Tras morir en su mundo, Rosalía hija de un importante mafioso, toma el lugar de la villana de una historia que leyó
Ahora ella tiene que cambiar su destino, o morirá como la verdadera villana
Ella de paso tomara venganza, y también se quedará con el villano
NovelToon tiene autorización de Yaneidis Pérez para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Veneno
Aquella mujer sin piedad alguna tomó a Verónica por sus pequeñas brazos, y la llevó a la mugrosa habitación de siempre.
—Tu inútil, ¿dime a quién le robaste ese oro? La gentuza como tú, solo de esa manera consigue dinero— dice ella empujando a la niña al suelo. Quien, al caer, empezó a reír, aquella mujer no esperaba tal cosa, ya que otras veces cuando ella la trataba de ese modo, Verónica solamente lloraba.
—¿No mandas a un montón de niños a trabajar desde tempranas horas del día, solo para quitarle el dinero y gastarlo en ti y esa pequeña bruja que tienes por hija? ¿De qué te quejas? Si alguien aquí tiene maña de tomar lo que no es suyo, eres tú y tu tonta hija— dice ella riendo. La mujer se puso pálida al escuchar que alguien sabía sobre su secreto, ella no sabe cómo esa niña sabía que Jazmín era su hija.
Ella enojada intentó intimidar a Verónica.
—Óyeme bien mugrosa, si quieres perder la lengua, será mejor que no digas nada— dice la mujer y Verónica nuevamente se ríe.
—No, será mejor que me escuches bruja, tú a partir de hoy vas a cuidar bien de estos niños, o de lo contrario, mi amigo el segundo príncipe, sabrá sobre lo que le haces a estos niños— dice Verónica con un brillo malicioso en sus ojos rojos y la mujer retrocede asustada, pues los ojos de esa niña tienen un brillo malicioso.
—¿Tú me estás pidiendo que cuide de ustedes? Suficiente he hecho yo, que cuando nadie los quiso, yo fui quien le dio techo— dice ella y Verónica se enojó por eso.
—Llamas techo a este cuchitril de quinta, ¿qué haces tú por estos niños? Si muchos aquí están desnutridos del hambre, ¿no ves la vestimenta que ellos cargan, en cambio, tú y tu hija visten como princesa? Pero ya eso se acaba hoy, haces lo que digo, o iré yo misma al palacio y le contaré al emperador todo el mal que le ha hecho a esos niños, que con tan solo 5 años, tienen que trabajar, mientras que tú solo haces darte buena vida al lado de tu hija, ya a partir de hoy, yo no dormiré aquí y si me pasa algo, mi amigo el segundo príncipe se dará cuenta, pues él tiene hombres cuidando de mí en las sombras— dice ella y no se equivoca, pues fuera del orfanato, están dos hombres para cuidar de ella, y están atento a lo que pasa, por si tienen que entrar a defender a la niña, es solo que son hombres del príncipe Osiris Sulen.
Al escuchar esa declaración tan fuerte, Martha por un momento vio los ojos rojos de Verónica, los cuales parecían un mar de sangre.
Ella por un momento, en la profundidad de su mente, vio pasar su vida frente a ella, y su final, no fue para nada bueno.
La mujer se asusta tanto, que sale de ahí a hacer lo que le dice aquella niña, pues en sus ojos, vio la muerte en persona y teme morir.
Al estar sola, Verónica ríe sin parar, pues todo lo que le dijo a esa mujer del segundo príncipe, no es más que una mentira inventada por ella, solo espera que esa mujer no intente nada, ya que matarla ahora, sería algo que no desea, pero si lo tiene que hacer, no le queda de otra más que hacerlo.
Con esos pensamientos en mente, Verónica se fue hasta su cama, y allí se recuesta un poco, y no pasó ni una hora. Cuando a su puerta llega uno de los niños a buscarle, este le avisa que todos la esperan en el comedor para cenar.
Ella al escuchar eso, sonríe, pues parece que la bruja se está tomando muy en serio sus amenazas y eso es bueno.
En compañía de ese niño, ella va hasta el comedor, en dónde ya estaban todos los niños esperando por ella, allí también estaban la bruja y su hija.
Con la vista ella busca un lugar vació, y lo encuentra alejado de todo, ella le restó importancia a eso, y se fue a sentar, al hacerlo, entraron al comedor unas dos doncellas todas vestían mejor que todos los niños, parece que estás mujeres también se daban la buena vida con el dinero que ellos traen de la calle, y en efecto es así.
Las doncellas miraban con asco a todos los niños, como si fueran una especie de plaga, y hasta le servían la cena de mala gana, parece que ella va a tener que darle una lección a esas despreciables mujeres, para que aprendan a respetar a las personas, sin importar que estas sean pobres o ricos.
La cena al menos olía bien, bueno, al menos la reina de las brujas hizo buen trabajo.
Cuando fue el turno de que le sirvan la cena a Verónica, una de ella le trajo un plato el cual se ve delicioso, pero Verónica sintió en él un olor extraño, no tiene que ser adivina para saber, que su cena está envenenada, parece ser que aquella mujer teme que Verónica diga su secreto, y de este modo sus planes se arruinen.
Ella con disimulo mira al cuarteto de brujas, y ve que tres de ellas están mirando en su dirección, es claro que ellas esperan que coma de la cena para que muera.
Aquellas mujeres, al ver que la niña tuvo contacto visual con ellas, apartaron la vista de ella, como para que ella no sospeche nada.
Como fue hija de un mafioso, ella sabe que todo el que va a envenenar a alguien, lo hace para que este muera en su habitación durante la madrugada.
Pero también se puede dar el caso, de que ella muera al instante, con tan solo la primera cuchara de cena.
Si tan solo esa cena estuviera purificada, ella disfrutaría de ella sin ningún problema, y como por arte de magia, aquella cena dejó de oler raro, ya que se había purificado.
De manera disimulada, y ahora que no la están viendo, ella toma una cuchara y la lleva a su nariz, y en efecto su cena, ya no huele a veneno, es claro que su deseo se hizo realidad.
Sin miedo al éxito, ella confiada, comenzó a comer, y debe de reconocer que la cena es de su agrado. Parece que la quieren alimentar bien antes de que muera, pero lo último no se le dará nunca.
Las brujas nuevamente estaban mirando, y se notaba que estaban felices.
Durante toda la cena, ellas estaban pendientes de Verónica, como en espera de que ella muera, pero aquella niña en su mente retorcida, mientras todos cenaban, estaba pensando en algo muy malo.
Cuando la cena terminó, todos se levantaron de sus asientos, y eso incluye a las brujas, quienes aún mantenían la esperanza de que la niña muera, pues la cuidadora, ya le había informado sobre la situación, y esas doncellas fueron quienes le dieron la idea de usar veneno para quitarla del medio.
Con alegría todos se fueron a dormir, pero a medianoche, la situación para dos de ellas cambiaría para siempre