Lizandra
Mi madre observó mi cabello, recortó las puntas con tijeras, cuidando de no ensuciarme ya que acababa de ducharme. Ella sacudió mis hombros para quitar cualquier pelusa que pudiera haber caído y me ayudó a vestirme. La blusa tenía la espalda más amplia y cubría mis protuberancias perfectamente. También había un par de zapatos planos verdes.
Se ve perfecto, mi cabello ya está por debajo de los hombros, naturalmente rizado, casi rojo-rosado. Mi madre me miró y no dijo nada, salió por la puerta y no volvió. Sabía que había una razón para todo esto y no sería para mi bienestar.
Ya era de noche y la luna estaba hermosa.
"Qué sorpresa, ¿verdad? Tu madre ha sido tan amable, ¿qué crees que la haya hecho cambiar así?"
"Nuestra madre, Rose, y no sé qué podría haber pasado para cambiar su actitud, pero fue realmente agradable. Ella ni siquiera solía hablar mucho conmigo. Creo que ella es la que más ha sufrido con toda esta situación, mi padre fue y sigue siendo un sinvergüenza con ella. Algún día, aclararé todo esto. Espero que para entonces, ella no lo pierda."
"¡Será mejor que nos vayamos, no quiero perderme ni un minuto de la fiesta!"
"Tienes tanta prisa, Rose, ¡nunca pensé que fueras tan fiestera! Pero tienes razón, deberíamos irnos."
Caminamos, era una noche fresca y todo el mundo estaba en las calles, había un ambiente festivo y de anticipación. Admiraba todo y la gente, al pasar junto a mí, miraba mi cabello y hacían caras horrorizadas, pero no me importaba. Uno de estos días, se llevarían una gran sorpresa, nada permanece oculto para siempre.
Sé que en siglos pasados, creían que las personas de cabello rojo traían malos augurios, pero eso quedó en el pasado, el ser diferente no debería ser motivo para tanto rechazo. Tampoco debería serlo el hecho de que mi padre me rechazara, pero no me amargaré como ellos.
Me gusta cómo soy y lo que puedo hacer con las plantas es suficiente para hacerme feliz.
Solo no sé si mi compañero, cuando se entere de mi historia, también me rechazará.
"Nuestro compañero es bueno, Liz, y no nos rechazará, ya verás."
"Eso está bien, al menos eres optimista."
"Sé feliz, chica, hoy será el gran día o más bien, la gran noche. Ahora me voy a descansar, adiós."
Me dejó sola con mis pensamientos y espero que sea como ella dijo. No podré soportar ser rechazada por la única persona que puede rescatarme de esta vida de ser despreciada por todos.
La gente está llegando y llenando el lugar. Sonrío al ver todo tan hermoso y el olor de la comida es increíble.
¡Mmmmm!
Espero poder comer algo más tarde.
Derick
Todo está listo, la luna está hermosa, realmente grande y azul, con un brillo especial. También estoy listo, parado junto al escenario que construimos en el centro de la Manada. Me vestí con cuidado y desde aquí arriba, veo que todos los demás también se han vestido lo mejor que han podido.
Voy todo de negro como mi lobo y le di a mi cabello un tratamiento especial, ahora más corto. Es muy liso y negro y cae sobre mis ojos si no lo recorto. Mis ojos son grises, pero se vuelven negros cuando Thomas toma el control.
Estamos ansiosos. Los betas ya han llegado, la mayoría de la gente también. Solo estamos esperando a los ancianos, una vez que lleguen, la ceremonia comenzará. Es algo muy especial y mágico, y solo aquellos con experiencia pueden realizarlo.
Lizandra
He llegado, no sé por qué estoy nerviosa, Rose también está inquieta. Me escondí detrás de un árbol, lejos del escenario.
"No tiene sentido esconderse, nuestro compañero nos encontrará por el olfato."
"¿Estás despierta, eh? Pero no me molestes, Rose. Dudo que encontremos a nuestro compañero esta noche. ¡Mira! Los ancianos están llegando. Creo que uno de ellos es el maestro Tirion."
"No lo creo, estoy segura, ese anciano es realmente viejo."
"¡Tranquilízate, Rose!"
Sentí que ella se marchaba y se dirigía a algún rincón distante, ya no podía sentirla.
Derick
Es la hora, casi es medianoche y quiero cazar. Finalmente, los ancianos han llegado y han subido al escenario, ahora es mi turno de ser consagrado y luego los jóvenes betas. El anciano más viejo me toma de la mano y me lleva al centro del escenario, los demás se unen a él y me rodean, formando un círculo a mi alrededor.
Miro lo que está sucediendo en el escenario y tiemblo ante la similitud que tiene conmigo y Rose. Comenzó con luz rosa, justo como mi magia, luego verde como las mechas de Rose y finalmente azul como la luna.
Increíble, hermoso, fuerte, creciendo en intensidad, cubre por completo al Alfa, ocultándolo dentro del haz de luz azul de la luna, parece que va a estallar. Cierro los ojos, incapaz de mirar, solo escucho ese terrible rugido y siento temblar todo a mi alrededor.
Caigo al suelo, de rodillas, tomo una respiración profunda y vuelvo a abrir los ojos, mirando al suelo. Noté que la luz había disminuido, miro de nuevo hacia el escenario y ya ha desaparecido, solo queda el Alfa Derick de rodillas. Los ancianos ya estaban atendiendo a los betas, que también estaban cubiertos por la luz azul de la luna, y con las manos bajas, los ancianos se van, uno tras otro.
Está hecho. Los betas, que también la recibieron, estaban todos de rodillas en la esquina derecha del escenario.
Todos se levantaron, la gente esperaba saber quién era la compañera del Alfa. Yo también tengo curiosidad, pero regreso detrás del árbol.
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