Mariana una mujer que se casó llena de ilusiones, creyendo en el amor eterno. Se da cuenta de que los cuentos de hadas y las historias románticas están muy lejos... Su esposo Hernán, la engaña con cuanta mujer se le pone por delante. hasta que aparece en su vida un chico de 38 años. ¿Mariana estará dispuesta a darse una segunda oportunidad con Fernando? ¿O segura en un mundo de mentiras, casada con Hernán?
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Fortaleza
El rostro de Martina se puso rojo al escuchar a David ponerse de mi parte. En verdad no esperaba estas palabras del hijo que siempre rechacé.
Sin embargo, se sentía tan hermoso ser defendida por alguien y más por un hijo mío, eso me da un poco más de fortaleza para enfrentarme a Hernán y a esta bruja.
Martina no se iba a quedar con los brazos cruzados mirando como yo le quito el lugar que ha disfrutado por tantos años.
_______ Cariño, sé que tu madre es la señora de esta casa, y que tiene todo el derecho de dar órdenes. Lo que hago, únicamente, lo hago, para quitarle algunas obligaciones a ella. Si les molesta que lo haga, solo dímelo.
Martina se hizo la víctima, haciendo que David y yo quedemos como los villanos de esta historia.
Ella tomó asiento, fingiendo ser humillada por nosotros, llevando sus manos a su rostro y derramando unas cuantas lágrimas.
Furioso, Hernán dejó caer su mano encima de la mesa, haciendo un fuerte ruido. La tensión se hizo notoria al instante en todo el comedor.
En ese momento toda mi valentía se fue. Otra vez quedó la mujer cobarde que siempre he sido. Si no fuera porque David pasó su mano por detrás de mi espalda, como gesto de su apoyo, hubiera salido corriendo del comedor, y nunca más me hubiera atrevido a ser valiente.
_______ ¡¿Cómo te atreves hablarle de esa manera a mi madre?! ¡Pídele una disculpa ahora mismo! _______ Exclamó Hernán, ordenándole a David que se disculpara con su madre.
_______ Padre, no he dicho nada que pueda ofender a mi abuela. Si se siente mal por haber comentado que mi madre es la señora de esta casa, no he dicho ninguna mentira. Mi madre es la señora de esta casa. Mi abuela lleva muchos años viviendo bajo este techo, ya es tiempo de que se vaya a su casa.
Martina levantó la mirada, si sus ojos fueran espadas, ya hubiera matado a David en ese mismo momento. Jamás pensó que un hijo mío, no se dejaría manipular por ella y por Hernán.
______ ¡Suficiente, David! Acabas de llegar y ya estás causando problemas.
______ Deberías entender de una vez. ¡Quién da las órdenes en esta cada aquí soy yo!
El espectáculo a penas comenzaba. León se puso de parte de su padre, al igual que Estela. Ella dejó a su compañero para acercarse a su abuela y abrazarla...
_______ Esto es suficiente, David, ¿cómo puedes atreverte hablarle de esta manera a la abuela?
______ Ella no se lo merece.
Di un profundo suspiro, me doy cuenta de que no será nada sencillo poder vencer a la bruja de mi suegra, y menos si tiene el control absoluto de mi hijo mayor y de mi hija más pequeña.
Aunque sienta mi alma partirse en mío pedazos debo ser fuerte. Ponerle un alto a Martina y a su hijo. Mis hijos deben entender qué soy yo la víctima y no ella.
________ ¡Basta! _______ Exclamó en voz alta. Tan alta que resuena en todo el comedor.
________ David no ha dicho ninguna mentira. La única señora en esta casa soy yo. Si alguien no le gusta, pueden agarrar sus cosas e irse a vivir a la casa de su abuela.
_________ A partir de este momento, las cosas en esta casa y en las empresas Escobar se van a hacer como yo las diga y quien no esté de acuerdo, es su problema.
Me esforcé demasiado para poder soltar esas palabras. Por dentro me moría de miedo. Mis manos, como mis pies, temblaban. Jamás pensé decir esas palabras y enfrentarme de esta manera a Martina y a Hernán.
Sabía que después de esto, no puedo dar vuelta atrás. Van a tratar de poner a mis hijos en mi contra y en contra de David. Pero estoy cansada.
Cansada de ser humillada, sometida a sus órdenes, de bajar la cabeza y ser pisoteada por Martina... Es hora de que me trague todo el miedo y me en frente a ellos.
________ ¡Cállate! Y lárgate a nuestra recámara.
______ No te das cuenta de que solo estás haciendo el ridículo delante de los invitados de nuestros hijos... ______ Me dice Hernán.
________ Es cierto, ya no estás bien de tus facultades mentales... Es mejor que subas a tu habitación y nos dejes cenar en paz. _____ Menciona León, mirándome de una forma muy desagradable.
Sentí mis piernas doblarse. Mi piel se erizó de una manera que jamás lo había hecho. Sentí un fuerte escalofrío recorrer todo mi cuerpo.
Ver la manera en la que mis hijos me ven, es un fuerte golpe sicológico para mí.
_______ Vete, no quiero verte.
_______ Si desaparecieras de nuestras vidas sería mejor. _____ Estela fue la más cruel conmigo.
________ ¡No le hables así a mi madre! _____ Me defendió David, poniéndole un alto a su hermana.
_______ Crees que poniéndote a lado de ella vas a poder obtener algún beneficio...
______ Dejame decepcionarte, hermanito... Ella no es más que la abuela en esta casa, es un cero a la izquierda en la vida de todos...
Martina se sintió orgullosa de Estela, pasó su mano por la mejilla de mi hija. Como diciendo, eres mi orgullo...
_______ Eres tan cruel, Estela. Un día te vas a repetir de todo el daño que le has hecho a nuestra madre. ______ Dijo David.
_______ Vamos, mamá. Te llevaré a cenar a un restaurante. Creo que aquí, los alimentos no van a estar buenos.
David me toma del brazo y me lleva a fuera del comedor. Luchaba por no derramar ni una sola lágrima, pero fue imposible de hacerlo.
Las palabras de Estela fueron demasiado hirientes... Darme cuenta de que por mi cobardía, mi hija se ha vuelto igual que su abuela me causa mucha tristeza.
_______ Tranquila, ya estoy aquí para apoyarte en todo.
Al llegar al auto de David, Catalina abre la puerta trasera, para que yo pudiera entrar... Entre despacio, mi cuerpo no paraba de temblar. David y su novia entraron al auto, encendiendo el motor.
Al poco tiempo ya estábamos lo suficiente alejados de la mansión.