LA HIBRIDA DE LAS SOMBRAS

David: (cuando desperté estaba en la habitación que tiene mi tía dispuesta para mí en el ducado) ¡Alejandra!

Lucrecia: tranquilo hijo ella está bien, está descansando

David: ¿madre cómo llegamos aquí?

Angello: despertaste mocoso, cuéntame que sucedió

David: estábamos descansando cuando esos tipos aparecieron, creí que habíamos huido en silencio, pero se habían esparcido para reconocer la zona, claro que empezamos a huir eran muchos, en una de esas uno nos alcanzó y logre derribarlo, llegamos al rio y Ale lo cruzo primero mientras yo me encargue de los que nos habían alcanzado nuevamente, cuando salí a la orilla sentí que me alcanzo una flecha, pero no podíamos detenernos, padre me hablo de lo que le pueden hacer a una chica los tipos malos, seguimos corriendo pero la pérdida de sangre no me dejo avanzar y termine por desmayarme, cuando reaccione Ale me llevaba en la espalda, le dije que se fuera pero no quiso, es todo lo que recuerdo

Angello: lo hiciste muy bien, gracias por volver a salvo a casa, aunque es muy extraño no tienes ninguna herida en la espalda

Lucrecia: ¿hijo no recuerdas más nada?

David: no, nada madre (será un secreto)

Angello: (conozco a este mocoso y sé que sabe algo) bien, la mía principessa aun duerme, su agotamiento fue mas grande que el tuyo

David: ¿pero estará bien? No está herida ¿o sí?

Lucrecia: si, Alana la está cuidando, solo hay que dejarla descansar te llevo acuestas mucho tiempo y aunque no lo creas nosotros también nos cansamos cuando sobrepasamos nuestro limite

David: lo entiendo madre, tenía un poco de miedo

Lucrecia: pero lo hiciste muy bien mi príncipe, la mejor decisión de tu padre es dejar que entrenaras desde chico, gracias a eso ambos están a salvo

David: pero me desmaye

Lucrecia: tranquilo mi niño hermoso, lo hiciste muy bien, más que bien nadie se imaginó que el entrenamiento tuviera este contra tiempo, lo importante es que actuaste de la mejor manera y protegiste a tu prima

David: padre me dijo que en este mundo hay gente muy mala que cuando ven la oportunidad de hacer daño ellos no se miden si eres un niño o no, tenía miedo de no proteger a Ale

Lucrecia: ya mi cielo, ven aquí necesitas un abrazo de mamá

------------------------------------

Alejandra: (voy despertando apenas me siento como nueva, espera David)

Alana: por fin despiertas mi niña, me tenías preocupada tuviste algo de fiebre

Angello: la mía principessa, ¿te duele algo?

Alejandra: estoy bien papi no te preocupes, ¿Dónde está David? Él estaba herido

Angello: él está bien, ya está entrenando

Alejandra: ¿tan rápido?

Alana: mi niña estuviste dormida tres días

Alejandra: ¿tanto?

Angello: excediste tus límites al llevarlo acuestas

Alejandra: ¿Quién nos salvó?

Alana: aun no lo sabemos, cuando llegamos había asesinado a todos esos mercenarios

Alejandra: ¿el solo?

Angello: si, ¿lo alcanzaste a ver?

Alejandra: tengo una imagen borrosa, no estoy muy segura

Angello: bien, lo importante es que las cosas salieron bien, me retiro tengo una reunión con el emperador

Alejandra: ¿mami que es él? No creo haber visto nada igual en los libros

Alana: supuse que preguntarías he hice este dibujo para ti, trate de buscar algo de información, pero no encontré nada, tal vez tu tía Lucrecia pueda ayudarte

Alejandra: gracias mami, iré a ver a David y luego la veo a ella

David: por fin despertaste, creí que me ibas a dejar solo en manos de tu padre

Alejandra: luces exhausto

David: al tío le pareció grandiosa la idea de aumentar el entrenamiento, estoy que no aguanto mis pobres musculitos ya no aguantan mas

Alejandra: sobre lo que paso

David: no hablemos de eso, hagamos como que no paso de acuerdo

Alejandra: ¿y si pasa algo?

David: no creo, pero si pasa, para eso están nuestras madres

Alejandra: de acuerdo, iré hablar con la tía necesito investigar algo

David: ¿es sobre el tipo que nos ayudó?

Alejandra: si, algo de él me intriga sobre manera

David: tienes 12 años no creo que sea para tanto

Alejandra: sigue entrenando yo iré a investigar

David: ni lo pienses yo también quiero saber

Alejandra: chismoso (mi tía parece que nos estaba esperando, estaba en la sala de estar con muchos libros y documentos antiguos)

Lucrecia: tardaron, necesito regresar al palacio, aquí está todo lo que pude encontrar con respecto al tema, aunque parece algo increíble que ustedes hayan visto a esa creatura, ¿estas segura que lo viste cielo?

Alejandra: estoy segura tía, además…

Lucrecia: si ya lo sé, tus padres también lo vieron, eso es lo más increíble, me retiro cualquier cosa me encuentran en el palacio