Isabel 2, Siempre A Tu Lado

Jhon Santiago

Estoy agradecido con Dios, la vida y con mi adorada, mi siempre querida y recordada Nicole por no dejarme solo al regalarme esta princesa hermosa de mi corazón... Hoy en la reunión para celebrar el primer añito de mi Sabrina, me percaté de algo muy particular... ¡Y es que la casa estaba llena de personas con las que compartimos muchos momentos agradables, pero faltaba alguien muy especial en la vida de Nicole y mía... Astrid! Desde que llegué a la casa no la vi y eso me parece muy extraño, llegó tarde a la celebración.

Varios días después...

- Se puede saber dónde pasaste todo el día? --digo al ella apenas encender la luz de su habitación, pues al terminar la reunión decidí quedarme a dormir en casa de mis padres con mi hija--

- Santi! --dice con su mano en el pecho y su voz un poco temblorosa-- Me asustaste! ¿Que haces aquí a esta hora?

- Yo pregunté primero. ¿Dónde pasaste todo el día? Mejor dicho con quién? --digo bastante tranquilo aún sentado en el mueble cerca de la ventana--

- No tengo por qué responder, estás en mi habitación, invadiendo mi privacidad... --dice un poco molesta--

- Astrid! Astrid, hermana que te pasa? Sabes que si necesitas algo o conversar...

- No necesito nada... --sus ojos están muy rojos-- Mejor vete --dice mientras señala la puerta--

- Por qué estabas llorando?

- Ya te dije! No es tu problema...

- Claro que es mi problema! --me acerco a ella y la abrazo-- Eres mi hermana y te quiero, he tenido algunos problemas, pero igual estoy al pendiente de ustedes --la escucho llorar y me abraza más fuerte-- Que te pasa, por qué no me dices, bien sabes que te puedo ayudar... Astrid por favor no te quedes callada y habla conmigo, soy tu hermano y tu amigo...

- No me puedes ayudar Santi --se separa de mi abrazo y se limpia las lágrimas-- Ahora, te pido por favor déjame sola... --lo dice con esa gran tristeza, sus ojos se llenan de lágrimas--

- Astrid!

- Por favor hermano --me toma de las manos y siento ese profundo respiro-- Santi quiero estar sola, por favor.

- Está bien! ¿Pero si me necesitas, sabes que estaré a solo una llamada, Si?

- Lo sé --me mira con esos ojitos aguados y me regala una triste sonrisa-- Gracias...

Salí de su habitación más preocupado que al principio, no la puedo obligar a decirme lo que le sucede...

- Nicole, mi amor como me haces falta...

- Hermano! ¿Estás bien? ¿Lograste algo?

- Jhoana! Nuestra hermana no quiso hablar conmigo y con una gran inquietud por saber que es lo que realmente está escondido, pero lo que si es seguro es que está muy mal, está muy triste y estuvo llorando todo el día...

- Quién estuvo llorando todo el día? --Robert siempre llega como caído de la mata-- Por cierto en todo el día no vi a Astrid. Está enferma?

- Robert llegaste caído del cielo! --Jhoana se abraza a su brazo y lo guía hacia la sala, yo los sigo porque algo se le ocurrió--

-Jhoana! Yo sé caminar solo --él se ve algo confundido y yo también--

- Ya cállate Robert, Santi y yo necesitamos que nos ayudes en una misión... --Jhoana aún no se explica y obvio no entendemos nada, pero mejor espero tranquilo en mi cómodo mueble a qué ella nos diga que tiene dando vueltas en esa cabecita--

- Yo? --se ve mucho más confundido que de costumbre. Robert es el hijo menor de la tía madrina Marcia y desde que tenemos uso de razón siempre ha estado interesado en Astrid aunque ella siempre le sale con sus patadas, él siempre ha estado para ella--

- Sí, tú... Robert, cómo te digo?

- Jhoana no des tantos rodeos y suelta de una vez lo que me quieres decir --yo solo me quedo callado, escuchando a ambos--

- Ok... --se sienta al lado de Robert-- Estamos preocupados por Astrid...

- Le paso algo, está enferma? --se le nota la preocupación en los gestos--

- Jhoana no deberías de meter a Robert en esto... --le digo, pues yo quiero a Robert cómo otro hermano y no quiere que salga lastimado con la posible ocurrencia de Jhoana--

- Estoy dispuesto a hacer cualquier cosa para que Astrid esté bien, solo díganme por dónde hay que empezar...

- Gracias Robert, sabía que podía contar contigo --dice Jhoana con su suave sonrisa-- Necesitamos que nos ayudes a descubrir que le pasa a Astrid, últimamente está muy triste y alejada de la familia, casi no se la pasa en casa y sus notas han bajado mucho. Robert, disculpa por meterte en esto, pero creo que eres nuestra mejor opción en este momento, como sabes antes tú y ella tenían muy buena relación...

- Hasta que le hable de mis sentimientos hacia ella y me dejó de hablar por un tiempo, pero luego Nicole logró romper esa barrera... Claro que les puedo ayudar --toma las manos de Jhoana-- Cuentas conmigo.

- Gracias Robert, te lo agradeceremos toda la vida...

- Robert! No creo que sea buena idea, como ya lo sabemos tus sentimientos hacia ella son diferentes y no quiero que te hagas falsas ilusiones con Astrid... --le digo con mucha sinceridad y respeto--

- Santi, sé muy bien dónde me estoy metiendo no te preocupes hermano, ya soy grande y aunque Astrid no me ame como yo la amo a ella, me quedaré más tranquilo si ella es feliz.

- Gracias... Pero hoy no te recomiendo que hables con ella, en pocas palabras me corrió de su habitación...

- Santi! Mira si ella está muy triste, entonces es el mejor momento para acercarme y cuidar de ella...

No hay que descartar ninguna posibilidad, por lo tanto, deje que Robert siguiera con la idea de Jhoana, pero yo no me quedaré de brazos cruzados; esa misma noche y aprovechando que mis padres no están en casa hable con Jackson porque la seguridad de Astrid no está funcionando...

- Jackson, quien está a cargo de la seguridad de Astrid?

- Es Víctor, pero la señorita Astrid le dio la noche libre...

- Llámalo, quiero hablar con él...

Unos 10 minutos más tarde, Jackson regreso con Víctor...

- Señor Jhon Santiago, el señor Jackson me dijo que usted me llama, dígame en qué puedo ayudarle?

- Ven Victor, siéntate... Solo quiero conversar contigo sobre mi hermana y sus "actividades" diarias --digo me siento frente a ellos--

- Como usted sabe yo acompaño a la señorita a la universidad, espero hasta su hora de salida, hay días que pasa al club, otros de tienda, peluquería, visita el apartamento de usted... --lo noto un poco nervioso--

- Victor hay otro lugar que últimamente han estado frecuentando?

- Disculpe señor, pero la señorita Astrid me dijo que no comentará nada.

- Si no me dices en este momento mañana no te preocupes por presentarte a trabajar...

- Señor, perdón... Mi abuela está enferma y la señorita Astrid prometió ayudarme con el tratamiento si le guardaba el secreto...

- Víctor si mi papá no está en la ciudad y algo ocurre debes notificarle a Jackson --respire profundo-- Lo siento por tu abuela, pero si le sigues guardando el secreto a mi hermana...

- Señor Jhon Santiago, señor Jackson no me despida, necesito el dinero para mi abuela...

......................

...🌻❤️🇻🇪☺️...