Ep 7: Dejada a mi suerte

Emma Brandt. ♣︎

Al abrir mis ojos me encontré con muros blancos, sin vida y opacos. Tenía un dolor infernal en la cabeza y tarde unos largos segundos para recobrar la conciencia en su totalidad.

—¿Conejo?.—Murmure en un suave hilo de voz, no podía formular las palabras como lo deseaba.

No lo veo en la habitación y mi pecho se apretó ante la idea de no tenerlo cerca, no entiendo estos sentimientos, pero creo que pueden ser los efectos del vínculo entre ambos.

Me senté en lo que parecía ser una camilla y eso fue lo que me hizo comprender los muros blancos de la habitación, posiblemente me encontraba en un hospital, aunque no sabría el porque debería estar aquí.

Lo último que recuerdo es haber comido la carne de la abuela Catherine mientras hacía la promesa de regresar al lado de Conejo.

—No entiendo lo que está pasando.—Me dije a mi misma por no lograr entender mi situación.

Todo ha sido tan extraño desde que el abuelo Edgar entró a mi habitación.

—¡¡Ella los mató!!.—Escuché la voz mamá gritar desde fuera del cuarto.—¡¡Hagan algo, podría intentar incendiar mi casa también!!

...¿De qué está hablando?...

Sus gritos fueron silenciados cuando una mujer de cabello oscuro y de traje formal entró a la habitación.

—Has despertado.—Sonrió con amabilidad.

Su voz era tranquila y traía consigo un pequeño cuaderno con un bonito bolígrafo.

—¿Era mi mamá la que estaba gritando?.—Decidí preguntar para confirmarlo.

—Si cariño.—Se acerco y tomo asiento en un silla que había a un lado de la camilla.—Ella no se encuentra muy bien, perder a su madre le hace decir cosas que realmente no siente.

...¿Mi madre ya sabe sobre el incendio?...

No creí que pudiera saberlo tan rápido, imagino que algún vecino de la zona le habrá notificado lo ocurrido.

—¡Soy inocente, lo juró!.—Grité con terror.

—Lo sé, creo en ti.—Respondió ella y dejó caer su mirada en la libreta para comenzar a escribir algo con su bolígrafo.—¿Podrías explicarme que ocurrió?, ¿por qué estabas fuera de la casa mientras esta se incendiada?, ¿por qué no tenías puesto tu pantalón de pijama?

—¿Qué?

—Necesito que respondas Emma, solo así podremos irnos y tu podrás volver con tu madre.—Me sonrió.—Sé que debes estar triste por tus abuelos, pero necesito que me ayudes a encontrar la razón del porque inicio el incendio y el porque fuiste la única sobreviviente.

...¿Qué debería decir?...

No puedo delatar a Conejo, él fue la única persona que me ayudó contra el acoso del abuelo Edgar.

—El abuelo Edgar Intentó abusar de mí.—Confesé con cierto miedo, no sería la primera vez que deciden no creer en mis palabras.—Y entonces..

...Conejo apareció para salvarme....

—¡¡Cállate!!.—Gritó mi madre desde el marco de la puerta.—Deja de mentir, los has matado porque eres una jodida loca al igual como tu padre.—Escupió esas palabras con odio.

Ella odia hablar de mi padre y nunca me permitió conocerlo en primer lugar. Dice que la abandonó por las drogas, pero hay otros días que simplemente cambia su versión de la historia.

—Señora tiene que calmarse.—Pidió la mujer de cabello negro.—No hay evidencia para culpar a su hija, debería estar feliz de verla con vida.

—¿Feliz?.—Sonrió mi madre con burla.—Hubiera sido realmente feliz si ella hubiera muerto con ellos.

Un nudo en la garganta me indicó que estaba a nada de comenzar a llorar, sus palabras siempre fueron crueles y sigue doliendo su indiferencia porque realmente la amo.

...Me gustaría estar con Conejo ahora....

El dolor no parece importar a su lado, aunque sus acciones me dan escalofríos y me hace romper los límites que nunca creí ser capaz de cruzar.

Sigo sin entender cómo fui encontrada a un lado de la casa con el pijama que debió haberse quemado en el incendio. Todo es tan confuso, me hacen pensar que todo lo ocurrido con Conejo y Búho nunca ocurrió.

—Lo he decidido, ya no la quiero conmigo.—Declaró mi madre.—La dejaré al cuidado de su padre o la dejaré en adopción, solo la quiero lejos de mí.

—Mamá no.. por favor.—Supliqué.—No quiero vivir sin ti, yo te quiero.

Hice todo lo que estuvo en mis manos para regresar a su lado, no podría soportar la culpa si decide abandonarme ahora.

—No quiero escucharte Emma.—Frunció su ceño.—Me pondré en contacto con él para que puedas marcharte con tu padre al momento de salir del hospital.—Decidió y se fue de la habitación sin escuchar mis súplicas.

Ahora ya era demasiado tarde como para intentar detener las lágrimas, estás estaban cayendo sin control humedeciendo mi rostro.

—No quiero seguir hablando.—Le dije a la mujer que aún se encontraba sentada en la tonta silla.

Me oculté debajo de las sábanas e ignoré los intentos de la señora de cabello negro para hablar conmigo. Deseaba ahogar mi dolor y encontrar mi momento de felicidad, pero todo parecía tan inalcanzable.

...¿Dónde se encuentra Conejo?...

Imagino que habrá sido él quien me dejó a un lado de la casa incendiada para ser encontrada por los vecinos de la zona. Aunque hubiera preferido quedarme a su lado si hubiera descubierto que mi madre finalmente ha decidido deshacerse de mí.

...10 años.....

Conejo dijo que tendría que volver en 10 años o él vendría por mí, fue una promesa y esa misma promesa calmó a mi herido corazón.

Pensar en él me hace sentir extraña, tal vez sea por causa del vínculo, pero siento que mi verdadero hogar solo podrá estar a su lado.

—No olvidaré mi promesa, así que tampoco olvides la tuya.—Susurré en un hilo voz para no ser escuchada.

10 años podría ser un largo tiempo para un reencuentro, pero también es tiempo suficiente para darme la oportunidad de sanar y madurar con calma, tal y como lo quería Conejo.

...Seré el sacrificio perfecto....

Así que no te vuelvas loco en mi ausencia, digo eso, pero creo que no podría estar tan cuerdo como lo desea en realidad.

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