Desde pequeña la vida de Soe ha sido complicada, fue vendida por su maltratador padre a un mal esposo, Pero una mano amiga le ayudará a encontrar la oportunidad que cambiará su vida.
Acompáñame a ver qué le depara el destino a Soe en una hacienda rural viviendo entre una gran familia de 3 hermanos
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"un nuevo despertar"
• Sí ...
El hombre se bajó de la camioneta, tomo mi maleta y la cargo en el pick-up
- Vamos sube (me decía mientras él se subía en el lado del conductor)
- Soy Owen ¿de dónde vienes?
• Bueno, soy Soe y vengo de Virmar
- Fue un largo viaje y dime ¿tienes experiencia con animales de granja?
• Si, desde niña me ocupaba de los animales de la granja y también hice un taller de agricultura
- Que bien y ¿con caballos?
La conversación trajo angustiosos recuerdos a la mente de Soe, Pero intento eliminarlos pensando que este sería un nuevo comienzo.
• Solo cuando era niña, Pero me gustan mucho
- Perfecto, te adaptarás bien al lugar.
El camino era corto, o así lo sintió Soe, Owen era una persona con la que se habla fácil, se hacía agradable hablar con él, aunque Soe no era precisamente muy buena con las palabras.
La vista de la Hacienda, dejo deslumbrada a Soe, no había visto un lugar tan hermoso
Era una mansión enorme, parecía un castillo en un valle verde entre árboles
La vista parecía un cuadro de un artista famoso pintado al óleo.
Owen se sonríe al ver la cara deslumbrada de Soe, quien jamás había visto tal belleza, para el Soe parecía una niña viendo los regalos en un árbol de navidad, eso era tierno y divertido.
- Soe, te fuiste a tu cuarto y luego te subiré la maleta
• Oh no te preocupes, puedo subirla yo misma
- ¿Estás segura? Está en el segundo piso
• si, muchas gracias
Soe levanta la maleta y comienza a subir las escaleras sin dificultad.
Owen ve con admiración a Soe, ya que él había cargado la maleta en la camioneta y sabía que no estaba liviana, Pero ella subía sin dificultad las escaleras, hasta qué la vio sujetarse el costado derecho de sus costillas, su expresión era de dolor. Pero la chica siguió subiendo hasta llegar al segundo piso.
Owen la siguió
- ¿estás bien?
• Sí ... No te.. Ahg!
Soe cae de rodillas al suelo y le cuesta sacar la respiración.
- Permiso Soe
Owen la carga en sus brazos y la acuesta en la cama y mira a Soe que respira agitadamente y corre sudor frío en su frente por el dolor
- Lo siento, permiso Soe, te prometo que no tengo malas intenciones.
Owen levanta la polera de Soe y ve sus costillas magulladas y amoratadas, quedando impactado.
-Soe ¿estás tomando medicamentos para el dolor?
• S…sí…
Owen abre la maleta de Soe y ve los remedios y los documentos del programa de protección a la mujer, Pero no dice nada al respecto
- Toma tus medicamentos y descansa, ya veremos cómo amaneces mañana.
Owen ayudó a Soe a ponerse derecha para beber el agua y tomar las pastillas y se marchó.
No podía evitar estar furioso, salió de la casa lo más rápido que pudo, tomo el hacha y comenzó a cortar leña, de un solo golpe, era su forma de dejar salir la irá, la impotencia, Owen no entendía como un hombre podría golpear de esa forma tan brutal el cuerpo de una pequeña y frágil mujer como Soe, ella parecía una muñeca de porcelana, pequeña, fina, frágil y de mirada triste.
- Deberían matarlos.
• Owen querido a quien quieres matar ahora
- A un demonio madre
• ¿un demonio?
- Al tipo con el que estaba Soe, es un malnacido que maltrata a las mujeres hasta quebrarles las costillas. (partía la leña con más fuerza)
• ¿Soe? La chica que llegaba hoy ... Pobrecita ¿está muy mal?
- La noté cuando subió las escaleras, sentía dolor, la seguí y la encontré en el suelo, apenas respiraba, la acosté y le vi las costillas, madre... Estaban amoratadas, tenía muchos hematomas en el mismo lugar, al principio pensé que quizás había tenido un accidente, pero luego le ayude a buscar sus medicamentos y lo vi... El papel de Protección a la mujer.
La madre de Owen se tapa la boca con espanto
• Hay Dios pobre criatura ¿se adaptará bien aquí?
- No lo sé, Pero si viajo desde tan lejos es porque tiene ganas de vivir ¿o no?
• Si, tienes razón cariño, lo que te molesta no se volverá a repetir, descuida, la haremos sentir en casa.
...ΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩ...
Soe estaba tendida en la cama de su habitación, pensaba en que es la primera vez que alguien se ocupa de ella, nunca la habían tratado con tanta delicadeza, cuando Owen la tomo en sus brazos, levantando con delicadeza su cuerpo del piso, lo hizo con tanta delicadeza, como si estuviera tomando una porcelana frágil que se quebraría en cualquier momento, fue tan respetuoso con ella, en todo momento, era una sensación agradable, el respeto, que agradable es sentirlo, aunque fuese por un corto momento.
Soe durmió, por todo lo que no había descansado en años, se había entregado por completo a la comodidad de la cama y la suavidad de las sábanas que la cubrían
A la mañana siguiente tocaron la puerta de su habitación.
Toc, Toc
- Adelante
• Buenos días Soe, me presento, mi nombre es Anna, soy la madre de Owen ¿cómo estás hoy cariño?
- Señora Anna, perdone mis modales por favor
Soe se intenta levantar rápidamente de la cama, Pero Anna la detiene
• Tienes prohibido levantarte de la cama el día de hoy, he venido a avisarte para que te prepares porque el doctor Paxton está en el vestíbulo y subirá a revisar tu herida.
- Señora Anna, no debe preocuparse, no quiero ser una molestia
• Molestia serás si no cuidas de ti misma y soy Anna para ti cariño, ahora espera, en unos minutos subiré con el doctor.
10 Minutos más tarde Anna ingreso a la habitación acompañada de un Hombre bastante mayor, de rasgos asiáticos que comienza inmediatamente a examinar a Soe, cuando el doctor hundió sus dedos en las costillas de la chica, ella no pudo evitar gritar de dolor. Cuando terminó de examinarla, no dijo nada y solo salió en silencio del cuarto junto a Anna de la misma forma en la que habían entrado.
- ¿qué me dice doctor?
Entra Owen y se une a la conversación
- Owen cariño, el doctor acaba de examinar a Soe.
• y ¿qué tal está? ¿Cómo se encuentra?
~ Bueno es algo sorprendente decir esto, Pero al tocarla, note que no solo tiene una costilla fracturada, la cantidad de hematomas es enorme y tus tejidos están demasiado inflamados, no entiendo como esa chica puede respirar tan tranquilamente, ha de ser muy doloroso, también vi hematomas en su espalda y brazos, a simple vista puedo ver qué está acostumbrada a ser golpeada.
- Por Dios ...
• Doctor... ¿Hay algo que pueda ayudarle a amortiguar el dolor que siente mientras se recupera?
~ Si, ahora les diré eso, tengo una pomada que he creado yo mismo, es muy efectiva para las inflamaciones y hematomas, creo que esa pomada más los medicamentos serían efectivos, si logramos reducir los hematomas, la recuperación de su costilla será más rápida y menos dolorosa para ella.
• Entiendo, doctor por favor véndeme esa pomada yo la compraré, la cantidad que sea necesaria para su recuperación
- Y yo me ocuparé de aplicarla correctamente ¿puede enseñarme?
~ No hay problema, vamos Anna le indicaré todo.
Owen ve como su madre y el doctor se marchan mientras hablan, Pero él siente una espina en su pecho, tiene tanta rabia, no logra imaginar el dolor que ha tenido que pasar la mujer que venía recién llegando, escapando de la miseria. Sentía lástima por ella.
Antes de dormir Anna entra a la habitación de Soe y le pide que se saque la polera y comienza a frotar la pomada, primero en la espalda, luego en el abdomen y brazos. Eso se había convertido en una rutina que duró una semana, dónde Owen y Anna le llevaban comida a la habitación, le daban su medicación y Anna le hacía friegas en las noches.
Soe no sabía cómo demostrar la gratitud que sentía hacia Owen y su madre. Habían cuidado mucho de ella, recibió más cariño y cuidados en una semana, de lo que había recibido en toda su vida, sus hematomas ya apenas se notaban y la inflamación había desaparecido, solo le quedaba el dolor de su costilla rota, que se sentía peor con algunos movimientos específicos, si los evitaba podía caminar y respirar sin sufrir.
Cuando Owen le trajo la comida, Soe se armó de valor
- Owen... Yo ¿puedo comer con ustedes?
Owen le dio una cálida sonrisa en respuesta acompañada de un "Por supuesto, vamos"
En la mesa estaban muchas personas a las que no había visto antes como el padre de Owen, el hermano, hermana menor y otros empleados de la hacienda, todos se sentaban en una larga mesa a desayunar
Fue inevitable atraer las miradas de todos cuando Owen bajo con la bandeja de mi comida y yo detrás de él.
• Querida ¿te sientes mejor para comer aquí? Ven siéntate.
