamos amigos. ✌️

^^^Diana: ¿Y qué hacías ese día en Walmart?^^^

Jonathan: Estaba comprando un poco de alcohol para mis amigos jaja, juro que no era para mí. 🫣

^^^Diana: ¡Qué buen amigo! Fingiré que te creo... jaja^^^

Jonathan: ¿Y tú que hacías ahí? Recordé que cuando nos topamos en el pasillo no pudiste ocultar tu mirada. Es natural, causó sensaciones en las personas😉

...Diana: Hacía unas compras con mi madre....

^^^Diana: Cálmate jaja, estás guapo pero no es para tanto🤪^^^

Jonathan: Tu mirada no dice lo mismo jaja, casi me seguías hasta la salida de Walmart, lo bueno que nos volvimos a encontrar en tu casa. El destino así lo quiso.

^^^Diana: Me atrapaste, pero creo que solo fue porque era la primera vez que nos veíamos jaja. Si quieres te puedo presentar a unas amigas.^^^

Jonathan: Si son de igual de bonitas que tú, acepto.

Diana sonríe con ese último mensaje y le gusta que él le recalque lo hermosa que es. El chat es interrumpido cuando David envía mensajes de buenas noches y acompañados de unas imágenes.

Mientras sostiene su iPhone, ella está frente al espejo y con sus dedos sostiene el collar con la letra D que le regaló su novio.

—David es mi novio, pero también Jonathan es un chico lindo, solo que debo contener mis emociones...—se dice a sí misma mientras se ve de frente al espejo.

Segundos después la puerta de su habitación se abre lentamente. —Hmm, yo también tenía ese dilema cuando era una adolescente...—comenta su madre mientras ingresa su habitación y camina hacia la ventana.

—Mamá... ¿me estabas espiando?—Diana sonríe mientras interroga a su madre.

—A veces tu boca expresa lo que tu mente calla—ríe. —Te escuché y lo único que te puedo decir, juzgando por lo que puedo notar en ti, es que elijas a quien tú corazón te diga, pero no lastimes a alguien por tus inseguridades. Aunque creo que eso último es caos imposible para la mayoría de personas—comenta Valeria con una sonrisa mientras acaricia el cabello de su hija y luego observa su diadema con la letra D.

—Linda diadema, por eso mismo te digo que sepas elegir y no lastimes. A veces las personas se esfuerzan tanto por alguien, y muchas veces el sentimiento no es mutuo, créeme, eso lastima mucho—agrega antes de salir de la habitación.

—Mami... ¿consideras que para tomar una decisión, es necesario escuchar al corazón o pensar con la mente?—inquiere antes que su madre salga de su habitación.

Se da la media vuelta y observa a su hija. —Algunas veces debemos seguir nuestras emociones y dejar la razón de lado, aunque a veces parece difícil...—contesta ella.

—¿O sea que debemos hacer lo que más no haga felices?—pregunta Diana con firmeza y esperando una repuesta por parte de su madre.

—Cada persona lo ve de manera diferente, pero creo que algunas veces debemos tomar la opción que más haga sentir felices. Lo que nos de paz y felicidad, aunque algunas veces es difícil. Depende de la situación sabrás que decisión tomar, muchas veces las emociones ciegan nuestra lógica—sentencia Valeria con una sonrisa.

—Entiendo, vaya que a veces es difícil decidir entre el corazón y el cerebro—exclama su hija mientras con sus dedos toca su cadena.

—¿Puedo saber por qué preguntas?—interroga Valeria mientras observa con detenimientos las expresiones de su hija.

Diana sonríe. —Solo era una pregunta curiosa, no te preocupes, mami. Buena noche, descansa—se despide y su madre sale de la habitación.

...•...

...¡Muchas gracias por leer!...

Más populares

Comments

Sol

Sol

si digue así esto termirara mal... no creo que David se lo merezca

2023-06-04

1

Sol

Sol

si no es nadie.. para que mentir

2023-06-04

1

alexa c.amadeus

alexa c.amadeus

es una cadena o gargatilla con el dije letra D

2023-03-01

0

Total

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play