.
¡No lo puedo creer!, acaso no tiene otro lugar a donde ir esta mujer.
— ¿Qué haces aquí Sara? — Suspiro al escucharla acercarse rápido, Dani esta muy sonrojada y mira en cualquier dirección evitando que nos miremos.
— Después de que me dejaste en casa decidí que no te abandonaría, se cuánto odias estás reuniones — En buen momento le nace ser la mejor amiga.
— Te dije que no vinieras y aún así estás aquí, ¿Qué dijo mi madre? — Se pone nerviosa, sabe bien que si no está invitada no puede entrar a la casa, mi madre tiene reglas muy estrictas; Pero ella me ignora por completo, concentrándose en alguien más.
— Hola, ya veo que estás aquí de nuevo — Le dice a Daniela, quién la ignora por completo.
— Sin educación — Aún así no le responde; Sara esta colgada de mi brazo, y me suelto para tomar la mano de Dani.
— Vámonos, Sara mi madre está en la cocina estoy seguro, deberías pedir su permiso para estar aquí o ya sabes lo que hará, a ella no le importa de quién se trata y lo sabes, te echara a la calle por romper sus reglas — Comenzamos a caminar dejando a Sara atrás.
— ¡Fernando espera!, ¿puedes llevarme a casa?, no traje mi auto ya que vine a estar contigo esta noche, pero parece que estás ocupado — La forma en que dice las cosas sin duda se malinterpreta, solo me alejo y llevo a casa a mi pequeña Dan.
Víctor esta con mi padre, se unió a ellos una vez que llegué, debía cuidar a Daniela, pero ahora puede divertirse, mi buen amigo me ha pedido un favor varias veces y ahora será buen momento de ayudarlo.
— Sara está en el jardín, supongo que ya lo sabes, llévala a casa — Le digo a Víctor con una sonrisa y salgo de la casa sin mirar a nadie más, solo quiero estar a solas con Dani.
— ¿Estás molesto? — Camino un poco rápido mientras salimos de casa, pero jamás suelto la mano de mi pequeña Dan.
— Sara solo es una amiga, se que parece que tenemos otra clase de relación pero te juro que no tengo nada con ella, jamás la he tocado y jamás lo haré lo juro — Quizá podríamos volver a ese momento, porque me está volviendo loco no estar junto a ella, pero tampoco me atrevo a decirle que soy el hombre con el que estuvo aquella noche; Ahora me aterra el hecho de que me odie, ¿que pasará si le digo la verdad y ella solo se aleja? ¿o eso causa que se aferré más a la idea de la tonta boda?, debo primero evitar esto y después buscaré la manera de hablar sobre esa noche.
— Me voy a casar en unos días — No Dani, ¿por qué me lo dijiste?, prefería fingir que no pasaba nada, pero ahora, ¿cómo debo actuar?.
.
.
(Narra Daniela).
.
Debía hacerlo, ¿Qué hubiera pasado si la anoréxica de Sara no hubiese llegado; Ese beso quizá hubiera sido lo más increíble, pero no puedo bajar la guardia, Carlos es un hombre de mucho cuidado.
Nando no dice nada, suelto mi mano de su agarre y caminamos en silencio. Me quito los zapatos, estoy cansada y solo caminamos hasta mi casa, no esta tan lejos en realidad, pero con el silencio se volvió eterno por primera vez.
— Gracias por traerme a casa — Uso un tono no muy alto para no sobresaltar a Fernando que se ve perdido en su mente.
— ¿Qué? — Mira alrededor, se ve realmente muy distraído.
— Si, claro no fue nada, ¿te veré mañana?, podríamos desayunar un hot dog, ya que te gustan por la mañana — Acepto, aunque sería un poco raro, al final solo somos amigos y así debe ser, solo fue un momento extraño que no debe suceder de nuevo.
Se aleja despacio, lo miro hasta que desaparece y entro a la casa, pero al encender la luz mi corazón casi explota del susto.
— ¡¿Pero que!? — Digo casi gritando.
Carlos esta sentado en el sillón, al parecer tenían bastante tiempo ahí, parece un poco molesto e irritado mientras mira su reloj caro.
— Ya es muy tarde, ¿tu jefe ya se fue?, veo que hicieron planes para mañana, pero debes cancelar todo, mañana desayunas conmigo — Sostengo mi corazón para que no se salga por el susto.
— ¿Cómo entró a mi casa? — Me quedo en la puerta esperando cualquier mala acción.
— Este lugar es perfecto, pero no tiene seguridad, así que no puedes seguir aquí, mañana te mudas a la que será nuestra casa, es mucho más grande — Ni de broma pasaría un día cerca de este tipo.
— Lo siento pero esto es un trabajo, no puedo irme — Al levantarse toma su saco y avanza despacio acomodando su traje por completo.
— ¿Y desayunar con tu jefe también es trabajo? — Esta cerca de mí, pero no me dejaré intimidar, aunque tampoco puedo ser altanera con él.
— ¿Dice que no puedo socializar solo porque nos casaremos?, tengo muchos más amigos con los que paso el tiempo —.
— ¿De verdad porque nunca te he visto con otros? — Me tiene más vigilada que al presidente de la Nación.
— Por favor salga de aquí, quiero descansar — Se acerca de pronto para darme un beso, solo puedo agachar la cabeza para evitarlo y este sonríe y se va con su gran ego.
— No olvides que mañana saldrás conmigo — Cierro la puerta con llave muy rápido, no puedo creer lo que me pasa, en buen momento el tipo tiene la idea de volverse más cercano a mí.
El sueño se ha ido este día de mí, son las dos de la mañana, cuando un mensaje entra en mi teléfono.
Es un número desconocido, * Hola soy Nando, le pedí tu número a Víctor, espero que no te moleste * . Llevamos tres semanas conociéndonos y no tenía su número, así que lo guardo y respondo ya que al parecer aún está despierto.
*No me molesta, así podremos hablar cuando no estemos cerca*, le respondo pronto. No puedo esperar mucho tiempo.
Platicamos un rato hasta que el sueño me rinde, no quiero que amanezca, no deseo salir con el hombre lechuga, además estas últimas mañanas no me he sentido muy bien.
Cuando la alarma suena, tomo un baño lento con la esperanza de que no llegue mi prometido, pero el hombre es bastante puntual. Salgo de la casa con pans y sudadera, algo cómodo tomando en cuenta que es fin de semana.
— Disculpa pero ¿podrías ponerte algo más lindo?, te llevaré a un restaurante elegante, pensaran mal de ti si llegas de este modo — ¿¡Pero este imbécil que se cree!?
— Podríamos ir a otro lugar si está de acuerdo, yo conozco… — Me interrumpe con un mal gesto, mi respuesta le sorprende tanto, no debe estar acostumbrado a que otros opinen.
— Como se te ocurre, ya tengo la reservación, solo ponte algo más lindo, no te cuesta nada complacer a tu futuro esposo — Me ha silenciado con tan pocas palabras y vuelvo al armario con un mal sabor de boca, esta vez llevo un vestido casual floreado, el clima es algo airoso y no me siento cómoda pero fue lo mejor que encontré.
— Eso es, te ves increíble — Parece que ahora se siente orgulloso.
— Gracias — Digo de manera seca, y no vamos lejos, pero en cuanto escucho el teléfono recibiendo un mensaje, respondo, es Nando preguntando si estoy lista. Ver su mensaje me ha sacado una sonrisa entre toda esta amargura.
Le pido pasar un poco más tarde y accede sin cuestionarme ni un poco. Y junto a mí, Carlos habla sobre detalles de la boda que poco me importan. Una vez que terminamos el supuesto almuerzo, comienza a conducir por otro rumbo, creí que me llevaría de vuelta a la casa pero nos alejamos más de la cuidad.
— ¿Dónde estamos? — No reconozco el área, y me pide bajar. Frente a mí está una gran casa, muy lujosa y extravagante, la calle no es de asfalto, es más bien concreto, el color gris que deja es lindo y algunos árboles cerca. Es bastante solitario, se escuchan algunas aves cantar y el ruido de los autos se ausenta con grandeza, demostrando lo lejano del lugar.
— Adelante, bienvenida a casa — Dudo mucho antes de entrar.
— Vamos Daniela que no muerdo — El jardín no es muy verde, ni la casa tan colorida, las paredes son de tonos oscuros, ¿Quién vivirá aquí los locos Addams?
— A partir de hoy vivirás aquí conmigo — ¿Qué fue lo que dijo este loco?
— Lo siento pero eso no va a pasar, recuerde que debe cumplir con el contrato y no quiero que las personas se hagan de malas ideas, prefiero seguir como hasta ahora, como bien dijo la boda será en unos días, nada cuesta esperar un poco — Su actitud cambia por completo ante lo que digo, mostrando su lado temible.
— Como quieras, en la mesa está una bolsa con los zapatos y accesorios que usarás en la boda, necesito la lista de tus invitados, y si quieres irte hazlo ahora — Ese es un gran cambio de actitud, me da la espalda y solo señala la puerta con la mano, tiene un gran anillo en el dedo y salgo de ese lugar con la bolsa. El lugar es realmente solitario, no hay ni una tienda; Comienzo a caminar, no encontraré ni un taxi por aquí al parecer, al menos no traje zapatillas tan altas o estaría muerta.
— Es un maldito loco, delante de las personas es tan atento y considerado, pero en cuanto estuvimos solos su actitud cambió, es un viejo enfermo y solo porque no accedí a sus caprichos, que idiota — Además, la tonta ensalada que siempre pide para mí no me cayó nada bien está vez y ahora estoy vomitando a un lado del camino.
— Ya se que puedo hacer — Llamo a una tía, vive en otro país. Ella me aconseja sobre náuseas en la mañana, además dice que debo desparasitarme. Pero me pregunta sobre mi regla, me tocaba hace dos días, nunca se me atrasa, pero yo no soy sexualmente activa, a excepción de aquella noche, pero es casi imposible que yo haya resultado embarazada, eso es muy tonto, ¿o no?.
..
.
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 76 Episodes
Comments
Mercedez Peréz
bueno escritora asta aquí dejo de leer su historia ya que es muy aburrida espero encontrar algo bueno más adelante osea una mejor historia
2024-07-06
2
Daniela ❤️
devuelbete en lo mismo q llegaste ..
2022-12-16
3
Lucia Feliciano Falcao
Que guay yo esperaba esta noticia con ansias, este Carlos es un enfermo, la suerte de Dani es que no se casa con el si no, iba llevar muchas palizas y iba ser más violada que las lechugas 😡😡😡.
2022-10-04
1