renaci en otro tiempo
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capítulo 10
-Claro dime, Maes..... Mia jejeje- riéndose.
-necesito que vayas a investigar las zonas más pobres y me des un informe de la situación- sería
-si, pero puedo preguntar para que quiere un informe de esas zonas?- curioso.
-Sabías que la curiosidad Mato al gato? - mirando que el trago en seco- pero como no es nada malo te lo diré-dice seria
-Entonces?- esperando la respuesta.
Haré la fiesta, como sabes ya envié algunas invitaciones y me faltan mas, para mañana ya se enviaran todas, con eso ya estaría, solo faltaría mesero y meseras que sirvan las cosas o que ayuden por si alguien necesita una ayuda, se que en algunas fiestas, se ocasionan problemas, por eso no quiero esa clase de problemas, pero también necesitaré algunas personas que sirvan de guía por si alguien se pierda, y también unos nietos ya que invitaré también a los niños de cada familia, necesito personas que quieran trabajar, ya que deseo ayudar a conseguir empleos para esas zonas.
Wei la veía expectante ya que ningún noble miró la situación de aquello que no son de su nivel, ella se veía sería hablar del tema, pero tenía un brillo en sus ojos, desde ahí decidió servirla.
-Si señorita lo haré, para mañana tendré el informe, me iré, si necesita algo solo toque esta campana, es para llamarme, vendré tan rápido como pueda a su llamado.
Esta bien, gracias Wei, Nos vemos mañana
Wei se fue dejando sola a Mía, ella se acostó y se durmió, al parecer estaba muy cansada.
en otra parte con el segundo príncipe
-Como no pueden encontrar a la sacerdotisa, es sencillo encontrarla, solo deben buscar a alguien que tiene un panda como Bestia, es tan difícil? Nooo verdad, vayan sigan buscando, vayan por todo el reino si no esta aquí debe estar en otro imperio. Solo busquen!!-Exaltado gritaba.
-Ya querido no te exaltes! una mujer de ojos claros y un figura de reloj de arena, le dice mientras toca su mejilla
Mi vida ven necesito tus mimos, de forma sensualidad besa su mejilla
-No estoy con ganas de hacerlo, es frustrante que no logren encontrar a la sacerdotisa- sentado
-Pero la encontrarás pronto, mientras tanto saca tu frustración haciéndolo conmigo- se sienta en sus piernas mientras besas su cuello.
Este en un segundo empieza a manosear los senos, mientras la sube al escritorio, este mismo empieza a sacarle la ropa que traía, él deposita su miembro dentro de ella mientras está Gime de placer.
-~mm~ ah~~ asi~- esta empieza a gritar de tan duro que embiste contra ella, después de una hora llegan al clímax
.mm~ alteza se siente mejor? Pregunta mientras se acomoda la ropa
-Si un poco mejor- este sin darle importancia- Vete necesito hacer cosas.
-Como usted ordene majestad- mientras le da un beso en la mejilla, ella se va.
El segundo príncipe agarra un libro y empieza a leer el contenido.
El que tenga de su lado a la sacerdotisa gobernará y llevará una vida de poder.
Solo leía esas partes, ya que su entender de la lengua antigua era a nulo.
Después de intentar leer más pero no pudo fue a dormir.
En otro lugar
una persona encapuchado entró al mercado negro, había varias tiendas con venenos, pieles, objetos prohibidos, esta entró en una carpa.
-hola que se le ofrece-preguntando
-Hola, Necesito un gato negro con ojos azules-
-Claro puede seguirme- esta la guio hacia la parte de atrás.
-Que la trae por aquí señora- mirando a la persona encapuchado.
-Solo necesito veneno uno que podría hacer quedar mal a una señorita en una fiesta- esta se saca la capucha y es la madre de la zorra, la concubina
-Veo que aun considera este lugar, es un alago
-Claro que si, después de todo su último veneno me hizo un favor- sonriendo.
-Ya veo madam- el viejo le da un beso en la mano a esta.
-Que tal un afrodisíaco, puede poner en la bebida o en la comida de la persona que desea humillar- dice sonriendo.
-No, no tendré acceso a la comida ni la bebida-seria
-Ya se, puede poner esto en su ropa- le da un frasco pequeño lleno de polvo
-Que es?- mirando el frasco
-Es un polvo que hace sentir como si miles de hormiga estuvieran caminando por la piel, hace efecto 2 horas después de ponerlo, el que tiene contacto con el siente dolor y hace que quiera sacarse la ropa- dice a lo ultimo
ella sonríe con malicia -Gracias, tome- le da una bolsa de dinero
-Gracias a usted- este hace una reverencia.
La concubina sale de ahí poniéndose su capa y vuelve a la mansión, deja el polvo escondido para después llevar a cabo su plan.
Hizo varios postres distintos, e incluso hizo jugos después de preparar todo ella salió y se alistó par irse, primero pasó por la cocina y ordenó que salieran de ahí, ya que cocinarla el desayuno para ella, los sirvientes salieron de inmediato ahí quedo una hora y salió con una bandeja de ahí fue al despacho de su padre.
Quien te permitió entrar si se puede saber?- dijo el general.
-Hola, padre, perdona que te moleste- dijo haciendo una reverencia.
-Bueno, que es lo que quieres?-dijo con un tono enojado.
-Hice algunos postres, ME preguntaba si quisieras probarlos- Mía dice en modo tímida.
-Eso es lo que hiciste? nunca vi un postre asi- mirando extraño los postres con esas formas y con un envase extraño- donde conseguiste eso?
-oh, si los ingredientes los compre en un puesto extranjero justo había llegado me atendieron y se fueron al parecer ya no tenían mas cosas que vender(no le puedo decir que los ingredientes los tengo yo y menos que tengo cosas del siglo XXI) y el recipiente me los regalaron los mismos extranjeros me dijeron que en otra tierra son famosos- explicando.
-Y como sabes hacer estos postres?- dice mirándola de forma sospechosa.
-Una vez una viajera me enseñó a prepararlos, en casa de mi abuela- sonriendo- por eso quiero que tu lo pruebes
-Está bien, déjalos en la mesa esa y vete, estoy ocupado- dice mirando el recipiente.
-Bueno padre, Disfrute espero que le guste- saliendo de la habitación.
Mía se fue de ahí rápido, ya que tenía que ir a visitar a su abuela y llevarles algunos de los postres.
El general se paró y miró la bandeja, había postres de aspecto raro, aunque parecía delicioso, de pronto sonó su estómago del hambre.
Agarro uno y le dio un mordisco
Mmm, esto es rico- disfrutando el sabor- después tomo otra cosa
mmm esto también está rico- tomándose todo, termino todo el postre- no pensé que cocinarla también, le diré que me prepare uno todos los días- estaba encantado con los postres y el jugo que le dio.
Lo que le dio Mía a su Padre.
Mía mientras llego a la mansión con Chung.
Entró y le pidió que traiga a su abuelastra y los niños .
Chung se fue y al cabo de un rato, se escuchaba pasos corriendo.
-Mamiii-
-Hola mi niña, cómo estás?- alzando a la pequeña
-Bien Mami, Ping ya está mejor, Quieres ir a verlo?-toda tierna.
si vayamos para allá- sonriendo.
Cuando llegan ve a su abuela platicando con Ping este se le ve emocionado escuchándola
Ping Mami vino- la pequeña Mei se bajó y se fue junto a su hermano.
-Hola abuela, hola Ping- mientras entra
-Hola nieta- esta le da un abrazo.
-Hola Mama- este se le ve tímido al decir esa palabra.
-Como estás pequeño- mira mientras lo revisa- tomaste las pastillas que te di?.
-Mejor, creo que pronto me levantaré y si tome los tesoros que me dio-sonriendo
Me alegro mucho escuchar eso, bueno les he traído algo, espérenme aquí- saliendo de la habitación, Se fue a la cocina y pidió una bandeja..
Después se metió al espacio y sacó algunos postres, Brainton estaba entrenando su fuerza así que no lo molesto, pero le dejo unos postres en la mesa con una notita.
Después salió y puso los postres en la bandeja, la estaban esperando en la habitación, cuando entró allí los tres miraban lo que traía estaban curiosos.
-Bien estos son postres les traje, yo los hice así que pueden comer, abuela, si quieres podemos tomar té.
-podemos tomar te afuera mi niña- mirada Ping- ah Ping no puede.
si eso es lo que te preocupa yo lo llevo, tú pide que lleven esto al jardín y que preparen té, mientras yo llevo a Ping, pídele que me vengan a mostrar el camino-mientras se prepara para alzar a Ping.
Una sirvienta que pasaba afuera, les indico el camino hacia el jardín trasero, Mía con poco esfuerzo llevo a Ping y lo sentó en una de las sillas.
-Bien, ya estamos esperemos que traigan las cosas-Mía mientras se sentaba- Ping, ya que te sientes mejor, será mejor si haces algunos ejercicios en cama para que puedas empezar a caminar
Si mama-.
Mei y su abuela ya habían llegado Con la bandeja y el té, empezaron a disfrutar del té.
Mm esto está muy rico- los 3 estaban disfrutando los postres
me alegro que les gusten, pero no coman rápido les puede hacer mal- le aconseja a los niños.
esto está rico mi niña- la abuela era fanática de lo dulce, y los postres que trajo Mía eran muy deliciosos.
-Gracias abuela- sonriendo.
-Los cuatros charlaron un rato largo.
-Abuela, iras a mi fiesta de cumpleaños?- haciendo pucheros.
-Si iré- mirándola
-bien, te mandare la invitación, puedes llevar a los niños si es que quieres o si pueden, ya que Ping se siente un poco mejor, creo que en unos días ya podrá caminar-
Claro que iré, pero no tenemos vestimenta para ese día- apenada.
-oh no importa abuela, de eso me encargo yo- feliz- que tal si invitamos a tu amigo también?
-Me parece buena idea-
esta bien, puedes mandarle la invitación te la mandare a ti y si no tiene traje de eso yo me encargo también
-Bueno mi linda niña.
Cuando llego la hora del almuerzo Mía se fue, ya que tenía que revisar las últimas cosas de la fiesta, su vestido decidió hacerlo ella, ya que estaba segura que alguna de las dos arpías intentaría hacerle algo.
Al llegar tuvo que almorzar ellos, y la pequeña Tuo le preguntó si a la mañana estaría ocupada ya que quiere ir de compras para la fiesta, Mia acepta ir con ella, El padre quería saber si podía hacer más de esos postres, lo miro atónita, pero acepto, las arpías, dijo madre e hija se miraron extrañados.
-De que postres hablas querido-
Mía hizo postres que eran deliciosos, deberían probarlos-
-Pero querido, para eso está servidumbre, que ellos te hagan los postres.
-Es que estos postres son exóticos "Madre"- hace énfasis en la última palabra.
y que? Puedes darles la receta, además una dama no debe mancharse las manos como un pueblerina- estaba claro que la quería humillar
Las recetas no son mías padre- actuando avergonzada y temerosa.
Ya deja de decirle eso, no importa, Mia yo quiero que prepares mas de esto- dice para acabar la conversación.
-Si padre-hace una sonrisa provocativa para las concubina y su hija, esto no lo vio EL general.
Después del almuerzo Mía se fue a su habitación, allí la esperaba Wei.
-Buenos días Maestra
-Buenos días, dije que me llamaras Mía-un poco sería.
-Lo siento, Mia-
Esta suspira- ya encontraste algo?
-Si Mía , hay algunos nobles que cobran los impuestos, van aumentando y eso hace que esas zonas se vuelvan más pobres, la gente busca trabajo y no lo consiguen, algunos incluso optaron por robar, los niños mueren por eso, algunos contraen enfermedades y mueren, los niños que van a orfanatos van en aumento e incluso algunos orfanatos ya están llenos que no pueden recibir más.
Ya veo y que hacen los emperadores o los príncipes
-Ellos no están enterados del tema, aunque el quinto príncipe a hecho varias quejas, no le hacen caso, e incluso algunos nobles prefieren verlos morir
-mmm está bien-sería- por ahora está tarde iremos a ver esos lugares y veré si podremos contratar.
-Si señorita- este hace una reverencia, mi le estaba por decir algo pero ya no le dio ganas de volver a repetirle, al menos no le dice Maestra.
Ya que tenía información de esas zonas, d3cidio ayudar a las personas con comida, y algunas medicinas, pero tendría que ocultar su rostro, no quería tener que estar en la mira de lo nobles.
-Wei, vas acompañarme? O iras con tu príncipe a informarle o algo?
-Tengo que darle la información, y veré si tiene alguna misión para mi- mientras la mira
-oh esta bien, ve tranquilo, si terminas antes, puedes ir a ayudarme, Brainton irá conmigo.
-Esta bien señorita, me despido- se dio la vuelta pero Mía hablo
-Espera tome- le da un postre para el- gracias, aunque pronto no será postres, por ahora solo acepta esto.
-Si señorita- toma el postre y lo come, de ahí hace una reverencia y sale de la habitación.
Mía entra al espacio dimensional, ve a Brainton comiendo el postre que le dejo temprano, el lo ve y la saluda.
ella se acerca y lo saluda
-Necesito que me ayudes lo harás- poniendo un puchero
Si lo haré, que necesitas?- con la boca llena
-come antes de hablar menos- le da un golpesito en la frente
-Que es menso?- curioso
-mm alguien que es bruto, estúpido o que no piensa- explica.
-eh?-
-no nada menso- se ríe de esto
-Bueno que necesitas?- pregunto
-Necesito que me ayudes a repartir verduras y frutas a los más necesitados e incluso daré los postres que hice temprano, esos están en el almacén donde puse los panes, y como dije los postres, necesito que me ayudes por fis- sonriendo.
-Bueno yo te ayudo Mia- este se levanta.
-Por cierto en la cabaña no hay ropa de hombre?
así si hay, ven te acompaño- dice levantándose de la mesa.
Estos se fueron a la otra cabaña de ahí, camino varios metros hacia una puerta, la abrió y dentro se veía ropa de hombre y mujer.
bien elije lo que te vas a poner, yo elegiré algo también- mientras entra.
Brainton empezó a mirar que se podía poner,, en cambio Mía eligió algo de ropa de hombre.
Mía salió de la habitación y fue a la ella sola podía entrar, esta vez se quejo y que al estar toda la habitación de color blanco y con una mesa la cegaba, de pronto esta misma empieza a cambiar la mesa cambia a un sillón, un escritorio y un lindo florero. encima del escritorio hay una nota
***Querida Mia\, este espacio se adapta a tu gusto\,
Si alguna vez quieres sacar las cosas que hay dentro de las habitaciones sin entrar en el espacio, solo debes decir estas palabras según lo que quieres sacar.
Lo de la huerta: Flewirl
del laboratorio: Maendi
Lo de la librería: butwo
Lo de la cocina: ģechura***.
Esto a Mía le extraño parece que este espacio es su cuarto, pero aparecen cosas para ella que ni entiende. Por ahora deberán esperar a ver que pasa.
Mía seguía pensando que todo era raro, después que termine de planear la fiesta, investigara el espacio completo
Cuando salió vio que Brainton ya estaba listo, salieron del espacio, Brainton y ella salieron a escondidas de la mansión, fueron a las zonas pobres.
Ni bien llegaron vieron con sus propios ojos como estaban todas las calles llenas de basura, chicos pequeños pidiendo comida, vio como estaba desgastado, sin vida, de pronto vio a una señora desmayarse, Mía se apresuró a llegar a ella, sintió su pulso, tenía la presión baja, saco un postre y se lo dio de comer.
La gente que estaba ahí empezó a Acercarse al desconocido que le estaba dando eso a la señora, empezaron a ver, que esta empezó a recomponerse, un chico de unos 17 años se acercó a la señora preguntando -¿Cómo estás, abuela?- preocupado
-Está bien déjala respirar-Mía seria.
-Gracias, quien es usted?- mirando al desconocido.
-Soy el doctor Zhuo- invento su nombre.
-Ya veo, gracias- miro a la señora- Abuela te dije que no salgas-
-Está bien hijo, Gracias doctor-agradeciendo a Mía.
-Que hace un doctor por estas zonas? - pregunta un hombre curioso.
-Vengo a ayudarlos a ustedes, si es que quieren- sería.
-Está bien, pero que quiere a cambio, no tenemos dinero- dice otro hombre.
Claro que no confiaban, ya que unos nobles los hicieron estar así.
-No necesito, nada solo vine, ya que una amiga mía vendrá mañana para aquí y quiero que la ayuden dando una explicación corta.
Muchas personas vieron extrañados a este hombre.
-Necesito Una casa, necesito que llamen a los que necesiten alimentos, ropa y atención médica, yo les ayudaré.
Pueden usar mi casa- hablo la señora que se desmayó.
-Bueno llévame a ella, y los demás avisen a los que más necesiten y sus familiares.
Después de un rato todos estaban avisando, incluso vinieron niños y ancianos.
Mía le pidió hacer una lista para saber quienes ya habían venido lo anotarán y hacer filas. También pidió ayuda al nieto de la señora que anote quien viene por ayuda médica.
-Señora, me daría una habitación por favor, tengo que sacar las cosas de mi bolsa - la señora la miró extraño, pero le dio una habitación.
Mía empezó a decir los conjuros y empezó a salir verduras, panes, frutas, y ropas, todas como un pack como ella lo necesitaba para darles a las personas.
Después llamo algunos hombres, claro le pidió permiso a la señora de casa, los hombres sorprendidos por las cosas que había en la habitación, miraron a Mía, mejor dicho al Doctor Zhuo.
Los empezó a organizar, sabía que estas personas necesitaban esto urgente.
Le dio órdenes a 5 hombres para dar verduras y frutas.
Otros 5 debían anotar lo que daban y a quienes daban.
Otros 5 daban pan y ropas, mientras otros 5 anotarán a quienes ya dieron.
Las personas venían a montones, aunque no veían la cara de la persona que los ayudó, estaban muy agradecidos.
Mía mientras tanto atendía a los pacientes, mucho de ellos tenían anemia, así que le daba la orden de pasar a buscar las verduras y lo que necesitaban. Otros tenían fiebre y tos, para esto ella les daba pastillas en un frasco, ya que no quería que pregunten y solo les decía que tomen cada ocho horas una de ellas con agua. Todos miraban extrañados las pastillas, también les dijo que no muestren a nadie, porque les podían sacar y los necesitaban para mejorarse.
Todos se sentían curiosidad y agradecimiento que preguntaron cuanto sería, ella les respondió que a la mañana siguiente vendría una señorita, que la atiendan como su igual. Ellos estuvieron de acuerdo.
Ya cuando estaba anocheciendo, Wei vino y vio a toda la gente reunida, extrañamente todos se veían felices y se llevaban cosas en sus manos.
Mía que salió a tomar aire, sin sacarse la máscara lo vio y se acercó.
-Hola Wei por fin apareces- dice mirándolo
-Señorita Mía?- Este miro a la persona que estaba enfrente de él y parecía un hombre débil, pero la reconoció.
-shhh- callándolo- no hables fuerte, no quiero que sepan que soy una mujer- pegándole en la frente.
-Está bien, en que quiere que le ayude?- curioso.
-Ven, pero antes ponte una máscara- esta le da una y se lo pone.
Los dos se acercan y Brainton parecía cansado así que Mía-ven para acá-este la miro y se apresuró- descansa ahora Wei ayuda aquí tienes que anotar quienes vienen y que cosas necesitan.
Ni bien dijo eso Wei empezó a trabajar
Estuvieron toda hasta las 12 de la noche, estaban agotados, ya no quedaba nadie excepto los que ayudaron, estos les agradecieron muchas veces a los tres, se llevaron lo que ellos necesitaban.
Mía sabia que esto solo le alcanzaría varios días, pero les enseñó como cocinar las verduras y como mantenerlas frescas, así como las frutas. En sí les dio una recetas para cocinarlas, aunque para estos se le hacía extraños ellos sabían que era por algo.
Así que se fueron a su casa y disfrutar con sus familias, Mía Les dijo que pronto volvería con más cosas.
Los tres se despidieron de la señora y su nieto, se iban a casa Wei pregunto si podía dormir en la cama y Brainton también ella al llegar a su patio, se metieron al espacio.
Mía que se quería bañar pregunto si ellos querían hacerlo, ellos dijeron que no había una bañera, ella les dijo que le sigan, les mostró el baño, como usar la regadera, ponerse champú y jabón, les dijo que en sus cuartos había un baño para cada uno.
Estos se bañaban asombrados por la bañera y lo rápido que bajaba el agua como si estuvieran en una mini cascada.
Se bañaron y salieron, sintieron un olor rico a comida.
bajaron y Mía estaba haciendo papas fritas, una ensalada de papas Lechuga,tomate.
Se fueron a lavar las manos y se iban a a sentar pero estos alistaron la mesa, Mía les agradeció y puso el pan las papas fritas y el bol con la ensalada.
Comieron y se fueron a dormir, Mía tuvo que salir del espacio y dormir en su cama, aunque le parecía incómodo.
Mía se levantó temprano y se cambió, se puso un vestido azul marino con detalles de rosas en los bordes que sacó del espacio.
Entró hizo el desayuno y levantó a los chicos, estos bajaron a desayunar jugo de frutas y mermelada con pan.
Después de eso Saco a Wei del espacio, ya que este debía hacer su trabajo como informante del Quinto príncipe, y Brainton dijo que iba a entrenar y después iba a ver más habitaciones.
Mía salió del espacio y fue hacia su patio, debía entrenar un poco antes que venga la pequeña Tuo, hizo sentadillas, zancadas, troto un poco, y empezó a practicar su manejo de la espada, necesitaba saber defenderse más, después de una hora, dejó la espada y la guardo en el espacio, se metió ella también, se bañó y cambió, salió del espacio con un vestido simple color rosado.
Cuando salió de su patio, escucho unos gritos y fue hacia ellos.
-Eres una ingrata, porque vas con esa zorra yo soy tu hermana no ella- era la zorra, le estaba pegando patadas a la pequeña Tuo.
-Tu no me tratas como tu hermana, mamá no me quiere, Mía me cuida, incluso me quiere- llorando y gritando en posición de feto para que no lastimarse con las patadas.