Capítulo 7 • Una cita deseada.

Diana, David y Fanny caminan hacia la salida de la escuela, pero Diego le habla a Diana y le pide un poco de tiempo para hablar a solas.

Diana y Diego caminan hacia unos árboles, apartados un poco de los alumnos que igual van saliendo.

—¿Sigue en pie la cita del domingo?—pregunta él mientras levanta sus cejas.

—Ah... Creí que querías hablar de algo más, sigue en pie...

—Es que tuve que preguntarte, a veces no respondes los mensajes...—argumenta Diego.

—Es que he estado ocupada, Diego... nos vemos el domingo, te mando mensaje mañana para ponernos de acuerdo...—responde mientras se aleja.

Diana camina hacia David y Fanny que están a la salida de la escuela charlando. Antes de llegar a ellos Letty capta su atención por completo cuando la mira besándose con otra chica.

—Eso sí no lo había visto...—dice boquiabierta.

Sigue su camino hacia sus amigos y Fanny nota su expresión.

—Olvide decírtelo, Letty tiene novia... se llama Damaris, es una chica linda—agrega Fanny.

—Eso veo, hacen linda pareja—Diana sentencia y sonríe.

—Y bien, ¿que te dijo Diego?...—inquiere David ansioso por escuchar una repuesta por parte de ella.

—Nada importante, iré a casa a cambiarme, ¿pasas por mi y nos vemos en el restaurante?

David le confirma que pasará por ella a su casa.

Antes de despedirse.

—Espero que disfruten su cena...—Fanny sonríe y después voltea con Diana. —¿Irás mañana a mi fiesta, verdad?

Se queda en silencio por unos segundos.

—Diana... eres mi mejor amiga y te necesito ahí... habíamos hablado de esto hace semanas—agrega Fanny, evidenciando su molestia.

—Mañana tendré la visita de mis dos primos, no lo supe hace hace unos días... por eso no creo poder...—hace una mueca de tristeza.

—¡Por eso no te preocupes! Llévalos a la fiesta, se divertirán...

—¿Segura?—inquiere ella.

Fanny acepta. –Y tu tampoco vayas a faltar, menso—ríe antes de irse.

—Si vas a mi casa, te presentaré a mis padres, ya que les he hablado un poco de ti, y además estoy segura que ellos querrán conocerte, como amigos claro está...—sonríe.

David asiente y espera que ella se retire en dirección a donde su madre la espera.

.........

En cuanto Diana sube al auto nota que su madre mira hacia los árboles que están al salir de la escuela. —¿Ese es el chico?—la mira a ella mientras sube al auto y se coloca el cinturón,

Diana asiente. —Ahora vámonos que me debo cambiar para verlo, deja de observarlo, ya tendrás tiempo para hacerlo más tarde, mamá—comenta mientras le lanza una mirada quejumbrosa. Su madre acelera el auto y se dirigen a casa.

—¿Y sabes lo que te pondrás?... solo es pregunta...—Valeria encoje los hombros.

—Así es...—le guiña el ojo.

No era la primera vez que Diana salía a una cita, sin embargo durante el camino a casa su madre le dio algunos consejos y también le relató anécdotas de sus citas.

Al llegar a casa. —Hija, te diría si quieres comer algo... pero había olvidado que saldrás con David—comenta su madre mientras ambas suben por las escaleras, su madre se dirige al cuarto para atender algunos pendientes, y Diana ingresa a su habitación para cambiarse.

Cierra la puerta con seguro, lanza su mochila sobre la cama y camina rápidamente hacia su ropero, comienza a quitarse su blusa y la lanza sobre su cama mientras toma el gancho donde está encuentra el vestido y lo coloca sobre cama, busca la caja donde se hallan los tacones y después de unos segundos la encuentra, saca los tacones y los coloca sobre la cama. Coloca a cargar su iPhone y de inmediato cierra las persianas, se quita su jean y zapatos para colocarse el vestido, lo desliza sobre su cuerpo y curando finalmente se lo coloca, se dirige al espejo y ve como el verde resalta sin duda alguna.

Da una vuelta mientras luce su vestido, luego de eso se sienta en su cama y se coloca sus tacones, es la segunda vez que usa tacones, al menos en esta realidad, le cuesta un poco adaptarse pero logra hacerlo bien, como dicen: lo bien aprendido, jamás se olvida.

Técnicamente en esta realidad su otra yo, ya había usado tacones he ido a fiestas con ellos. Así que por inercia debe recordar algo.

Mientras prepara su maquillaje y lo guarda en su bolso, recibe una llamada de David. Confirmando que va en camino y estará en cuestión de minutos en casa.

—Carajo...—corre al espejo y se retoca un poco el maquillaje, minutos después toma su bolso y sale de su habitación.

—¡Mamá! Ya viene...—grita Diana mientras baja por las escaleras y sus padres están en el comedor.

Carl un poco sorprendido deja los cubiertos sobre el plato. —¿Quién viene?—inquiere.

—Ash... te hable que vendría el novio de Diana...—su madre responde.

—Mamá... no es mi novio, es solo un amigo y ya... viene a conocerlos y listo, nos iremos—agrega Diana de forma quejumbrosa.

Pasado unos minutos tocan el timbre, es muy obvio que es muy David. Diana siente que se si presión cae en cuanto escucha sonar el timbre.

—Tal vez es tu novio...—agrega su padre entre risas. Valeria le da un leve golpe en su hombro mientras Diana se dirige a la puerta.

Diana abre la puerta y David está de pie con una sonrisa, la mira de pies a cabeza. —Te miras hermosa, como siempre—sonríe.

—Gracias...—ella le contesta y lo invita a pasar.

—Fui bastante rápido...—agrega él.

—Bastante. Pasa, te presentaré a mis padres—responde entre dientes y con una sonrisa fingida.

David pasa caminando lentamente y saluda a los padres de Diana, que están en la sala esperando.

—Mamá, papá... el es mi buen amigo—hace énfasis. — David... con el saldré esta noche a cenar. —Diana lo anuncia y de inmediato voltea hacia su amigo. —David, ellos son mis padres, Carl Castaneira, y mi madre Valeria Cruz...

David extiende su mano y saluda a ambos. —Un placer conocerlos, ahora veo porque su hija es tan hermosa—comenta con una sonrisa.

Valeria y Carl ríen un poco extrañados por el comentario y los dos asienten entre risas.

—Si, eso parece...—responde Carl.

—Bien, David... creo que debemos irnos porque se nos está haciendo tarde...—lo jala del brazo.

—Mami, papi... nos vemos más tarde...—agrega rápidamente mientras se despide con su mano.

—Recuerda estar aquí antes de la hora acordada...—le grita su madre mientras Diana se va y cierra la puerta.

—Es un chico peculiar...—comenta Valeria mientras ve por la ventana como ambos se retiran.

Carl asienta ante el comentario de su esposa.

.........

Diana y David se encuentran ya en el restaurante, ambos están sentados y leyendo el menú para saber con certeza que pedirán para comer.

David baja un poco su cartilla de menú y observa que Diana está verificando y pensando que pedirá.

—Tus padres parece ser cool, si me hubieras dejado charlar más con ellos los habría impresionado con mis comentarios sarcásticos...—agrega mientras coloca su menú sobre la mesa y ya tiene en mente lo que pedirá.

Diana ríe. —Si claro.. como lo que dijiste sobre mi belleza, es cierto... pero fuiste demasiado rápido...—responde mientras coloca la carta al borde de la mesa.

—Quería impresionar a mis suegros...—responde con sarcasmo.

Ríe. —¿Cómo?... oye tranquilo...—se sonroja por el comentario de David. —A veces eres muy directo...¿no? —le mira fijamente a los ojos.

—Es que se lo que quiero...—le guiña el ojo. —aunque térmicamente no son tus padres... bueno, si lo son... pero después de todo lo que me contaste...

—¡David!—le levanta la voz. —Habíamos hablado de eso...—le contesta mientras una persona se acerca y toma nota de lo que ambos pedirán.

Después de unos minutos, la chica se retira y David y Diana regresan a la platica. —No se lo he contado a nadie... y te creo con firmeza, porque es evidente que algo dentro de ti cambio... pero no tanto, por eso no es tan perceptible para los demás...—responde él.

—Eras un acosador, sabes todo de mi... no me sorprendería que me hayas robado algunas prendas de mi ropa interior...—contesta.

David sonríe y levanta sus cejas de forma coqueta.

—Cambiando de tema... ¿tus primos llegarán mañana?... ¿los llevarás a la fiesta?—inquiere él.

—Tengo que... —le da un sorbo a su bebida. —Además al día siguiente tengo cita con Diego...—agrega de forma quejumbrosa.

David de inmediato se sorprende al escucharla. —¿Diego?...

Medita un poco antes de responder. —Si, tendré una cita con él...—lo dice en un tono suave, intentando que David se sienta celoso.

—Ah... Diana... ¿Después de todo lo que ese estupido ha hecho y lo inmaduro que es... ¿lo aceptas?—el pregunta elevando un poco su voz, logrando que algunas personas de otras mesas volteen a verlos.

—¿Celoso?...—le pregunta en forma de juego. —Calma... es solo una cita, tengo planeado batearlo... así que ya Hulk, contrólate...—agrega entre risas mientras observa que un mesero trae la comida.

—Que graciosa eres—responde él en un tono serio.

Después que el mesero traiga la comida ambos comienzan a degustar, charlan y cambian el tema de Diego a algo más neutral. David habla de sus planes para estudiar la carrera de derecho... mientras tanto Diana le comenta que sus planes son ser doctora, aunque sus ideas no son muy claras.

El tiempo vuela, el hace algunas preguntas sobre el pasado de ambos, los inicios de su amistad en la escuela, como David se declaró por primera vez y Diana lo rechazó, para Diana es más fácil seguir la conversación porque David explica con lujo detalle sucesos del pasado.

Pasada una hora y media, David solicita la cuenta, de inmediato la traen y paga. Diana toma su bolso y camina hacia los sanitarios cuando de pronto siente un ligero dolor en la cabeza, se recarga sobre la pared y David de inmediato se acerca. —Diana... ¿estas bien?—la toma del brazo y le intenta llevar hacia él.

—Estoy bien, solo fue un mareo...—se aparta de él y camina rápidamente al baño.

Ingresa, coloca su bolso en el lavamanos y se ve frente al espejo. —Tal vez mi periodo..., pero no... no puede ser... ah...—se lleva las manos a la cabeza, siente un leve dolor punzante y su visión se comienza a nublar.

Comienza a tener breves destellos de recuerdos sobre su actual vida y la pasada. —Debe ser eso... los recuerdos que ella me mencionó...—hace referencia a la bruja mientras está parada frente al espejo.

—El dolor desaparece lentamente, se comienza a lavar las manos y pasados 3 minutos toma su bolso y se prepara para salir, cuando David entra y se encuentran de frente.

—Se me había hecho raro que ni salieras, pero veo que estás bien...—agrega mientras abre la puerta para que ella salga.

—Estoy mejor... gracias—sonríe y camina.

El le extiende su brazo, Diana entre lanza sus brazos y caminan hacia la salida, después del restaurante caminan un poco por la calle hasta llegar a una tienda de helados, donde ambos compran conos, David pide uno de chocolate y Diana de un sabor combinado, Vainilla con chocolate. Diana intenta pagar pero David se niega argumentando que el la invito, y el paga.

.........

Es sábado, un día caluroso, el viento mueve las ramas de los árboles. Diana espera sentada mientras lee un libro, espero por sus primos, quienes llegarán pronto. A diferencia de los primeros días, esta vez los recuerdos de algunos familiares suyos vienen en ondas, y puede recordar algo en específico. Mientras ellos están por llegar, puede recordar momentos que vivió con Elizabeth y Omar, con algunos comienza a reír, como cuando recuerda una tarde de verano jugando con pistolas de agua.

Antes que sus primos lleguen, Estefanía comienza a bombardéala con mensajes.

...Messenger • Estefanía...

...16:34...

Fanny: Te voy a estar esperando, eh 🙃

Fanny: En cuanto tus primos lleguen, te vienes para acá🛐

...16:39...

Fanny: No olvides mi regalo✌️

^^^Diana: ¡Calma! jaja. Si iré...^^^

...17:00...

Fanny: ¿Aún no llegan tus primos?

Al mismo tiempo que lee los mensajes de Fanny, Omar, un chico rubio, tez blanca, delgado, ojos y ojos oscuros y Elizabeth, una chica morena, cabello castaño, de complexión mediana, ojos color cafe y de estatura baja. Ambos van llegando en un Uber que se estaciona frente a su casa.

Se levanta de inmediato y se acerca a ellos.

—Hola... cuánto tiempo...—dice con una sonrisa al ver como ellos bajan del auto.

—¡Prima!—Elizabeth corre a abrazarla. —Ni siguieras has visto mis mensajes, te dije que vendríamos y no me leíste... que mala—finge estar triste.

—He estado ocupada con cosillas—ríe. —Pero mi mamá me aviso que vendrían y obvio, estaba súper emocionada... Omar... ¿qué tal?—se acerca a él y lo abraza.

—Todo perfecto, como siempre Diana...—responde él.

—Señor perfecto le dicen—sonríe Elizabeth.

Omar ríe ante el comentario. —¿Y mi tía? Teníamos como 1 mes que no veníamos, la última vez que estuvimos aquí... ¿tienes planes para hoy? ¿Haremos alguna estupidez?...—

—De hecho está adentro, vamos...—los invita a pasar. —Y de hecho sí tengo planes, ahorita saldremos a la fiesta de una amiga, mi mejor amiga de hecho, Fanny, ¿la recuerdan?

—Oh si, la loca...—agrega Omar.

—Esa mera...—ríe Diana mientras caminan hacia la casa, posteriormente al llegar abre la puerta y los invita a pasar.

Saludan a Valeria y se quedan unos minutos charlando en la sala mientras Diana sube a su habitación por el regalo de Estefanía. Un vestido.

Al mismo tiempo siente que su teléfono vibra y es ella, mandándole mensajes.

...Messenger • Estefanía....

...17:12...

Fanny: ¿Ya llegaron tus primos?🥹

^^^Diana: Ya, ahorita salimos para allá...^^^

Apaga la pantalla de su iPhone y baja las escaleras para avisarle a sus primos que deben acompañarle.

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...¡Gracias por leer!...

Lindo día o noche. 🫶✨