Tu Amor Curo Mi Corazón

Matrimonio.

LORENA ALCOCER.

Se siente tan extraño estar fuera de la mansión, camino por las calles, la brisa fresca y la bulla de los autos, me siento relajada caminando por mi barrio, pasé a mi casa, se siente muy sólo y deprimente, todo está cubierto con sábanas y sus cosas están en cajas, según me dijo Clara en una semana se llevarán todo a una bodega, suspiró profundamente, tengo que tomar mucho aire antes de poder entrar a su habitación.

Aquí todo está igual, al parecer no guardaron nada, con todo el dolor de perderla y más viendo todos sus recuerdos, tomo varias cajas, lo primero en guardar es su ropa, escojo unas prendas para mi y las demás las guardo para llevarlas a la iglesia donde mi mamá pasaba su tiempo libre, ella era una cristiana devota.

Encontré un caja con documentos entre estos mi acta de nacimiento, llamo mi atención que el nombre del hombre que me dió la vida está en ella, no le voy a prestar importancia porque si nunca me a buscado por qué yo ahora tendría que hacerlo.

Guardo lo demás sin leer, me llevaré esto conmigo, más adelante lo reviso con más calma, también me llevo los álbumes de fotos, para mí son lo más valioso ya que están todos mis recuerdos.

Mientas tanto en la Mansión, Marcela cuidaba a David.

MARCELA LONVANA.

Hijo, te quiero tanto, acaricio su cabello, se que me escuchas suspiro, no sabes lo feliz que me hace saber que ya no volverás a sufrir por tu corazón débil, siempre me sentí culpable, fuiste el único que heredó la enfermera de mi madre.

Nunca me lo perdone, verte crecer encerrado y triste me destrozaba el alma y hoy deseo, quiero, anhelo verte despertar, verte de pie cumpliendo tus sueños.

Alcanzando tus metas, todavía recuerdo cuando me decías de niño que querías tener una empresa más grande que la de tu abuelo, que me llevarías en tu barco por el mar mediterráneo, eras tan soñador de niño que cuando empezaste a perder ese brillo en los ojos me dolió mucho, me encantaria verte casado, con una familia hermosa, se que Candelaria no te gusta, pero por lo menos es la única que siempre a demostrado verdadero interés en tí, solo dale una oportunidad, creeme ella pude ser la compañera perfecta solo necesita que le tengas paciencia.

Siempre a estado pendiente de ti, es más en un rato viene a verte y no te preocupes me voy a quedar con ustedes para evitar que haga locuras, por eso le pedí a Lorena que se fuera hoy, aunque ahora que la nombró, me gusta mucho ella, te cuida muy bien, es muy atenta y gracias a ella tienes un nuevo corazón, creo que sería buena esposa y me darían unos nietos preciosos.

Tocan la puerta.

Adelante.

- Buenas tardes, Marcela querida, gracias por recibirme te traje un regalo.

- Gracias, no debiste molestarte, cómo estas.

- Bien, cómo esta David la última vez no pude verlo mucho.

- Mi hijo está muy bien, cada día mejor solo le pido a dios que despierte pronto.

- Yo igual, deseo que despierte y ahora que no tiene problemas cardíacos si me haga caso, sabes cuánto lo amo.

- Lo sé, pero debes ser paciente, mi hijo no es fácil y lo sabes además el amor no se debe forzar, no has pensado en buscar a alguien que si te corresponda, eres muy hermosa y debes tener muchos pretendientes.

- El problema es que yo solo tengo ojos para David, no me interesa nadie más y voy a esperar lo que sea necesario para poder ser su esposa.

- Bueno hija, espero que cuando mi hijo despierte puedan estar juntos, pero si el te rechaza hasta a un lado, te lo digo como concejo porque te quiero, no puedes obligar a alguien a quererte.

- Lo sé, pero el me quiere, de niños me defendía, se que me quiere solo que es un poco penoso, solo necesita un empujoncito, tu me puedes ayudar.

- Sabes que no puedo ayudarte, David es independiente y tiene su genio, no quiero que me deje de hablar por ayudarte en tus locuras.

- No tendrás problemas, solo te pido que cuando despierte me ayudes a convencerlo que se case conmigo, él te escucha.

- Ya lo intente y lo sabes, pero fue claro en qué no se casará contigo.

- Y si lo organizamos todo, mira podemos armar la boda de una vez, cuando el despierte no podrá negarse.

- Es una locura, sabes qué a David no le importará dejarte en el altar, nadie pude obligarlo a nada, imagínate su reacción al saber que mientras se recuperaba le organizo una boda, eso pude ser un completo desastre.

- Piénsalo, después lo volvemos hablar, por ahora me voy, tengo algo que hacer y ya llevo mucho tiempo aquí.

- Bueno hija, cuídate mucho, deja de preocuparte tanto, dale tiempo al tiempo las cosas siempre se acomodan solas.

Marcela acompaño a Candelaria a la puerta y una vez se fue soltó el aire, respiro más tranquila, esa niña no quería entender que no pude forzar las cosas, que con su terquedad solo ara que David la aleje más.

Candelaria al salir de la Mansión ya tenía un plan en mente, solo necesitaba un aliado y ya sabía quién sería, envío un mensaje y subió a su deportivo rojo con una enorme sonrisa.

Llegó a un restaurante de moda en la ciudad, cómo era una joven conocida no tenía que hacer reservación, solo la guiaron a una cabina privada, su cómplice la esperaba.

CANDELARIA.

- Hola querido, es un gusto verte.

Desconocido.

- Cómo siempre hermosa, pero cuentame para que soy bueno.

Candelaria.

- Al grano cómo siempre, bueno es simple necesito que me ayudes a casarme con David sin que nadie lo sepa.

Desconocido.

- Jajajajaja y porque te ayudaría, más sabiendo tu mi rivalidad con él que ganó.

Candelaria.

- Pues lo único que te gusta es el dinero fácil y yo puedo darte mucho, todo lo qué quieras sabes que para mí no es problema.

Desconocido.

- Digamos que acepto, tienes un problema el abuelo Manuel, no se le despega si hacemos un movimiento el lo sabrá.

Candelaria.

- De eso ya me encargue, digamos que el viejo está en un viaje de dónde no podrá volver.

Desconocido.

- Esa no me la esperaba, por lo que veo pensaste en todo, bien estoy dentro, pero debes conseguir la huella de David sin que lo noten con eso te puedo asegurar que estarían casados en cuestión de horas.

CANDELARIA.

- Bien, sabía que eras el indicado para esto, necesito que te encargues de algo más, pero luego lo sabrás.

Desconocido.

- Tu eres la que manda, ahora me voy, nadie nos puede ver juntos y recuerda enviarme la huella futura señora del Valle.

- Al otro lado de la Ciudad.

LORENA ALCOCER.

Lorena estaba regresando a la mansión, comió en una cafetería con su amiga, la cual la puso al día de los últimos acontecimientos del hospital, Francisco estaba en problemas ya que Aide estaba embarazada y quería forzar un matrimonio.

Siento lastima por ella, en el fondo es buena mujer, pero él no es la persona que pensé, resultó ser un completo idiota y para acabarla de completar un irresponsable.

Llegó a mi habitación y vuelvo a ponerme el uniforme, Dario me envió un mensaje, quiere hablar conmigo en él despacho.

Llegó a la habitación de David y reviso que todo esté en orden, la señora Marcela está dormida junto a él, así que paso al despacho.

Lorena.

- Hola Dario, en qué puedo ayudarte.

Dario Hernández.

- Te llamé porque las cosas no están bien, el señor Manuel está desaparecido, no se que está pasando, pero desde ayer no hemos podido encontrarlo, le dijimos a todos que salió en un viaje de emergencia a una de las empresas, pero la verdad es que las cosas no están bien.

Lorena.

- Dios mío, pobre señor Manuel, que necesitas que haga, tu solo dime.

Dario Hernández.

- Necesito que estés mas atenta a David, no dejes que nadie además de ti entre a su habitación, ni siquiera las chicas del servicio, nadie puede entrar a esa habitación, yo me voy a quedar en ella en las noches, alguien quiere matarlo y es hora que lo sepas, eres su esposa y necesito que estés alerta.

Lorena.

- Claro cuenta con eso de ahora en adelante no me le pienso despegar, también te quiero preguntar que pasó ayer, porque la mansión estaba revuelta y ahora Cindy me evade.

Dario Hernández.

Solo te diré que en esta mansión están pasando cosas que no te puedo contar por tu seguridad, pero no sé porque Cindy te está evadiendo tu encárgate de que nadie entre a la habitación de David que yo hago el resto.

Lorena.

Por el momento no haré más preguntas, pero no creas que soy una mujer fácil de manejar no me tomes por tonta y si tengo que cuidarme de alguien me gustaría que me lo digas, no trago en tero y si sabes quién está de tras de todo es mejor que me lo digas.

Dario Hernández.

- No se, si lo supiera ya me abría hecho cargo y por lo delicado de las cosas no te puedo decir mis sospechosos.

Lorena.

- Entonces me voy, si me necesitas ya sabes dónde estoy.

Llegó a la habitación de David muy preocupada, no me gusta esto, el sabe más de lo que dijo, pero no puedo hacer más, por ahora voy a estar atenta a lo mínimo que pase en esta mansión si alguien quiere matar a David tendrá que matarme primero.........