Que pasaría si un día despiertas y estás en el pasado una nueva oportunidad, una nueva vida.
Podrá la princesa Diana cambiar el destino de todo un reino.
NovelToon tiene autorización de arce_au para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Un futuro
Luciel despierta poco a poco, sobre su brazo está Diana con su cabellera rosa, al ver el reflejo del sol, sabe que ya es tarde, solo sigue abrazando a Diana, no piensa soltarla.
-Ya es tarde?
-Si, Pero nadie espera que salgamos de aquí así que sigue durmiendo.
-Bien, dormiré entonces.
-Te duele algo?
-No, estoy bien, gracias.
Ambos vuelven a dormir, en el otro palacio también el joven duque despierta con resaca.
-Por fin despiertas, me quiero ir desde hace rato.

-Dios! Que haces vestida así.
-Ya me voy, tengo que regresar al campo de entrenamiento.
-Pero y yo?
-Tu que?
-Mi herida no ha sacado, debes cuidar de mí -Le dice con cara triste -.
-No, ya tuve suficiente de ti.
-Que mala eres, al menos desayuna conmigo.
-Has! Eres muy molesto, pediré algo de comer entonces.
-Sii, voy a lavar mi rostro, ahí me cámbiare
-Si, si, ve, ve. -Le decía con su mano-
Ella sale a pedir la comida, para su buena suerte estaba la joven que la había ayudado.
-Mi señora, en qué le puedo ayudar?
-Puedes traer el almuerzo por favor.
-Si señora.
La doncella baja por la comida, Luisa regresa al cuarto, Andrew ya estaba listo.
-Tienes mejor semblante, estuvo buena la boda no.
-Te busqué, dónde te metiste.
-Ahi estaba, en la sala de té.
-Que? ¿Con las mujeres mayores?
-Si, ellas son entretenidas, tienen buenas anécdotas...
-Jamás lo hubiera imaginado, ja, ja, ja, porque ahí?
-Bueno, las jóvenes solteras son de 16-18 años, son muy jóvenes, se burlarian de mi por no estar casada, las de mi edad ya estan casadas y con hijos, también diran que soy vieja y que no encontraré marido, en cambio las mujeres mayores son mas amables, solo una que otra pregunta como es que no me he casada.
-Tu no eres vieja, además eres... Bella, no les hagas caso
-Ya se
La doncella toca y entra con la comida, ella acomoda todo en una pequeña, poniendo platos y cubiertos, pone la comida y Luisa se sorprende.
-Oye... Por ue nos mandaron comida con miel?
-Bueno... Es que...
La docella titubea un poco.
-Que sucede? -Pregunta Andrew-
-Lo que pasa es que todos ya saben que ustedes pasaron la noche juntos, los nobles de todo el palacio de visitas lo saben, dicen que el duque la sedujo, otros que usted fue la que aprovecho que estaba borracho.
-Maldita lombriz, pero ahorita la voy a dejar pelona, la voy a arrastrar por todo el palacio... Y la voy a aventar al lago, luego...
-Calma, calma, de quien hablas.
-le tu amante, la joven de cabello café, la que me avento el té encima.
-Espera, no vas a ningún lado, vamos a comer, puedes irte, no digas nada.
-Claro que no excelencia.
La joven se retiró, Luisa estaba enojada Pero se calmó al ver los postes de miel.
-Bueno, comeré, jamás me han dado comida de recien casados.
-Jajaja, solo por la comida te emocionas.
-De lo malo lo bueno, a esa lombriz deja que me la encuentre y verás, además tú tienes la culpa, estabas borracho que tuve que traerte a tu habitación, se te soltaron dos puntos, por eso me quede.
-Tienes razón, yo tengo la culpa, espera un momento, hora vuelvo.
-A dónde vas.
Andrew sale y ve a la joven doncella.
-Excelencia, dígame?
-Quien más sabe de mi herida?
-Nadie, Pero si quiere que sea testigo para aclarar las cosas puedo hacerlo, yo sé perfectamente que no podría pasar nada, su herida es bastante seria.
-Nooo, no quiero que digas nada, quiero que digas que ella pasó la noche conmigo si te preguntan.
-Como dice, pero excelencia, ella será señalada.
-Pero me haré responsable, yo quiero hacerme responsable.
-Lo dice enserio?
-Si, por favor, no digas nada, te recompenzare si es necesario.
-No excelencia, está bien no diré nada.
La doncella sin saberlo le estaba dando a Andrew lo que el quería.
-Vaya que sucede, te ves feliz.
-Nada, lo estoy, si todos hablan de ti, me haré responsable.
-Cof ,Cof, Cof... Luisa se ahogaba con su comida y Andrew le pasa una servilleta y agua.
-Estás bien? Come despacio.
-Estás loco, no pasó nada, estás herido, solo con enseñar tu herida es más que suficiente.
-Eso no lo haré, yo seré un caballero, responderé como debe ser.
Luisa deja sus cubiertos, se limpia los labios y voltea a ver seria a Andrew.
-No se por qué lo haces, yo no quiero que lo hagas, me iré de aquí, no es necesario.
-Te pido que te quedes, por favor, jamás había rogado por algo o por alguien.
-No, lo siento.
-No te importo, de que ni siquiera te gusto, puedo darte todo, solo quédate a mi lado.
-Joven duque, no pierda la compostura, yo no soy la mujer que le conviene.
Luisa toma sus cosas para salir, Andrew no dice nada pues no sabe cómo reaccionar, ella lo ha rechazado.
-Me retiro joven duque, el doctor del palacio le puede seguir revisando la herida.
Ella sale directo a las caballerizas, toma un caballo y se va, jamás imagino que ese duque arrogante y presumido se fijara en ella.
Andrew regresa a la cama, por primera vez en su vida siente tristeza por una mujer, solo se cubre ojos con su brazo y unas lágrimas mojan sus mejillas.
-Fui un estúpido, pensé que ella podría quererme, no la culpó, quien quería sinceramente a alguien como yo.
Con los días pasando, Diana tiene reuniones con algunos nobles para organizar los territorios, Luciel esta a cargo de la seguridad de la ciudad y el ejército de la reina.
Nobles que pensaban que no podría con el trabajo se quedan sorprendidos al ver que ella sabe hacer perfectamente el trabajo, más es su sorpresa cuando ella manda hacer auditorias de los principales territorios de la capital.
Luciel junto con Luisa ve los avances de los entrenamientos, los caballeros se quedarán a cargo de otra capitán, ella tiene que regresar a Thaslis
-Capitán, hizo un buen trabajo, en estas semanas han progresado bastante.
-Gracias majestad, la capitán Leonor s quedará a cargo.
-Pensé que podría quedarse.
-no majestad, debo regresar con mi maestra.
-Bien, entonces me retiro.
-Que le vaya bien majestad.
-No sabía que estaba aqui.
-Apenas llegué, vine a despedirme, me voy, me esperan en el Ducado.
-Que tenga un buen viaje excelencia.
-Si... Bueno me voy.
Andrew solo se retira, La marquesa Bennett la ve de lejos y habla con ella al respecto.
-Deberias darle una oportunidad.
-Dios! Me asusto.
-La forma en qué te mira y a jugar por como te comporta con el, te gusta no es cierto?
-No...
-Luisa, ya no tienes 16 años, lo que pasó esta en el pasado, tu tienes derecho a ser feliz.
-Cuando lo sepa se le pasará lo que siente por mi.
-Entonces dile, él no sabe por qué lo rechazas, si lo sabe tiene dos opciones, te acepta y son felices, o demuestra lo idiota que es y regresamos a casa.
La marquesa se retira, debe preparar el viaje al puerto y a Thaslis.
-Haaa, quiero ir a casa, quien diría que extraño a mi marido, amo a ese bruto, solo espero que no le esté dando muchos dulces a los niños.
-Mi amor ya regresé, como te fue con los nobles.
-Lo común, piden reducir impuestos para ellos, uno propuso aumentar los impuestos a los plebeyos.
-Que descarado.
-Que dice Luisa, entreno bien a mis caballeros.
-Hasta agotarlos, ahora serán dignos de cuidar a mi reina, mi amor mis padres se van en unos días.
-Si, mi padre se va también, extraño a mi madre, a Philip, a los mellizos.
-Lisa y Hunter vendrán en el invierno, ya que todo esté más calmado.
-Bien, de hecho todo está bien, solo unos cuantos territorios, mi padre sabía hacer el trabajo, si tan solo, el hubiera sido diferente.
-No pienses en eso, estamos aquí para hacer un futuro para el verdadero Rey.
-Lo sé, vamos a descansar, mañana será otro día.
Ambos van a su habitación, los dos duermen juntos, algo no muy común entre los reyes.
-amor, que piensas de nuestros hijos.
-Me he estado cuidando con el té especial, solo que...
-Si lo sé, no funcionará siempre, mi amor, si te embarazas seré el más feliz, no te preocupes, yo te ayude en todo, tengo práctica con los mellizos.
-Ja, ja, ja, eran muy tranquilos
-No, mi madre sufrió durante un par de meses, eso son unos demonios con cara de ángel.
-no seas exagerado, nuestro hijo sera hermoso.
-Asi es, muy hermoso como su madre.
-Bueno en realidad se va a parecer a ti.
-Es por la magia, el segundo será una niña, ella era como tu.
Ambos platican sobre sus hijos, planean un futuro juntos.