Volver A Amar

...POV Valery...

Entro a la cafetería y con mis ojos busco una mesa libre al lado de los enormes ventanales.

Prefiero tener vista a la carretera y transeúntes que a la barra del mostrador.

¿Que si estoy segura de lo que hago?...por supuesto que sí.

Miro la hora de mi celular y faltan solo diez minutos para que llegue Damián.

Tomó la carta que está sobre la mesa y barro línea tras línea. ¿Que me apetece?

Un Latte de mocha, tres rollos de canela, dos bagel rellenos de mermelada, y dos pasteles de frutas.

Se acabó la Valery que no pedía nada para si misma, la que no quería gastar de más, la Val ahorradora.

Se quedó tres metros bajo tierra.

De todas maneras la tarjeta de Richard paga, y al pensar en eso una sonrisa de oreja a oreja asoma en mi rostro.

Mi teléfono vibra, es un mensaje de Sofi.

~ *Espero que todo salga bien hermanita, no olvides de decirle que quieres la mitad de todo. ¡Ah y la compensación por los años de dueña de casa!. Te amo.

PD: Yo y mis hermosos querubines estamos excelentemente bien*. ~

Suelto una carcajada que oculto bajo mis manos al ver cómo una familia completa se voltea en mi dirección.

Inhaló y exhaló para dejar de reir, observó hacia afuera a ver si logro divisar a Damián. Hace muchos años que no lo veo.

En eso estaba cuando una pelicular conversación atrás mío me hace erguir y escuchar con atención.

¡Dios! si mi abuela estuviera presente me tiraría las orejas por chismosa.

Si, mi amada abuela Mary era como mi madre, nos crió cuando nuestra progenitora nos abandono. De nuestro padre nunca supimos.

Pero ella, ella fue el pilar que nos sostuvo y nos mantuvo cuerdas. Aún recuerdo el día que nos dijo que estaba enferma de cáncer, éramos solo unas adolescentes, fue un golpe demasiado duro. Unos años después, cuando la quimio ya no daba resultados positivos, supimos que le quedaba poco, tan solo unos meses.

Por fortuna yo había cumplido la mayoría de edad, por lo que me podía hacer cargo de mi hermana.

Mi amada Mary me reprocharía el estar escuchando pero fue inevitable.

—¡Anda Aiden!, es solo una cita.

—¡Que no Daniel!

—Pero ¿Por que?, es una tía súper sexy y está loca por ti.

Un resoplido sale de la boca del que supongo es Aiden —. No me interesa salir con ninguna de ellas, entiéndelo, busco otra cosa. Que ni ella ni ninguna de sus amigas me dará.

—No me jodas, ¿Aún crees que puedes encontrar amor verdadero?, ¡Estás loco!. Tienes una herramienta y debes usarla.

Escucho un golpe, y contengo las ganas de reírme.

—Auuuuch, ¿Que te pasa?, es la verdad. Aver dime, ¿cómo vas a saber quién es la indicada si no sales con ellas?.

—Lo sabré cuando la vea, creeme que lo sabré. Y cuando la encuentre no la dejare en paz hasta que se case conmigo. ¿Contento?, ahora deja de molestar y termina tu desayuno que debemos volver al colegio.

—Esta bien, aguafiestas. Voy a tener que salir solo con Samantha, ¿Que le digo ahora?, se supone que era una cita de cuatro.

—Dile que no estoy disponible y punto. No mientas por mi, porque si vuelvo a ver a esa mujer poco menos entregándose en mi escritorio, a ti te dejare sin dientes ¿Entendiste?.

—Si Aiden, entendí. Espero que no te arrepientas, y que el supuesto amor de tu vida aparezca pronto, o te quedarás soltero de por vida.

—Ya cállate.

Me acomodo en mi asiento en lo que salgo de mi sospresa.

¿Donde se encuentran hombres así?.

Por qué él es uno en un millón, suelto un lastimoso suspiro. Espero que Aiden pueda encontrar a una mujer que sepa valorarlo. Y con respecto a ese tal Daniel, espero que no se contagie de una infección de transmisión sexual. Espero, ya que de sucederle, el solito se lo busco.

De pronto un repentino abrazo me saca de mis pensamientos, abro los ojos enormemente y veo que es Damián.

Sonrió y lo rodeo con mis brazos, la felicidad me inunda, lo extrañaba tanto.

Luce igual que en la universidad, con ese pelo crespo y alocado y esa sonrisa que contagia de alegría.

—Te ves preciosa —me dice apenas se sienta.

—Siempre tan halagador —levanto mi mano hacia la mesera. Esta se acerca, saca su librito, papel, y anota mientras le doy la lista de todo lo que se me apetecía.

—Damian, ¿Que pediras?

Veo su rostro y se que está a punto de reírse por todo lo que he pedido, pero es que para un tema tan serio como este, necesito el estómago lleno, rebosante de azúcar.

Por debajo de la mesa le doy una suave patadita, el comprende de inmediato, carraspea y enfoca sus ojos en la carta.

—Un Capuchino y un hojaldre de crema de fresa, por favor.

La muchacha termina de anotar, y se retira.

Nos miramos y sonreímos a la misma vez. La buena amistad y complicidad que manteniamos en la universidad aún está presente, y agradezco que sea así pero algo no me tiene tranquila, y se que debo decírselo.

Tomo aire —. Damian, primero que todo, quiero pedirte disculpas. Lamento haberme alejado de ti, siempre estuviste para mi, y yo, yo...—siento como lágrimas caen por mis mejillas —yo fuí una tonta, y me arrepiento tanto, no te lo merecías.

Damián toma mi mano y la acaricia suavemente —. Tranquila, ya pasó, es tiempo pasado. Ahora todo cambió y por lo que me dijiste por teléfono es mejor de lo que pensé.

Limpió las lágrimas de mis ojos —. Así es, te contaré todo. Pero antes tengo que comer un poco de pastel. Dime, ¿Cómo esta Luisa y los niños?.

—¡Oh, muy bien Valery!, los niños ya tienen 4, 6, y 8 años.

Al escuchar la edad de sus pequeños, un sentimiento de culpa se aloja en mi estómago, ¡Dios!, ¿Por qué?.

Damián fue mi mejor amigo en la universidad, fue quien me ayudó emocionalmente con la muerte de Mary, él y Luisa fueron muy importantes para mí, pero yo, la tonta, priorizando a Richard. No lo culpare totalmente ya que la culpa también fue mía por permitir todo eso.

Escucho que las sillas de atrás mío se mueven, y asumo que los dos hombres de la plática que sin querer escuché, se van.

La curiosidad me gana, y mis ojos se dirigen rápidamente hasta ellos, veo sus espaldas...¡Por Dios!, debería ser ilegal usar ropa tan apretada con esos brazos musculosos.

Mis mejillas se sonrojan de solo ver esos cuerpos tan duros, firmes y fibrosos.

¡¡¿PERO QUE? ¿QUÉ ESTOY PENSANDO?!!