Matrimonio Por Contrato

Después de este maravilloso fin de semana vivido con mi esposo hablo con él para regresar a trabajar, ya que mis gorditos tienen seis meses, Alberto se molesta y me grita, algo que nunca había hecho, yo hablé con mis suegros y les conté lo que estaba sucediendo y el señor Edmundo mi suegro quedó en hablar con él al respecto.

Esa actitud de Alberto me preocupo mucho; sin embargo, yo no le puse mucha atención, hasta que Victoria una amiga muy cercana me llamo por teléfono para venir a la casa hablar conmigo, ella es dueña de un atelier reconocida y es hermana de mi abogado particular.

Me extraño mucho su llamada y sobre todo lo que me tenía que decir Como la conozco el recibí ella me cuenta de una mujer que es secretaria de Alberto y como él la complace en todo, me cuenta hasta un viaje de negocios que se fueron los dos hace un mes, que la mujer lo contó todo en el atelier y que se burla de mí sin conocerme, esto me reveló la conducta que Alberto ha tenido últimamente.

La Nana me pide que me arregle y que trate de rebajarme y ser yo nuevamente, yo hablo con mi suegra y le cuento lo que está pasando y ella me aconseja que tome las riendas de mi empresa y mi vida.

Eso hago ya que Alberto no llega temprano y casi no nos vemos. Hoy decidí ir a su empresa y me lo encontré con su amante comiendo muy juntos, él no se sorprendió, le dio igual que yo lo viera, como si eso era lo que quería, después de eso llamé a mi amiga y le conté todo y que me iba del país y que tramitará el divorcio, no había marcha atrás, llamé a mi suegra y le conté todo y me dijo que ella siempre estaría de mi parte.

Mis suegros siempre han sido incondicionales conmigo y con mis hijos que son su adoración.

Salí rumbo a Canadá con la Nana y mis hijos, quería hablar con mi abuelo y contarle todo y me lo encontré muy grave, le había dado un infarto por un disgusto y estaba hospitalizado, mi madre me cuenta que después de la muerte de la abuela él no estaba bien de salud, pero que vio un comentario en una revista que fue quien le provocó el infarto.

Cuando voy a ver el chisme era de Alberto y su nuevo amor, no tuve nada que decirle, él al verme solo me abrazo y me dijo que tú te quedas aquí, no vuelves con él, yo le dije vengo a quedarme contigo y con mamá no regreso. La empresa la manejamos desde aquí ya todo está arreglado lo que quiero es que te recuperes, esa misma noche mi abuelito murió, los padres de Alberto vinieron a acompañarnos en estos duros momentos al igual que mis cuñados ellos se han portado muy bien con nosotros.

Mi suegro y mi cuñado tuvieron que tomar las riendas de la empresa, yo les pedí que le aconsejarán a Alberto que firmara el divorcio, ya que se negaba hacerlo, su padre me dijo que el se encargaba de eso al llegar a casa, que le dejara eso en sus manos.

Desde mi llegada a Canadá ya hacen 20 años y de Alberto y su vida no se nada, mis hijos hoy día son unos monumentos de hombres, son los solteros más cotizados, de aquellos gorditos no queda nada, hoy llegan sus abuelos de Nueva York y mi madre de España mis niños se gradúan con honores en la universidad. Uno como administrador de empresas y el otro como abogado son unos muchachos brillantes y no lo digo por ser su madre, si no que lo dicen sus profesores.