Desde Donde Recuerdo

El Viaje

Todavía no puedo entender por que nos vinimos a vivir al fin del mundo.. hace unos días atrás vivíamos en la capital del país y tenia todos mis contactos y amistades como toda la gente normal, pero de un día a otro mis padres hicieron maletas y partimos a un viaje desde Santiago a una isla al sur del continente llamada Chiloé.

Niños: ¿cuánto falta?

Padres: MUCHO

No saben lo que es viajara 16 horas arriba del camión donde no tenemos el acceso a la ventana directa por que estamos en el camarote que esta atrás del conductor, ya hemos cantado todas las canciones que nos sabemos y contado todos los cuentos que tengo en mi memoria, más los vómitos de mi hermano chico y como cereza de la torta pasar por un transbordador que demora casi una hora con un vaivén del demonio y sentir el mar que nunca había visto solo escuchado y tener solo 4 años de edad. El frio que me cala los huesos y una lluvia interminable como si no quisiera parar jamás. Que paso con mi vida quiero saber, pero las explicaciones nunca se las dan a los niños al menos eso veo ya que, a mi, ni me preguntaron que es lo que yo quería.

Me llamo Viol igual que mama, Viol Fernandez Perez tengo cuatro años, tengo ojos verdes y profundos como el bosque, mi pelo castaño con rulos grandes y gordos que cuando me peino parezco una leona, bueno eso dice mi papito.

Tengo una hermana que tiene 9 meses menos que yo Celin, mi hermano Omar se llama igual que papá tiene 2 años y mamá esta nuevamente embarazada y pronto dice que va a nacer el bebe aun que nadie sabe que va ser en estos años no existía la tecnología que va a llegar en el futuro.

Después de llegar a Castro es un pueblucho pequeño que tienen muchas casas con unos palos largos en su base, están en la orilla del mar. Estas casas se llaman palafitos y son super útiles ya que cuando sube la marea las personas se movilizan en sus botes para salir a pescar. Aun que si soy sincera me importa un carajo como vivan estos pueblerinos esto lo aprendí después de muchos años, cuando ya me di cuenta que para irme de este lugar iba a vivir toda una vida aquí.

Llegamos a una casa grande al lado de la catedral de Castro es una enorme mansión tiene 8 dormitorios, 4 baños, dos livings comedores, una oficina para papá claro que se que la va ocupar más mi mami ella es la que la lleva en cuanto a todo y 6 dormitorios en una casa atrás que es para el personal de aseo y servicio doméstico. Y espacio para guardar 6 camiones grandes de transporte.

Bueno pude elegir mi dormitorio y cuando me iba a instalar Celin vino y de dijo con sus ojos llorosos “quiero dormir contigo”, la verdad es que no soy muy buena para hablar por que siento que las ideas no me salen como yo quisiera y cada vez que me explico me corrigen y pierdo la confianza en hablar.

Celin me mira con sus ojos de color mar entre sus manos lleva la manta que hace unos meses era mía pero que debí ceder por que se supone que soy la hija mayor y debo ser “buena persona”, solo ladeo la cabeza y toco la cama para que venga a dormir y así fue como nunca más la saque de mi cama…