Subió mi maleta al auto, se miraba triste.
Podía sentir su dolor. Pero deseo estar lejos de este lugar, quiero un abrazo de mi madre, ver a mi hermano y a mi mejor amigo. Amo estar con Leltxu, pero en estos momentos siento que estar alejada de los lobos me puede ayudar.
El manejo en silencio, no me decía nada.
Yo miraba por la ventana, solo se podía observar oscuridad, sentí de pronto miedo, cerré los ojos y respiré profundo.
El tomo mi mano.
- Ya llegamos, no tengas miedo ya te dije que no dejare que nada te pase.
- Lo sé y confío en ti, pero hay muchas cosas en nuestra contra que no creo poder con tanto.
El me abrazo.
- Tú fuiste elegida para ser mi compañera, ella es muy sabía amor, sabe que eres fuerte, lo vamos a lograr.
Lo mire con ternura y acariciaba su rostro.
- Te amo Leltxu.
Nos besamos con pasión.
- Ven, mi madre nos espera.
Mientras bajaba las maletas, su madre salió de la mansión y me abrazo.
- ¡Cariño!, ¿estás bien?, me miraba de arriba hacia abajo.
- Estoy bien.
- ¡Lo pagarán, te lo juro!
- Estoy bien, decía sonriendo.
- ¿Y esas maletas?, le decía a Leltxu.
- Quiere ir a casa.
Me miró asombrada.
- Quiero ver a mi madre, necesito estar con mi familia.
- Si te entiendo, dijo triste.
Se que ella me considera de su familia, pero aún no me siento parte de su familia.
Al entrar escuché a su padre gritando
- Ahora regreso, decía Leltxu.
Las llamadas no dejan de llegar, las otras manadas están fastidiando, quieren saber de ti y de Leltxu. ¿Quieres comer algo?, decía su madre.
- Si, caminamos a la cocina.
Me senté, ella me sirvió un café.
- Amarís, todo se va arreglar linda, decía acariciando mi cabello.
- Sí, decía yo, pero mi corazón sabe que esto terminará en tragedia y es lo que menos quiero.
- Espérame aquí, decía su madre.
Salí de la cocina, quería decirle a Leltxu que estaba cansada y necesitaba dormir.
Cuando me acerque a la biblioteca mire un cuadro de un hombre, era la foto de su tío que se enamoró de una humana. Era un hombre muy guapo, lo mire y pensaba en lo infeliz que fue al ver a su amada muerta en sus brazos, sentí un dolor en mi pecho.
Después escuché pasos en la biblioteca, me quedé escondida a las afueras de la biblioteca escuchando la conversación.
- Hijo todo sería más fácil si eliges una luna y la marcas, aunque no la ames, eso te va ayudar a qué tú y Amarís estén juntos.
- ¡No jamás!, gritaba Leltxu.
- Es un sacrificio por tu manada y por su amor, piénsalo asi.
- Estás loco, es como si engañara a la mujer que amo.
- Solo la vas a marcar.
- No me trates como estupido padre, sabes que para que la marque tengo que acostarme con ella.
- ¡Bueno te acostaste con otras antes!
- Pero por qué no sabía que Amarís existía.
- Leltxu te acostaste con otras para olvidarla, sería lo mismo.
- ¡No dije que no!
- ¡No voy a dejar que mi hijo renuncie!, gritaba.
- ¡Que vas a hacer para impedirlo!
- ¡No me provoques Leltxu, sabes que tú peor enemigo puedo ser yo!
- Pensé que me querías padre.
- Y por qué te quiero, te lo estoy pidiendo, ella no se va enterar solo elige una luna para la manada, la marcas, que ella viva con su mate y tú con la tuya.
- ¡Te estás escuchando!, eso jamás va a funcionar.
- Es una opción, la otra es tu muerte.
- ¡Tiene que existir otra salida!, gritaba Leltxu desesperado.
Camine a la cocina de nuevo, sin hacer ruido.
- ¿Estás bien?, decía su madre.
- ¿Puedo ir a dormir?
- Si claro cariño, me dejó en la habitación de Leltxu.
Me acerque al ventanal y miré la luna.
- Diosa por qué me castigas así, ayudame a ser una luna para la manada de Leltxu, pedía en silencio.
Me recosté en la cama y me quedé dormida.
Las pesadillas regresaron.
- ¡Nooooo!, grité, me levanté sudando.
- Tranquila, decía Leltxu abrazándome.
Lo abrace.
- Soñé que te asesinaban, comencé a llorar.
Amor, elige otra luna, no me importa sufrir un rato, pero no quiero verte muerto, le decía con los ojos llenos de lágrimas. Se que va doler saber que estas con otra, pero no voy a poder vivir sin ti, le decía acariciando su rostro.
El me besó.
- No quiero a otra, solo a ti.
- Pero te mataran.
- Amarís podemos escapar, decía el besando mi cuello.
- ¿A dónde?, tu padre te va a odiar, por mi culpa y ellos no van a parar hasta matarte.
- No me importa, prefiero renunciar a todo menos a ti.
- No, serás infeliz, lejos de todo lo que amas, yo puedo ser tu amante, lo bese mientras lloraba a mares, mi corazón estaba doliendo con solo decir esas palabras.
- Amarís deja de decir tonterías, mañana saldremos temprano a tu casa, regresando de viaje les diré mi decisión a la manada.
Nos abrazamos con tanta fuerza, ambos tenemos miedo y sufrimos de dolor.
Nos amamos tanto y duele mucho saber que este amor está prohibido, la muerte es nuestro principal enemigo, que ni el amor tan grande que sentimos puede contra ella.
Me quedé dormida con mi rostro en su pecho, amo su aroma y su corazón late tan rápido que es una hermosa melodía para mis oídos, su calor es tan acogedor que se siente como una brisa cálida de verano en tu rostro, mientras el frío te acecha.
El acariciaba mi mejilla con su nariz.
- ¡Despierta bella durmiente!
Abri los ojos y me besó.
- Es hora de irnos, el avión sale en dos horas.
- Voy, dije besando sus labios de nuevo.
Nos arreglamos para ir al aeropuerto, cuando bajamos del auto dos hombres de negro nos seguían.
- ¿Es tu manada?.
- Si son mis mejores hombres, decía el mientras cruzábamos el detector de metal, ellos se sentaron a un lado de nosotros en el avión, viajamos en primera clase los demás lugares estaban vacíos, el no quería a nadie cerca de nosotros, solo sus hombres.
- ¿Estarán con nosotros todo el tiempo?
- Es lo mejor amor.
Lo abrace, me quedé dormida.
Las pesadillas seguían, está vez mire a Serena en la cama con Leltxu.
Me levanté agitada de nuevo.
- Tranquila, decía Leltxu.
Lo mire y no pude evitar llorar.
- Es solo una pesadilla, decía el limpiando mis lágrimas.
- ¡No quiero que la elijas!, le dije molesta.
- ¿a quién?
- A Serena, le dije con rabia
El sonrió y me besó
- Jamás voy a elegir a nadie, ya elegí a mi luna y esa eres tú mi único amor.
- ¿Me amas?
- Como un loco, me besó con pasión.
Me acerque a su oído
- Solo quiero que me hagas el amor a mi y nadie más.
El me abrazo con fuerza
- Jamás mi luna.
Bajamos del avión, yo tenía mis ojos hinchados no deje de llorar en el camino, ese maldito sueño me afectó mucho.
Leltxu trató en todo el camino que dejara de llorar pero no podía evitarlo, lloraba en silencio, mis lágrimas sólo brotaban.
Llegamos a una mansión, sus hombres bajaron las maletas y estacionaron un auto frente a nosotros, le entregaron unas llaves.
- Pensé que me quedaría con mi madre.
- si eso quieres, dijo el con tristeza.
- ¡No!, lo abrace y lo mire con ternura. Quiero quedarme con mi mate.
me besó el cuello.
- Muero por hacerte el amor.
yo me reía.
- Ven, vamos a ver a tu madre.
Me subí al auto el se subió y encendió el auto.
No dejaba de mirarlo, me encanta, lo amo con locura, no quiero compartirlo con nadie, quiero que sea mío, pero mi mente no dejaba de atormentarme, recordaba mi sueño donde miraba su cuerpo tirado sin vida y mi cuerpo tembló de miedo.
El tomó mi mano.
- te amo Amarís no lo olvides.
- y yo mi Leltxu te amo con todo mi ser.
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Updated 61 Episodes
Comments
Odixa Perozo
amo este trama
2025-01-03
0
Consuelo Flores
supongo q la estás haciendo de emoción porque si la marca se acaba la novela
2024-12-12
1
alexa cb
que guapura de hombreee /Drool//Drool/
2024-10-16
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