Rosa La Pasión Hecha Mujer

Todo estaba fríamente calculado, los planes de los hombres guerreros, sabios, viejos y Cacique comenzaron de una vez... Nadie sospechaba nada, estos eran muy cautelosos...

Rosa no sabía que estaba siendo observada en cada paso que daba, el indígena guerrero era muy bueno escondiéndose, siempre estaba vigilante de esta señorita que cada día se hacía más grande y más hermosa, este hombre anda confundido han pasado cinco meses desde que Rosa fue hechizada por el hada del arcoíris y está siendo vigilada por este guerrero, ella no se imagina que es seguida a todos lados y tampoco la potencia de sus poderes, aún no ha tenido contacto con ningún hombre...

Ese poder se activa en ella, cuando la quieran tomar a la fuerza o hacerle daño, ella aún se encuentra inocente de este suceso que está a punto de descubrir...

Rosa mira a todos lados, ve que está sola...

- Debo aprovechar que estoy sola, mi papá me ha dado órdenes estrictas que no salga de la aldea, pero me muero por estar allá en el campo, mirando y observando todo, la selva es el lugar más grande y maravilloso para contemplar, necesito ese contacto, debo ir así sea unos minutos...

Rosa se escabulle no sabe que el indígena guerrero Paraconí la ha estado observando a cada paso que da, él solo la deja ir al río con las demás mujeres, para asearse, es ahí la única manera que este indígena no la vigila...

Ella se acerca a la densa selva y sale corriendo, como un alma libre, detrás de ella va este hombre observando todo lo que ella hace...

-Pero que chica más astuta, creo que me está gustando mucho, más que su mamá, además sería más fácil para mí llegar a ser el Cacique.

- Pero que hace?

- Se ve hermosa danzando, canta como una diosa, para quien son esos cantos?

Este hombre está fascinado con la belleza de esta mujer, su baile y su canto a la naturaleza la envuelven en una magia que puede hipnotizar al más centrado... Ese olor, esa fragancia a rosas invade el lugar.

- No puedo aguantar quiero hacerla mía ya, esa piel brillante, ese olor que irradia, su cabello largo como una cascada, esos movimientos suaves y dulces, esa voz...

- Pero que me pasa, debo contenerme no quiero ser ajusticiado por el Cacique por haber hecho daño a su hija, la princesa Rosa.

- Esa bella mujer hechiza a cualquiera, debo esconderme mejor, si se da cuenta, me sacan de esta misión y seré la deshonra de la tribu.

En eso Rosa se expresa:

- Pero que bellas rosas, voy a llevar para que mi abuela Tata las vea... Mi corona quedó súper especial... Me debo ver hermosa con ella puesta...

En eso escucha un sonido, ella se pone en alerta... Observa cada detalle, cada árbol, no ve nada...

- Mejor regreso a la aldea, creo que alguien o algo anda cerca...

Rosa toma las flores en una cesta y sale corriendo, ella no se da cuenta que está siendo perseguida por una pantera negra.

Esa pantera negra se adelanta y la piensa atacar, todo bajo la mirada de Paraconí, Rosa se detiene al ver a la pantera en frente...

- A ver linda Pantera, no soy tu almuerzo, respétame, solo ando buscando Rosas y flores para verme linda y llevar hasta mi aldea... Chu, chu ahora vete, sacude sus manos en señal de ayentar el animal...

- Pero que hace está niña, mejor preparo una flecha para matar ese animal... dice Paraconí...

En eso la Pantera ataca a Rosa, la tumba al piso, dan varias vueltas, pero este al hacer contacto con la chica se vuelve polvo en sus narices... Y Rosa se convierte en una Rosa roja... ante la mirada del guerrero, ve los poderes mágicos de la mujer... Queda en su sitio, pasmado y sin poder moverse o decir algo...

- Rosa vuelve a su estado normal, se queda en el piso observando todo a su alrededor, pensando en lo que había sucedido.

- Pero que es esto? Dónde está la pantera?

- No puedo creer que se haya ido como si nada...

Se encontraba Rosa toda extrañada.

Mientras tanto Paraconí continuaba inmóvil, se había quedado como una estatua, paralizado del susto.

- Mejor recojo todo esto y me regreso a la aldea...

Ella corre ligeramente y detrás de ella su cuidador que aún seguía pensando en ese suceso que acababa de ver... No se explicaba nada y al mismo tiempo sentía miedo de ese poder...

- Me voy directo a dónde la abuela Tata.

- Abuela, ¿dónde está? ¿Quiero enseñarte algo?

- Aquí estoy que traes para esta vieja anciana...?

- Mira abuela mi nueva corona de rosas, y traje más flores para hacerte una para ti.

- Volviste a salir de la aldea mi niña, si tu papá se entera te va a amarrar a un árbol hasta que te consiga marido.

- Abuela ya sabes que no puedo estar solo metida aquí, sin hacer nada, estuve en los alrededores de la aldea, necesitaba crear y tejer está linda corona.

- Mejor que me hubiese comido el puma... así no tengo que estar aguantando sus regaños, no dejan hacer nada.

¿De que puma hablas, viste uno cerca de la aldea? Estuviste en peligro Rosa...

- No abuela fue un sueño que tuve, no creas todo lo que digo... Ella se coloca la mano detrás de su cabeza y se ríe pícaramente.

- Dame tu mano Rosa, me estás diciendo mentiras...

La abuela toma la mano de Rosa y como por arte de magia en su mente ve todo lo que ella ha pasado... La abuela tiene ese poder de observar a través del contacto, poder que fue otorgado por un hada cuando Tata era muy joven...

- Debo aconsejar a esta niña, ella debe poner más cuidado con ese gran poder que le han otorgado... nadie se imagina lo que está niña trae encima...

Solo el amor verdadero podrá deshacer este hechizo...

La abuela no dice nada en el momento, pero queda muy callada, invita a Rosa a hacer unas cosas y su corona.