Como tuvimos tanto éxito con la “poción de amor” todos los meses le pedíamos a Nancy que le colocara unas cuantas gotas al tecito de la mamá. Ella misma podía ver que al día siguiente de beber las gotas, la Señora Viol andaba radiante de felicidad.
Y así fue como la tonta de la Nancy, un día que se sentía muy cansada pensó en usar las gotitas para irse a dormir. Así que se llevó su tecito para los dormitorios del servicio donde dormía con su hijo Marcos que ya tenía 7 años -el famoso hijo del trauco-
Y a eso de la media hora después me cuenta la misma Nancy
Nancy: oh que calor mas grande, siento que los pies se me van a revientan de la calor, y Marcos que se me pega al cuerpo -necesito refrescarme un poquito-
Sali del dormitorio y fui al baño a lavarme la cara las manos y no sé en qué momento me estaba echando agua fría en mi florcita, cuando llega Orlando el capataz del fundo, que esta mas gueno que pan con chancho, 1.80 cm tremenda espalda todo musculoso duro por donde lo mires, carita cuadrada con esa pera partida y esos ojitos de color miel, el me estaba mirando como regaba mi florcita con tremendos ojos y no se en momento se me ocurrió tirarme encima de ese tremendo hombre.
Nancy: el caso sita Viol es que yo creo que las famosas gotitas que le esta dando a su mamita son venenosas, ya que ayer mas haya de dormir bien, me la pase jugando toda la noche con el capataz y si me dolía el cuerpo ayer imagínese como duele hoy, la espalda la tengo como quebrada.
Celin: por Dios Nancy te acostaste con Orlando – interrumpiendo la conversación que teníamos a solas en la cocina-
Nancy: a no, ustedes no se vengan hacer las muy santas, yo se que las famosas gotitas que le están dando a su mamita algo tienen la cochinada porque yo nunca había hecho una cosa así.
Viol y Celin: y Marquitos??
Nancy: -colorada como tomate- eso ya lo expliqué y lo tengo hablado con su señora madre a mi me ataco el Trauco.
Celin: sabes Nancy en una cosa estamos de acuerdo santas no somos, pero tampoco somos tontas, así que vamos ayudarte a buscar una manera de que Orlando te responda como hombre responsable, el muy condenado – riéndose entre dientes- pero pobre de ti que hables de las gotitas.
Se hizo un silencio sepulcral y luego siguió.
Celin: si llegas a jugarnos chueco soy capaz de darte veneno de verdad me escuchaste.
Nancy: -blanca como papel- sabe mi niña Celin yo le cambie los pañales cuando usted era guagua y jamás me imagine que algún día me iba amenazar.
Celin: eso es para que vayas viendo que jamás se conoce a la gente. -se dio media vuelta y salió de la cocina-
Viol: Nancy no te preocupes, mi hermana es muy melodramática y detesta que la dejen en evidencia, tú sabes cómo es ella jamás te haría daño.
Nancy: -con mucho miedo- no estoy tan segura.
Ese mismo día Celin nos invito a salir a todos y como no estaba lloviendo agarramos camino hasta que de pronto estábamos en el aserradero, cuando papá nos vio lo abrazamos y el no estaba muy contento ya que no le gustaba que los trabajadores nos echaran el ojo a nosotras es que ya estábamos mas crecidas.
Celin: papá quiero contarte que el capataz anda saliendo con la Nancy. -se lo tiro de una, y todos la miramos, pero ella tan natural- todos lo sabemos ayer los vimos desde la ventana del tercer piso como se abrasaban y besaban, que piensas de eso papá.
Papá: …..no tenia idea que ellos tenían una relación.
Celin: nosotros preferimos venir todos a contarte antes de decírselo a la mamá, ya que ella es más sensible a estos temas.
Papá: muy bien hecho y les voy a pedir que todavía no le cuenten a su madre para que pueda arreglar un asuntito antes.
Celin: el próximo fin de semana viene el cura y a esa altura este problema ya debería estar resuelto no vaya ser que la
Nancy salgo con que de nuevo apareció el Trauco.
Papá: -puso unos tremendos ojos de la impresión, creo que no sabia la cantidad de información que manejábamos- lo único que les pido es que no se digan a su madre yo se lo voy a decir.
Todos: si papá.
Después papá mando a llamara a Orlando y se pusieron a conversar en la oficina.
Papa: Orlando toma asiento, te mande a llamar porque me entere que estas en una relación con Nancy. Quiero saber cuáles son tus intención y cuando van a formalizar.
Orlando: -tenia la cara de cuadritos y no entendió ni la mitad de lo dijo mi papá- yo no tengo nada con la señorita Nancy, a usted tienen que haberle llegado con comentarios raros.
Papá: mira Orlando, mis hijos, todos mis hijos te vieron ayer con la Nancy muy acaramelados, ¡todavía me los vas a negar?
Orlando: -rojo hasta las orejas- Don Omar esto tiene una explicación, fue la sita Nancy que se me tiro encima, cuando llegue ella se estaba tirando agua en su cuerpo y de pronto al verme se tiro encima mío y yo soy humano que mas podía hacer.
Papá: -con la cara seria, ceño fruncido con tono profundo- quieres decirme que una mujer que mide no mas de 1,40 y con suerte alcanza a pesar 50 kilos se tiro sobre ti que mides 1.80 y pesaras unos 120 kilos y esa mujer te VIOLO.
Orlando: -asustado- padrón no lo vea así, porque de esa forma no va a creerme, pero le juro que es verdad.
Papá: mira Orlando ya llevas trabajando aquí casi un año, pero la Nancy llego a nuestra casa cuando tenía 9 años, de eso ya han pasado 12 años, cuando tenia 14 años vino con el cuento que estaba embarazada del Trauco y su hijo ahora es un muchachito grande, pero si tu quiere ponerte a jugar con mi empleada mejor te vas aquí.
Orlando: me esta echando.
Papá: no te doy la opción o te casas o te vas.
El caso es que dos días antes que llegue el cura mi papa conto en la hora del almuerzo que el Orlando se quería casar con la Nancy, a mamá le pareció muy bien, ese mismo día mandaron a matar un cerdo y dos corderos. Cuento corto el domingo tuvimos misa y casorio
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