Tsunami

Después hubo una calma un silencio tan profundo y desesperante como el mismo ruido del terremoto y paso algo que jamás me imagine, el mar, el mar se empezó a desaparecer cada vez más y de pronto todo el golfo de nuestra localidad quedo vacío ya no había mar.. todas las personas salieron a mariscar y empezaron a sacar pesces, jaibas y todo tipo de mariscos, pero mi madre casi se vuelve loca gritando

Mamá: SALGAN DE AHÍ VA A VENIR EL MAR, HAY QUE CORRER AL CERRO, VENGAN CORRAN.

Pero nadie le hizo caso incluso se burlaron de ella por ser tan enojona, mi papá la miro, nos subió a todos al camión y llegamos a lo mas alto del cerro, en el camino pasamos a buscar a varias familias que no se querían ir a lo alto pero mi papá los trataba de convencer de buena forma y cuando estábamos en el alto pudimos ver como venía una masa gigante de agua, palos, tierra y lo peor es que se comió a toda la gente que había bajado a mariscar, mis hermanos mientras jugaban con los otros niños no se daban cuenta de la masacre que se estaba viviendo en ese mismo momento pero me acerque a mi mamá y la tome de la mano y no pudo más, empezó a llorar, no se podía controlar, estaba tan triste, que solo repetía

Mamá: porfiados, imbéciles, ignorantes, porque no quisieron venir con nosotros y sus lágrimas no dejaban de caer. – mi mama le hablo a papá- Omar Dios nos va a castigar por no haber traído a esa gente, que vamos hacer, que vamos hacer.

Papa: amor que podemos hacer somos humanos, no los podíamos obligar, no llores abrasame esto le va hacer mal al bebe, mejor deberías descansar ya no mires más.

Pero los gritos eras desgarradores muchos niños y mujeres, llorando y pidiendo ayuda en medio de masa de agua que lentamente se los iba devorando como el mayor de los depredadores de la tierra.

Cuando bajamos ya no teníamos muchas cosas, el golfo se había llenado de palos piedras y tenía una textura fangosa que nunca más volvió a tener arena esa playa, el muelle ya no existía, el nivel del agua bajo a la mitad, lo que nunca más permitió que ingresaran barcos al golfo, los botes habían desaparecido, La iglesia se le callo la cúpula y le faltaba un muro. Nuestra casa se veía entera, pero estaba completamente suelta y como dijo papá hay que volver a construirla sino es un riesgo vivir ahí. Perdimos animales, los camiones desaparecieron y el aserradero ya no estaba.

Lo peor fue hacer cuadrillas de rescate para tratar de sacar a la gente del agua fangosa que se había formado.. era sacar y sacar muertos después de un par de días mi padre decidió enviarnos a la casa de Castro por que recibió noticias diciendo que la casa del pueblo estaba en perfecto estado

Papá: mujer te tienes que ir en estas condiciones mi hijo no puede nacer, tu sabes, eres la mujer mas fuerte e inteligente que conozco, así que ya es momento de que reacciones. Hoy mismo te vas a ir hasta Chonchi y de ahí en barco hasta Castro por que los caminos están cortados. Cualquier cosa envia avisos por la radio voy a estar siempre al pendiente.

Mamá: no se que me pasa siento como si no pudiera controlar mi cuerpo, esta no soy yo.

Papá: no te preocupes yo siempre te voy amar, si te vas al infierno igual iría contigo.

Mamá: -ella lo miro - ¿no me odias?

Papá: claro que no eres mi mujer perfecta, todo lo que dices es ley.

Ella solo lo abraso y seguía tan mal lloro un buen rato, pero después de esto nos fuimos de nuevo a Castro, mientras mi papa en el campo reparaba la casa del campo y ayudaba a darles sepultura a tantos hombre, mujeres y niños. Parecía el resultado de una guerra.

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