NovelToon NovelToon
Salvando A Mi Hermano Ernesto

Salvando A Mi Hermano Ernesto

Status: Terminada
Genre:Romance / Posesivo / Mujer poderosa / Época / Reencarnación / Mundo mágico / Completas
Popularitas:227.5k
Nilai: 5
nombre de autor: LunaDeMandala

Elysia renace en un mundo mágico, su misión personal es salvar a su hermano...

NovelToon tiene autorización de LunaDeMandala para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

Preparativos 2

Esa noche, al volver a su habitación, se encontró a Hans apoyado contra la ventana, con los brazos cruzados. La miró con una intensidad peligrosa, como si hubiese estado esperando solo ese instante.

—Así que… —dijo en voz baja, caminando hacia ella—, pediste trajes de encaje para la noche de bodas.

Elysia parpadeó, sonrojándose hasta las orejas.

—¿Las modistas te lo contaron?

Hans se inclinó hacia ella, atrapándola contra la pared con su cuerpo.

—Lo contaron riendo, como si fuera un secreto travieso. —Su voz era grave, áspera—. ¿Sabes lo que me provocó escucharlo?

Elysia sonrió coqueta, intentando sostenerle la mirada.

—¿Celos del encaje?

Hans soltó una carcajada baja y la besó con fuerza, devorándola como si quisiera demostrar que nada podía competir con él. Entre besos y respiraciones entrecortadas, murmuró contra sus labios:

—Por tu culpa estoy pensando en adelantar la boda cada día. No sabes la tortura que es esperar.

Elysia le rodeó el cuello, temblando entre risas.

—Si no puedes esperar, entonces cúlpate por no tener aún un anillo en mi dedo…

Hans gruñó divertido y volvió a besarla, esta vez con un reproche disfrazado de promesa:

—No te preocupes, Elysia… muy pronto no habrá encaje ni secreto que te salve de mí.

Al día siguiente, Ernesto se quedó en silencio, apoyado contra el marco de la puerta del salón.

Las modistas desplegaban telas brillantes, bordados de plata y catálogos interminables; Elysia reía, girando sobre sí misma mientras se imaginaba con cada uno de los vestidos.

—Ese no, parece demasiado serio para mí… —decía con una sonrisa traviesa—. Quiero uno que me haga sentir que estoy viviendo un sueño.

La risa de su hermana llenó la habitación como un eco desconocido para él. Ernesto apretó los labios, sorprendido. Hacía mucho tiempo que no la veía así: ligera, ilusionada, casi luminosa.

Recordó cuántas veces la había visto llorar en silencio, cuántas veces la había sentido como una carga que debía proteger sin saber cómo hacerlo. Y ahora, frente a sus ojos, Elysia parecía estar floreciendo por sí sola.

El peso en su pecho se alivió.

—Si eres feliz… entonces yo también lo estoy —murmuró para sí, sin que nadie lo escuchara.

Y por primera vez en mucho tiempo, Ernesto no sintió miedo de perderla, sino calma al verla sonreír como nunca antes.

Al día siguiente, Elysia abrió lentamente los ojos aquella mañana, aún adormecida, y lo primero que vio fue un resplandor dorado en su mano derecha. Su respiración se cortó. Un anillo de compromiso, delicado pero imponente, brillaba en su dedo como si siempre le hubiera pertenecido.

El corazón le dio un vuelco cuando notó el aroma de flores frescas. Su habitación estaba cubierta de ellas: rosas, lirios y violetas, como si la primavera entera hubiera estallado en aquel lugar durante la noche.

Sobre la mesita de noche, entre los pétalos, descansaba una nota escrita con la caligrafía elegante e inconfundible de Hans.

"Eres mía."

Elysia apretó la carta contra su pecho, con la cara encendida entre el rubor y la sorpresa. Elysia sabía que no había preguntado, que no había esperado su respuesta… Hans simplemente había decidido marcarla como suya.

Cuando se levantó de la cama, aún mareada de emoción y desconcierto, lo encontró en su sillón favorito, observándola con esa sonrisa arrogante y satisfecha.

—¿Te gustó mi manera de pedir tu mano, brujita? —preguntó, su voz grave y burlona.

Elysia no pudo contenerse. Con el anillo aún brillando en su dedo, se lanzó hacia Hans y lo abrazó con fuerza, sintiendo cómo su pecho palpitaba al compás del suyo.

—¡Hans! —susurró, entre risas y suspiros—. No puedo creerlo…

Él sonrió, inclinándose para atraparla en un beso profundo y posesivo, sus manos recorriendo suavemente su espalda mientras ella se aferraba a él. Era un momento de completa entrega, de pasión contenida y emoción desbordada.

—Mi brujita… —murmuró Hans entre besos—. Eres toda mía.

Elysia respondió con igual intensidad, pero de pronto se separó, con los ojos brillantes y una risa entre jadeos:

—¡Espera! —exclamó, sujetándolo de los hombros—. Aún faltan dos semanas para la boda. No podemos… no aquí, no ahora.

Hans arqueó una ceja, divertido y confundido al mismo tiempo, pero obedeció a regañadientes.

—¿Dos semanas…? —repitió, como si ese tiempo fuera una eternidad—. Muy bien, brujita. Pero recuerda… te esperaré con todo el tiempo del mundo… y no toleraré retrasos.

Elysia lo empujó suavemente hacia la puerta, sonriendo traviesa mientras Hans la seguía con la mirada, respirando hondo para contener su deseo.

—Corre, corre antes de que cambie de opinión y te arrastre otra vez —dijo, dejando escapar una risa baja y peligrosa.

Los días siguientes, la mansión se transformó en un hervidero de actividad. Las modistas llegaban a primera hora, desplegando telas de seda, encajes y bordados que harían que la boda fuera recordada por todo el Imperio Volt. Elysia, emocionada y risueña, corría de un lado a otro, probándose vestidos, eligiendo bordados y colores, mientras sus risas llenaban los pasillos.

Cada vez que Hans la veía, su mirada se volvía más intensa, más posesiva. No podía soportar que otras manos tocaran su vestido, que otras voces la hicieran reír, ni siquiera que los criados se acercaran a ayudarla con los zapatos o el cabello sin su permiso.

—¡Mi brujita! —exclamaba desde la puerta de la habitación de ensayo—. Nadie más toca eso. Solo yo puedo tocar tu cabello, tus manos… y tu vestido antes del altar.

Elysia lo miraba entre divertida y resignada, aunque no podía negar que su corazón se aceleraba cada vez que lo veía acercarse con esa expresión de dominio absoluto y amor ardiente.

—Hans… —decía, riendo suavemente—. Si sigues así, me voy a marear y voy a terminar corriéndote otra vez de la habitación.

Pero él solo sonreía, avanzando un paso más, dejando que sus dedos rozaran suavemente los de ella cuando ajustaba algún detalle del vestido.

—No me importa que me corras, brujita —murmuró con voz grave—. Cada vez que te veo así… feliz y radiante… me vuelvo loco.

Y así pasaban los días: Elysia entre telas y risas, Hans entre papeles, seguridad y la imposibilidad de quitarle los ojos de encima. Cada mirada, cada roce accidental era suficiente para que él sintiera que el mundo giraba solo alrededor de ella.

Incluso Ernesto, desde lejos, podía ver la complicidad y la intensidad que había entre ambos, y por primera vez en mucho tiempo, se sintió tranquilo al ver a su hermana tan segura, tan feliz y tan absolutamente enamorada.

1
Natalit
jajajaja ahí si se cobro todo la abstinencia que le toco pasar, ese tenia el arma bien cargada 😅😅😅
Margarita Acuña Cerda
Insisto que mujeres más geniales
Beatriz Lugo
waoo también se confundió ella .. Ernesto es un barón no un conde 🤭🤭🤭🤭
Beatriz Lugo
creo que Ernesto será el enamorado de la princesa Bella Volt🤣🤣🤣
Beatriz Lugo
espero que no sean niñas porque se fastidio la cosa 🤣🤣🤣 les pondrá cinturones de castidad a las pobres niñas
Beatriz Lugo
ay por dios que exagerado
Beatriz Lugo
ahora no la dejará ni respirar
Beatriz Lugo
siempre la doblegan con caricias. esta es la protagonista más tonta que he leído desde el principio siempre ha cedido a él y solamente ha sido altiva para pedirle ayuda para salvar a su hermano fuera de eso no ha demostrado carácter. en fin siempre lo adornan de cosas hermosas en el último capítulo como si las acciones previas se echaran al olvido. lo digo porque el que ha sufrido esas acciones no olvida tan fácilmente aun amando a la persona
Beatriz Lugo
Este es un amor enfermizo entre ambos.
Mary Lemos
excelente
amalia aguilar royo
vaya amor tóxico el del conde
Sandra Herrera
Hermosa novela, me gustó mucho felicidades
amalia aguilar royo
Porque no se casan
Elba Lucia Gomez
esto es enfermizo, la verdad desagradable😭
lupita
muy hermosa tu historia autora,aunq nuestro Hans muy posesivo con su brujita pero. bueno q ella aún así lo amo apesar de su toxicidad jaja un obra maravillosa
Letty Santaella de Samaniego
que intenso Hans,aún asi muy bonita novela
carmen castillo
Por dios nunca lo pensó y dudo de él ahora que están casados lo duda🙄🙄🙄🙄
Yessica Moreno
jajajajajajaja el solo no quiere que entre como si fuera su casa
Adriana Eugenia Espinoza Fernandez
cómo siempre su trabajo es excelente autora, siga superandose, mis felicitaciones para usted
Marga Diverio
gracias 😊
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play