Mi vida no ha sido fácil, desde pequeña me tocó trabajar para poder ayudar a mi mamá, a mi papá no lo conocí, mi madre siempre me dijo que el había muerto... mientras trabajaba también me dediqué a estudiar sabía que está era la única forma de poder salir adelante, las amigas de mi mamá me decían que solo los hijos de gente rica tenían futuro y que si yo quería surgir debía casarme con un millonario, ya que con mi belleza lograría lo que quisiera, pues yo no creo eso y se que con mi esfuerzo y trabajo pondré lograr salir adelante
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Capitulo XXIV
Punto de vista de Emma
Salí con Sara a comer en la calle fuimos a una cafetería muy pequeña, un lugar donde él magnate de los negocios Liam Miller no vendría ni por error y para mí mala suerte Liam llegó hasta donde estábamos nosotras y en ese preciso momento Sara me llamó mamá, Liam se veía confundido, pero se portó a la altura y no me hizo preguntas delante de la niña, yo quería salir corriendo de ese lugar, Sara tenía otra idea igual le agradezco a Liam que no me llevará la contraria, pero igualmente nos llevó a casa en el camino Sara se quedó dormida en el puesto de atrás y fue cuando empezó el interrogatorio.
Liam: es mi hija verdad?
Emma: no, ella es mi hija y de nadie más.
Liam: pues no eres la inmaculada concepción, así que alguien es el papá.
Emma: no és tu problema saí que no te metas.
Liam: que no es mi problema? Estás loca? Ella es mi hija.
Emma: si quieres creer eso muy tu problema es.
Liam: deja de jugar y habla de una mxxxxxx vez, como pudiste alejarme de mi hija, como pudiste hacerme algo así.
Emma: baja la voz, este no es el momento de hablar, mañana hablamos en la oficina, te parece?
Liam: ningún mañana, hoy mismo vamos a hablar, dejamos a la niña en tu casa y vamos a la mía a hablar.
Emma: claro que no, yo contigo no voy ni a la esquina.
Liam: pues eso lo veremos, no te voy a dar la oportunidad de escapar con mi hija.
Emma: vete al diablo, tú no me ordenas.
Liam: deja de ser tan infantil, esto lo arreglamos hoy y es mi última palabra y si no quieres que te secuestre más te vale venir conmigo por las buenas.
Llegamos a la casa y dejé a Sara en su cuarto, justo en ese momento llego María y al ver a Liam no supo que decir, se apartó y dejó que Liam me llevará con él, buena hermana eres que dejas que me secuestren.
Emma: Liam ya déjame yo voy contigo, suéltame me haces daño.
Liam: cuando lleguemos al auto te suelto.
Realmente Liam estaba lastimando mis manos él tenía mucha fuerza comparada con la mía, me acorraló en el carro y no tuve de otra que subirme al carro.
Él se subió del otro lado y arranco el carro, yo me quedé en silencio todo el camino, esto era un secuestro y apenas pudiera lo iba a denunciar. Llegamos a su apartamento, yo no quería entrar esto para mí era muy difícil, en ese apartamento me hizo el amor por última vez y luego me desecho cuál basura.
Liam: baja del auto.
Emma: obligarme.
Liam: con gusto.
Él portero no sabía que hacer pues obviamente él me reconoció y solo abrió la puerta para que esté troglodita me llevará arriba. Le grité al portero que llamara a la policía que me tenía secuestrada, pero Liam le ordenó que no hiciera nada que él sabía que élla era mi esposa y que por fin volvió. El inútil portero solo se echó a reír y no hizo nada. Llegamos a ese lugar que tantos malos recuerdos me traen.
Liam: bienvenida a tu casa.
Emma: está nunca fue mi casa no seas ridículo.
Liam: claro que sí lo fue.
Emma: deja de decir estupideces y déjame ir
Liam: eso solo pasará cuando me expliques porque no me dijiste de mi hija.
Emma: ahora sufres de amnesia, si mal no recuerdo usted fue el que me echo de su casa, así que ahora no vengas a hacerte la víctima.
Liam: si me hubieras dicho las cosas serían diferentes.
Emma: jajaja no me hagas reír, diferente para quien? Para ti? Porque igual me hubieras echado y de paso me hubieras quitado a mi hija.
Liam: nuestra hija y yo jamás te hubiera hecho algo así.
Emma: no seas hipócrita, sabes que lo hubieras hecho para irte después a casar con la señorita Miranda, tu y tu familia son unos bastardos nunca confiaría en ustedes, y menos a mi hija.
Liam: se que te hice daño y crees que es suficiente justificación para separarme de mi hija.
Emma: no solo por eso o es que acaso no recuerdas todo lo que tú linda madre me hizo o es que tan mala memoria tienes?
Liam: no se de qué hablas que te hizo mi madre?
Emma: ahora eres el pobre inocente sabes muy bien que ella mando a unos hombres a abusar de mi y que si no hubiese sido por el abuelo ahorita ni mi hija ni yo existiriamos o cada vez que me humilló en tu nombre, si claro no lo recuerdas.
Liam: Emma te juro que no se de qué hablas, yo no sabía nada de eso.
Emma: ya no importa si lo sabías a no, el daño ya está hecho y no hay vuelta atrás.
Liam: Emma perdóname, no quise lastimarte, por favor perdóname, una vez te dije que siempre te amaría y hasta el día de hoy lo he cumplido, sé que no tengo derecho a pedirte nada, pero quiero que me dejes compartir con Sara, ella es mi hija es nuestra hija y merecemos compartir como padre e hija.
Emma: y si resulta que ella no es lo suficiente para ti, la vas a desechar como hiciste conmigo...
Liam: yo no te deseche y lo que pasó, lo que hice, lo hice por ti.