Seguro Que Sería Solo Temporal?

aunque sabía a la hora que se presentaría Carlos, se sobresaltó cuando sonó el timbre del telefonillo en el vestíbulo. por suerte acababa de terminar de ponerse rímel en las pestañas, o habría abierto con una extraña raya cruzándole la mejilla.

recogió el bolso y un chal negro que completaban a la perfección su vestido blanco. apretó el botón del telefonillo situado en la pared y habló al auricular incorporando

_Carlos?

_sí .

su voz sexy y grave le causó un hormigueo total por el cuerpo

_ya bajo .

sin aguardar una concentración. encendió la luz del exterior, cerró la puerta con llave y fue hacia el ascensor.

_Hola-saludo él cuando las puertas se abrieron_estás preciosa_sus ojos irradiaban .

un destello burlón-. cómo sabía que Michael preferido es el negro!.

Luisa sonrió

_no lo sabía, da la casualidad que también es mi favorito. a propósito, Hola-sonrió. a dónde vamos a ir esta noche?.

_he pensado en que continuáramos donde estábamos, antes de que nos interrumpieran de forma tan grosera. evita todos los casinos o solo al que íbamos a entrar anoche?.

_solo ese_repuso, abrochándose el cinturón de seguridad_pero no voy a los casinos muy a menudo_sonrió_. como dice la canción, trabajo duramente para ganarme la vida. aunque de vez en cuando juego algo.

_juegos de mesa? enarco las ejas.

"_no, solo las máquinas_Luisa le devolvió el gesto_y tú?

'poker_respondió, encogiéndose de hombro, y algo de blackjack de vez en cuando. lista!

_cuando tú lo este .

él salió del aparcamiento .

guardó silencio durante unos momentos mientras conducía.

_no sé qué perfume te has puesto, pero me gusta..... mucho.

el calor y el hormigueo interior se incrementaron en Luisa.

_Gracias Carlos, es el único perfume que uso.

_siempre y cuando lo huela, pensaré en ti_le sonrió.

a Luisa no le ocupo duda que todo su interior se derretía, se dijo más valía ir con cuidado, porque ese hombre no solo era peligroso, si no pura dinamita, comparado con Carlos, Jeff ni siquiera era un petardo.

jugar con petardos era una cosa, pero con dinamita... tembló

-tienes frío?-preguntó el al notar el escalofrío a pasar de no haber apartado en ningún momento la vista de la carretera-puedo encender la calefacción del coche-alargó la mano para hacerlo.

_no... no-ella movió la cabeza mientras ofrecía una sonrisa débil_estoy bien, de verdad, y ya casi hemos llegado_cómo encenderá la calefacción se derretirá delante de él.

-es extraño_comentó él_en octubre aquí en las Vegas, por la tarde la temperatura puede ser bastante elevada: sin embargo, en la noche cae en pecado y pasas frío.

_es diferente donde tú vives? preguntó, queriendo saber cualquier tontería sobre él sobre su vida.

Carlos sonrió

_depende de la parte del estado en el que vivas, en Denver puede ser muy caluroso por el día y refrescar por la noche. pero en las montañas, donde yo vivo, así como podemos experimentar algo de calor por el día, por la noche puede hacer mucho frío.

_me gustan las montañas_comentó, inconsciente del tono de añoranza que había empleado

_no eres de aquí?.

_no-movió la cabeza-soy de Virginia, cerca de las montañas azules. mi padre lleva un pequeño rancho de caballo.

_ya está-volviendo a sonreír_tenemos algo en común.

_caballos?-rio

_eh, no los descartes, es un comienzo.

Luisa no pudo evitar preguntarse a qué se refiere exactamente con eso de comienzo. cómo comienzo de qué? si solo iba a estar en las Vegas unos días.

Carlos la sorprendió evitando el strip, la avenida principal de los casinos, y yendo hacia uno de los hoteles más antiguos de la ciudad, uno en el que nunca antes había estado, es decir, era viejo en comparación con los palacios increíblemente es caro que siempre se hallaban en fase de construcción

pero le gustó mucho más que los elaborados palacio de placer que tanto abundaban en las Vegas. para empezar, no estaba tan atestado como los otros.

_bueno-dijo Carlos-qué quieres hacer?.

ella guardó silencio un momento, mirando alrededor

_creo que daré una vuelta--le sonrió-.. hasta que una de las máquinas me llame.

_perfecto-coincidió-, creo que Yo iré a una mesa de blackjack. qué te parece si sincronizamos los relojes y quedamos otra vez aquí, digamos en una hora?

sonriendo, Luisa miró su reloj de pulsera. de acuerdo, si no te veo antes, deber entonces

en cuanto se separaron, ella empezó a sentirse sola. mientras recorría las hileras de máquinas, se reprendió diciéndose que era una tontería.

con el deseo de distraerse de pensar en Carlos se sentó ante la máquina del final de la hilera. dedicó varios minutos a estudiar las instrucciones antes de introducir un billete de 20 en la ranura. obtuvo 80 crédito en la pantalla luminosa.

llevaba jugando una hora completa cuando fue consciente de que alguien nuevo había ocupado la máquina de al lado. ni siquiera giró la vista para mirarlo.

_Hola Luisa-la voz suave de Jeff la sobresaltó-debí sentada aquí sola y vine a hacerte compañía..

no pudo creer que Jeff encontrara en ese casino. no era de la clase de los que él frecuentaba: preferiría los nuevos que atraían a los celebridades. la idea de que la hubiera seguido le causó escalofrío.

la estaría acosando?

asustada pero decidida a no mostrarle su miedo, le dedicó una mirada helada.

_no estoy sola, vengo acompañada, y aunque no fuera así, jamás querría tu compañía.

_vamos, Luisa los dos sabemos que tú no...

no le permitió ir más lejos .

_tú no sabes nada, Jeff, pero yo te lo explicaré_sacó valor de la voz fría que había empleado, si no desaparece de mi vista en los próximos segundos, comenzaré a gritar pidiendo la presencia de los agentes de seguridad.

_no te atreverías-negó-olvidas que sé que detesta montar una escena .

_quizás-admitió-pero encantada haré una excepción en tu casa-miró su reloj-tienes exactamente 2 segundos para desaparecer-no apartó la vista del reloj-1 ... dos...

se levantó del taburete y se alejó de ella soltando una retalija de juramentos. turbada por el encuentro, respiró hondo varias veces, y en cuanto lo perdió de vista apretó la tecla de apagar y se marchó con $5 más que con los que había empezado.

iba hacia el lugar donde había quedado con Carlos cuando lo vio en una mesa de blackjack. dudo un momento, pero luego decidió acercarse, convencida de que Jeff no intentaría nada con Carlos a su lado .

situándose detrás de él, apoyó una mano en su hombro para hacerle saber que estaba allí

_Hola veo que ganas-delante de él tenía varios montones de ficha.

_sí-giró la cabeza y le sonrió-lista para irte?.

_no hay prisa-indicó-me gustaría mirar un rato, si no te importa que me quedes detrás de ti mientras juega.

_en absoluto-repuso, logrando mantener al mismo tiempo un ojo sobre las cartas en juego_no soy supersticioso. de hecho, me gusta tenerte ahí.

sintiéndose desmesuradamente feliz por el comentario, en particular después del encuentro desagradable con Jeff, le apretó levemente el hombro.

la calidez fluyó con fuerza cuando él le cubrió brevemente una mano con la suya entrelazándole los dedos.

la sensación de sus dedos no la abandonó ni al avanzar la velada. se preguntó si su contacto le provocaría sueño corridos otra vez. espero que desenterraras las pesadillas que solo Jeff era capaz de inspirar.