Derritiendo El Corazón De Un Mafioso

Temblaba de miedo, de pánico al solo imaginar que podia ser descubierta, no tanto a ir la cárcel, si no de que las escorias que acompañaban a Stefano la consiguieran y la matarán, que iba hacer ahora? Dónde se encontraba su hermana? Sin dinero no podía llegar muy lejos, hasta que toco su pecho y se fijo en la gargantilla que tenía, se le ocurrió que podía venderla pero era otro problema si la vendía podía ser rastreada.

Ángela se encontraba en un trance de conjeturas pensando cuál seria la mejor salida, cuando sintió una mano ser colocada en su hombro, no tardó en manifestar un brinco generado por el susto.

*Amiga, estamos libres* escucho decir a jade.

Ángela se levantó de la banca con sus ojos cristalizados, al ver a Jade es como si su vida retomará nuevamente el sentido y el color

*Jade amiga, si pudiste escapar, lo lograste* dijo Ángela entre sollozos abrazando a Jade.

*Lo logramos amiga, y no solo yo, Yenifer, Alejandra y Emily también amiga, y eso no es lo mejor, nos están esperando en el baño por qué pudimos sacar una maleta con mucho dinero* dijo Jade muy bajito.

*Ohhh amiga, vamos, vamos no podemos quedarnos por más tiempo aquí* dijo Ángela tomando la mano de jade para caminar rápidamente hacia el baño.

Cuando Jade y Ángela entraron al baño se abrazaron con las demás chicas quienes le daban las gracias por haber acabado con esa tortura.

Ángela se limpio su cuerpo,  se cambio de ropa, arreglando también un poco su apariencia, cuando ya estaba lista  las cinco chicas salieron de la estación de servicio para parar un taxi e ir al terminal.

Conversando un poco de lo que harían de ahora en adelante, a qué país se irían o como vivirían, conversaban de sus sueños, sus metas, sus proyectos de vida cuando varias camionetas estacionaron alrededor  de las chicas dejándolas perplejas por lo que está pasando.

Lo primero que se les vino a la mente fue los hombres de Stefano, y si eso era así eran mujeres muertas, todo un sacrificio para nada.

*Que haremos Ángela, nos van a matar* dijo Jade.

*Cálmense chicas yo diré que yo soy la responsable de todo y yo las tenía amenazadas* dijo Ángela mientras una lágrima rodaba por su mejilla.

*Estás loca, nosotras debemos pagar también las consecuencias de nuestros actos* dijo Alejandra casi gritando.

Las chicas se habían casi abrazado entre si, el miedo las consumía lentamente.

*Perdón por meterlas en esto chicas* dijo Ángela.

*Fuimos felices por poco tiempo y eso es lo que cuenta* respondió Oriana.

*Nuestra libertad tuvo un precio un precio que ahora vamos a pagar* dijo Emily

*Lastima que no duró mucho, pero si nos toca morir, moriré feliz por qué ese engendro está muerto* dijo Yenifer.

Las puertas de la camionetas se abrieron, bajando varios hombres de ellas completamente armados, el jefe que los comandaba abrió paso entre ellos, mirando a las chicas, inmediatamente Reconoció ah Ángela pero al mirar a Emily quedó más que maravillado, así que decidió llevársela a todas.

*Suban las chicas a las camionetas, una en cada auto y ya saben al lugar donde las llevaremos* dijo aquel hombre.

Por supuesto que no desaprovecharía de que Emily fuese en la camioneta en la que el andaba.

Las chicas temerosas fueron subidas una a una a distintas camionetas y estás iniciaron su marcha rumbo a una mansión muy afueras de Sicilia.

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Por otro lado Roby, Santiago y Angelina junto con Ernesto, Jorge y Estela se dirigían a la mansión, Santiago ya le tenía la información que el había pedido pero esperaría un poco a llegar a la mansión para explicarle las cosas, además no quería que Angelina se enterara y hubiese una mala interpretación.

*Joven debió dejarnos ir en el otro auto* dijo Jorge muy apenado.

*Jorge eres mi empleado, vives en mi mansión que es como tuya, por que pasas más tiempo que yo así que déjate de estupidez* dijo Roby en tono tranquilo.

*Papá quiero ir mañana al cine con Ernesto puedo* dijo Angelina viendo a Ernesto algo intranquilo.

Santiago no dejo responder a Roby por qué sabía que la conversación terminaría en catástrofe.

*Mi pequeña Angi, claro que sí pero recuerda que debes ir con los escoltas ya que Roby tiene mucho enemigos y tú Ernesto debes cuidar bien de ella* dijo Santiago tranquilo por qué Roby no dojo nada.

*Si señor así lo haré* respondió Ernesto con algo de miedo pero al final con una sonrisa por qué veía que el hermoso rostro de Angelina reflejaba mucha felicidad

Pronto la limosina llegó a la mansión y todos bajaron, despidiéndose, incluso Angelina se despidió de Roby y Santiago se sentía muy cansada, estos dos hombres entraron al despacho y Roby fue directo a servirse un trago.

*Que averiguaste, se que no me quisiste decir nada en el camino* dijo Roby muy seguro y es que el ya conoce a su amigo en todas sus facetas, menos en la de enamorado.

*Que bien me conoces, cada día me sorprendo contigo, y si, déjame decirte que de Ángela Salvatierra no conseguimos nada ni siquiera un puto papel que diga que son casados, hay Miles de Ángela pero estuve buscando un poco con sus características, pero de igual manera se desconoce su origen, Stefano supo borrar todo sus rastros, pero mira me llegó esta información* dice Santiago entregándole la tablet por un momento para que viera.

Roby tenia sus ojos casi fuera de su orbita estaba demasiado sorprendido por lo que estaba viendo.

*Sorprendido verdad?, Pues yo también si hace solo minutos hablamos con el y negociamos, ahora según la prensa está muerto, pero no te estreses, ya  nuestros hombres los mandé ah averiguar realmente lo que sucedió, aparte de eso Ángela no aparece por ningún lado de la escena del crimen, al parecer en la mansión de Stefano también hubo un revuelto y cuatro chicas se le escaparon, eran de esas chicas que las esclavizaba* comentaba Santiago

*Si los hombres de Stefano la atrapan tenlo por seguro que la matarán, y si es familia de mi pequeña?* Se decía Roby preocupado

*Hermano estás hablando con tu asistente estrella, que crees* dijo Santiago con una risa burlona en su rostro.

*No estoy para chistecitos Santiago habla de una puta vez* dijo Roby algo molesto.

*Huuuyyyy si asi me vas a hablar, a mi, el que ya tiene a la pequeña doncella en un castillo* dijo Santiago burlándose de Roby.

*Que mierda dices Santiago, se más específico* dijo Roby mientras ya la paciencia se le agotaba.

*Bueno, bueno, para que no te estreses, nuestros hombres consiguieron ah Angelica y a las cuatro esclavas que escaparon, parece que todo lo tenían armado, y si mis sospechas no me fallan Ángela mato a Stefano, en estos momentos las mande a la mansión que está a media hora de aquí, ya deben estar llegando* dijo Santiago observando su reloj.

*Y que esperas imbécil vamos para allá* dijo Roby para salir apresuradamente de la mansión.

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Las camionetas que trasladaban a las chicas ya habían llegado a su destino, cada una de ellas fueron bajadas con los ojos vendados llevando a Emily, Alejandra, Yenifer, jade y Ángela a una habitación diferente.

Media hora después el rechinar de las llantas de un auto se escuchó y los hombres se colocaron en fila para recibir a su jefe, el señor Roby Jhonson junto son sus asistente Santiago

Ambos bajaron de la camioneta y se dirigieron al estudio seguido por su jefe de seguridad.

Roby entro y tomo asiento, al igual que Santiago y su hombre de confianza.

*Carlos Quiero que me traigas ah Ángela* dijo Roby mirando a Carlos asentir.

*Que vas hacer con ella* pregunto Santiago curioso luego de ver a Carlos salir en busca de la chica.

*Realmente no lo sé, me siento extraño, realmente soy un maldito mafioso y no debo, no puedo tener un corazón tan débil* decía Roby con su voz Ronca, y con sus pensamientos revolucionados

*Roby hay que escuchar su versión, no podemos ser tan atroces cómo ese miserable y lo vamos a corroborar con las otras chicas * dijo Santiago poniéndose cómodo.

*No me jodas la vida en estos momentos, déjame pensar* decía Roby mientras tocaron la puerta.

*Adelante* dijo Santiago preparándose para ver la función.

Carlos entro junto con Ángela quien tenía sus ojos vendados y con sus manos esposadas, sentándola en un sillón frente al escritorio de Roby.

Este la vio más de cerca y sintió su corazón latir más rápido de lo normal, es una mujer muy hermosa se decía para sus adentros, luego le hizo señas a Carlos para que le quitará la venda de sus ojos .

*Buenas noches señora Ángela Salvatierra* dijo Roby de manera irónica.

Ángela se quedó sorprendida al ver al hombre que tenía en frente, era el mismo hombre que estaba en el evento, el que Stefano le digo que era un Puto Mafioso conocido como “El mafioso de Corazón Duro”, pues no tenía contemplación con absolutamente nadie.