Isabella Quintana, una mujer de veintiséis años, que esconde algunos secretos, que quedan al descubierto, cuando su guardaespaldas y, su pareja con la que a vivido durante más de ocho años, en secreto sin que nadie lo sepa.
Tras la muerte de su guardaespaldas, se desencadenan varios conflictos donde,
sé ve implicada, en un accidente.
Donde la culpan a ella de ser la principal sospechosa y, es secuestrada por Alek Petrov, un mafioso, de procedencia Rusa.
Quien está dispuesto a quitarle la vida, con tal de que pague, por lo que ha hecho, pero queda impactado con su belleza, cuando la ve por primera vez en unas fotos.
Acompañame en está nueva historia, a descubrir donde la traición, y la ambición y los conflictos de amor, jugando su papel principal.
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Alek cree que Isabella se escapo
Ya eran más de las diez de la noche e Isabella no llegaba, para Alek era evidente que Isabella se había escapado, y todo por confiado.
Eran las palabras que Alek se repetía, pero no podía hacer nada, si no tendría que decir que él e Isabella no tenían nada que ver, así que esperaría a que ella llegará, pero los minutos pasaban y ella no parecía.
Pero cuando menos se lo esperaba Alek, escucho que la puerta se abría, cuando la vio entrar se alegró de verla, pues ella no se había escapado.
Vio que traía en una de sus manos unos documentos a lo que enseguida se acercó y le dijo.
Cariño, a donde fuiste, porqué no me dijiste que saldrías yo te hubiera acompañado.
Isabella volteó hacia una de las habitaciones donde vio a Cristina que los estaba viendo ella le sonrió a Alek, lo abrazo muy coqueta y después le dijo.
Cariño no te encontré en la casa, pensé que habías salido, así que fui hacer unos pendientes.
Alek habré la puerta de la habitación, después besa a Isabella, devorándola a besos, Cristina se da la vuelta y vuelve entrar a su habitación.
Cuando Isabella y Alek entran a la habitación, Isabella se separa de inmediato de Alek.
Que pensaste que me había escapado.
Pues como no te encontré por ningún lado, que querías que yo pensará.
Si me lo imaginé, pero a donde fui tu no podías ir.
Porque.
Porque fui al cementerio, y después fui a la clínica, para hacerme varios estudios.
Alek traga en seco, pues no pensó que Isabella, fuera a ir a la clínica, estaba tomando muy enserio lo de su hijo, así que no le quedó más que decirle.
Y todo esta bien, con el bebé.
Pues hasta ahora sí, parece que todo esta bien, le explique a Fabián lo que me había ocurrido, me dijo que por ahora no podemos hacer nada. Hasta que el bebé este un poco mas grande, o cuando nazca.
Isabella da un largo suspiro y después le dice a Alek, que este solo la queda viendo.
Voy a estar con el miedo que mi bebé, pueda tener alguna deficiencia. Pero no me importa, lo mismo lo voy a querer.
Alek la queda viendo, y se siente culpable por lo ocurrido, si su hombre no le hubiera dado la descarga eléctrica ella no tuviera que sufrir si su bebé naciera con alguna discapacidad.
Solo piensa que todo saldrá bien Isabella. Isabella solo voltea a verlo sin responderle.
Isabella, solo quiero disculparme, por lo de hace rato, creo que no debió pasar
olvida eso y no lo vuelvas a mencionar, no volverá a pasar solo tenemos que pensar, quien me quiere involucrar en el accidente de tu hermana.
Claro, es lo único que nos debe importa.
No se como ella me pide que olvide lo que paso, si yo deseo volver a repetirlo y terminar lo que quedo empezado. nada más de verla me pone más que duro.
Sabes Alek, quiero pedirte un favor, espero que no te niegues.
Dime que es lo que quieres pedirme, si esta en mis manos te puedo ayudar.
Quiero que mi empleada de confianza vaya conmigo , para que me atienda, ella.
Tienes algún problema con Irina, no estas a gusto con ella.
No se trata de eso, pienso que tiene mucho trabajo me atiende a mi a tu hermana, y pues quiero que este Anita conmigo, así no estoy tan sola.
Si así lo deseas esta bien, puedes llevarla contigo.
También quiero pedirte que mañana antes de que no vayamos necesito ir a un lugar. Puedes espérarme aquí, voy por Anita, y voy al lugar donde tengo que ir.
Alek se queda viendo a Isabella, lo que ella le esta diciendo, pues no quiere que el la acompañé. Que lugar es ese que no quieres que yo te acompañe. Y porque tu empleada si puede ir Isabella que ocultas.
Isabella solo hace algunos gestos y después le responde. - No oculto nada, esta bien si quieres ir pues acompañame, voy al departamento de mi novio. Antes de morir me dijo que había dejado algo para mí.
Y lo había olvidado por completó, por eso no quiero que vayas porque, para mi sera algo difícil estar ahí.
Entiendo, pero te voy acompañar que tal si te ocurre algo, *****recuerda que estás embaraza*****.
A Isabella le sorprende que Alek, se preocupe que esta embarazada, así que le dice. Esta bien.
Después Isabella se dio la vuelta entrando al baño, mientras que Alek se acomodaba en el sofá.
Al día siguiente, por la mañana Isabella después del desayuno se despide de su familia, después sale de la casa de sus padres, tomada de la mano de Alek, Andrew y los demás solo la quedan viendo, a lo que Andrew les dice.
Bueno, chicos es hora que nosotros también nos vayamos,su hermana esta en buenas manos, no hay de que preocuparnos. Después dice volteando a ver a Henry. Bueno, Henry sabes lo que tienes que hacer, no lo voy a discutir más, contigo.
Si padre, no se preocupe. Henry ya no tuvo que preguntarle más a su padre, pues sabia perfectamente de lo que este le estaba hablando.
Durante el trayecto a la casa de Isabella, solo el silencio existía entre Alek y Isabella, ninguno de los dos pronuncio ninguna sola palabra, cuando llegaron Isabella se quedo unos minutos dentro del auto, a lo que le dijo a Alek. Si quieres puedes bajar.
Claro, porque creo que tardaras, así conozco la casa.
Isabella solo lo quedo viendo y ya no le respondió, bajo del auto se dirigió hacia la entrada de la casa, cuando entró enseguida dijo. Ana donde estás
Esta al escuchar la voz de Isabella, enseguida salio de la cocina, Isabella enseguida les hizo una señal a su gente estos enseguida se reunieron, para esperar instrucciones de su jefa. Alek solo la quedaba viendo, pues tal parecía que todos ellos obedecían con tan solo una señal que ella les hiciera.