LA NUEVA SOFÍA

Es 28 de julio de 2018, me están maquillando y siento que el reflejo en el espejo no es el mío, estoy sentada, pero me tiemblan las piernas; alguna vez me preparé para una ocasión como esta, pero las circunstancias eran diferentes, creí en ese entonces que iba a ser muy feliz, estaba completamente enamorada y lo único que quería era una vida junto al hombre que amaba; pues el final de esa historia fue un desastre, él me engañaba y al descubrirlo me asesinó.

Teniendo en cuenta que el matrimonio no era en todo el sentido de la palabra verdadero, Cristóbal y yo queríamos un matrimonio sencillo y privado; pero mi tío Alberto y don Rafael señalaron que era la unión de dos importantes familias tradicionales y que por ello debía ser una gran boda; más si tenemos en cuenta que Álvarez y Cía, habían sacado un comunicado, que el supuesto compromiso entre Fabián Álvarez y Sofía March que habían salido en las revistas era falso, que nuestra relación había terminado ya hacia tiempo, supongo que no quería quedar como el abandonado y debía guardar las apariencias; don Rafael Tudela sorprendido por ello, preguntó sobre mi relación con Fabián, pero Cristóbal le señaló que eso era una relación pasada que ya había terminado, y que si a él no le importaba porque tendría que estar preguntándome por ello; dejando zanjado el tema.

Cinco meses pasaron volando desde que salí de mi casa decepcionada completamente de mi padre, quien me había tratado como una cualquiera, después de obligarme a ir al departamento de Fabián para ofrecerme, felizmente por única ocasión en la vida, Fabián no se comportó como un total patán. A pesar de sentirnos algo incómodos con tanta seguridad alrededor de nosotros hemos podido desarrollar nuestras vidas con cierta normalidad.

Durante ese tiempo, Cristóbal haciendo uso del dinero que ha recibido por años como accionista de los hoteles de la familia Tudela y que él no ha utilizado nunca (el rubro de la hotelería fue lo que permitió que Rafael Tudela y la madre de Cristóbal se conocieran); ha contratado un grupo de guardaespaldas para todos; Lucía, Paulina y yo estamos viviendo en el departamento de Lucía, que se ha visto obligada a alterar su estilo de vida porque Cristóbal ha instalado un sistema de vigilancia muy especial en el departamento y edificio; ya que incluso han alquilado un departamento en el mismo edificio para que vivan Cristóbal e Ignacio, aunque es muy espacioso y cómodo solo tiene una habitación, mi primo no entendía porque había escogido uno así, hasta que le dijimos que nos íbamos a casar; debemos haber hecho una excelente actuación porque nuestros amigos no sospechan las verdaderas razones.

En ese tiempo, las cosas en la empresa “CRIGN Technology” han ido muy bien; el plan ambicioso ha resultado un éxito pese a todo; además he estado reuniéndome con mi tío Alberto, para conocer mejor lo concerniente a la herencia de mi abuela; además de conocer a algunos socios; gracias a los correos que recibí mientras estaba en shock de descubrir el engaño en mi anterior vida, ya sé quiénes son los que me van a traicionar, he ideado el plan para deshacerme de ellos apenas tome posesión de todo.

También he querido hablar con Andrea pero ella se ha negado completamente, necesito averiguar con qué mi padre la tiene amenazada para que actúe de esa manera; con quien sí he logrado contactarme es con Miguel, mi cuñado, quien también quisiera saber cómo ayudar a su esposa pero no ha logrado obtener la verdad; así que, nos pusimos de acuerdo con él, ya que el clima durante la primavera estuvo muy hermoso, para ir en un viaje por Catamarán y que la lleve sin advertirle que también estaré ahí, pero al descubrirlo buscó una excusa de que se había puesto mal y declinó con la idea, para luego retirarse, eso fue decepcionante pero ya estábamos ahí y los demás no querían perder el viaje.

Así, que abordamos el catamarán en Lloret de Mar y zarpamos, fue maravilloso nadar en el mar mediterráneo y divertirnos con actividades acuáticas, admirar el paisaje de la costa lleno de alcantarillados, cuevas y playas remotas; para terminar degustando una barbacoa a bordo del barco; durante ese tiempo me olvidé de todo y disfruté; los más divertidos eran Ignacio y Lucía, aunque pude notar que a Paulina también le gustó, pero tuvo un comportamiento más tranquilo y reservado; esa también fue la prueba de fuego para mostrarnos como una pareja muy enamorada, ciertamente fue muy confuso porque había momentos en que no podíamos diferenciar cuál de nuestras muestras de cariño eran falsas o verdaderas.

Ahora, un sábado de julio de 2018, estoy maquillada y peinada para mi boda con Cristóbal; el vestido es un regalo que me ha hecho la esposa de mi tío Alberto, creado por un famoso diseñador pese al corto tiempo; Lucía está contemplando mi vestido mientras me ayuda a arreglarme.

- "Tu tía realmente es exquisita, ha mandado hacer un vestido que transmite romance, sensualidad y vanguardia, la cantidad de pedrería lo hacen un lujo; pareces una princesa de cuento de hadas moderno, además que hace lucir tu espectacular figura", me dice Lucía mientras me mira emocionada, para continuar diciendo "Y tu primo Vincent ha diseñado esas joyas que combinan tan perfecto con el vestido y tus ojos azules", y me sonríe.

En eso ingresa Ignacio, se me queda mirando muy sorprendido, y luego de sonreír se acerca.

- "Sabes que Cristóbal te ha hecho un regalo que seguro te encantará", me dice emocionado.

- "¿Un regalo?, pregunto.

- "Sí, pero tienes que cerrar los ojos", me responde Ignacio sonriendo, yo solo cierro los ojos y me pregunto qué será.

- "¡Ábrelos!", manifiesta emocionado Ignacio.

Cuando abro mis ojos, tengo en frente a mi nana Mercedes, quiero llorar de la emoción, pero ella toma mis manos y me mira dulcemente.

- "No llores mi niña, estás muy linda, debes lucir como la reina que eres en un día tan importante como este”, me dice tan dulcemente.

- "No puedo creer que estés acá, mi nana hermosa”, le respondo con una emoción que no cabe en mi pecho.

- "Cristóbal consiguió que el señor Antonio Fuentes la ubicara, también se ha encargado de que pueda obtener la visa que corresponde con ayuda de Paulina, que cada vez se siente más segura de ejercer su profesión, sencillamente Cristóbal es genial, fue la mejor decisión de mi vida escogerlo como mi mejor amigo”, me dice con esa cara de enamorado que pone cuando habla de su querida Paulina.

- "Es tu único amigo Ignacio, y ya por eso es un héroe nacional, tú nunca creces y él te mantiene pisando tierra, sin que tenga las ganas de ahorcarte… como yo”, manifiesta Lucía con un tono bromista.

- "He hablado muy poco con tu novio, pero se nota que tiene un corazón maravilloso, tiene una alma brillante y gentil, ahora que puedo hablar, jamás me agradó el señor Fabián para ti mi niña, sentía que iba apagar tu luz”, me comenta mi nana y la abrazo.

Que pensarían todos si supieran las verdaderas razones por las que me caso con Cristóbal, escucho de todos decir lo maravilloso que es, y claro que sé perfectamente que es un gran hombre, por qué tengo tanto miedo de entregarle el corazón; y lo peor de todo es que lo siento más distante conforme se acercaba nuestro matrimonio; si pudiera librarme de los miedos, las dudas, los traumas, las heridas del pasado, sin duda lo escogería como mi compañero de vida.

Mi wedding planner ingresó al salón donde me encuentro, y me indica que ya debemos empezar. El padre de Cristóbal ha querido mostrar ante el mundo por fin a su hijo, y el matrimonio con alguien de la familia March era perfecto; así que todo ha sido escogido para que sea una boda de lujo, por eso estamos celebrándola en una finca de ocho hectáreas con elegantes jardines y versátiles salones; la decoración de cada espacio ha sido cuidadosamente diseñada para que luzca espectacular, con una cuidada iluminación que daba una sugestiva atmósfera; todo lo escogido era de lo mejor: el caterings, el espectáculo, la música; sabía perfectamente que Cristóbal odiaba todo eso, quizás por eso lo sentía tan distante, debe estar molesto con la situación, pese a ello continúa adelante con todo esto.

Había escogido especialmente esa fecha, porque sabía que en ese tiempo mi padre con mi hermano, tendrían una gira de negocios en diferentes países por un par de meses; al menos eso había sucedido en mi vida pasada, no quería que se enteraran del matrimonio por si hacían algo para detenerlo y evitar que reciba la herencia de la abuela; lamentablemente eso ha incluido a mi hermana Andrea, quien piensa que está viniendo a una boda de algún amigo de su esposo; Miguel ha tenido que ser mi cómplice. Aunque ya nada podían hacer, pues si ahora estamos realizando la boda, ya por la mañana nos casamos de manera oficial, legalmente ya soy la esposa de Cristóbal Tudela, teniendo como testigos a Ignacio y Lucía; decidimos hacerlo así, si por alguna razón pese a las precauciones tomadas algo lo arruine.

Pero la ceremonia de boda se está realizando en la noche para dar a conocer a todos nuestro matrimonio. La música empieza a sonar, el inmenso jardín que será el escenario del “Sí acepto” está hermoso; el oficial de boda ya está en su lugar y la música empieza a sonar; creí que Cristóbal iba a ingresar solo porque su madre es fallecida, pero está ingresando con su hermana, lo que me sorprende, cómo la habrá obligado don Rafael a hacerlo, luego ingresan Lucía y Paulina como mis damas de honor.

Mi tío Alberto me da su brazo para ingresar, lo miro y sonrío, ha cumplido ejemplarmente el papel de padre de la novia, y cuanto hubiese querido que realmente lo fuera. Cristóbal ya está esperándome adelante, luce extremadamente guapo, lo miro y me sonríe, inexplicablemente se me van los nervios y me digo a mí misma que piense que esta realmente es mi boda; y que el hombre que tengo al frente realmente se convertirá en mi esposo.

Cuando estamos él y yo, frente el uno del otro, el maestro de ceremonia nos presenta, y comenta la historia de amor, que mi wedding planer ha diseñado con especial detalle; se suponía que debía seguir un poema, pero había olvidado dárselo, pero me sorprende cuando dice que el novio ha escogido uno de Gustavo Adolfo Bécquer para la ocasión, y cuando empieza a decir “¿Qué es poesía?, dices mientras clavas en mi pupila tu pupila azul. ¡Qué es poesía!, ¿Y tú me lo preguntas? Poesía… eres tú…”; me sorprendo y siento latir mi corazón fuertemente, quedo mirando a Cristóbal, él me sonríe y una sensación cálida recorre mi cuerpo.

Todo lo que siguió a la ceremonia definitivamente parecía un cuento de hadas, parecíamos la pareja más enamorada del mundo, todo eso me confunde, cuál es la falsa, cuál es la realidad; entonces si yo estoy así, como estará Cristóbal me pregunto, él tenía razón la línea que separa ambas cosas es muy delgada; cuando debemos proceder al intercambio de anillos, nos quedamos mirando profundamente.

- "Yo, Cristóbal Tudela, te tomo a ti, Sofía March, como esposa y prometo serte fiel y cuidar de ti en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida”, me dice Cristóbal mientras me sonríe tiernamente.

- “Yo, Sofía March, te tomo a ti, Cristóbal Tudela, como esposo y prometo serte fiel y cuidar de ti en la riqueza y en la pobreza, en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida”, expreso con sinceridad, justo en ese momento, no quise que esto fuera una farsa, yo hice mi promesa con absoluta sinceridad, cuando sin darme cuenta una lágrima de felicidad cae por mi mejilla, puedo notar que él se sorprende mucho.

Luego, Miguel y Andrea se acercan con las arras, mi hermana me mira con ternura como pidiendo perdón por dejarme tan sola, es mi familia más cercana y me emociono que esté a mi lado, me susurra “tranquila, por favor se muy feliz”; se ponen al costado; el oficial de bodas toma la bandeja y pone las arras en manos de Cristóbal.

- "Sofía, recibe estas arras como signo de los bienes que vamos a compartir”, manifiesta Cristóbal, su mirada profunda me traspasa.

- "Cristóbal, recibe estas arras como signo de los bienes que vamos a compartir”, digo sonriendo.

Me digo a mi misma que me estoy casando con Cristóbal de verdad, yo hice esa promesa de verdad, yo quiero dejar de tener miedo; aunque en este momento él ni siquiera sabe lo que estoy sintiendo. Después de escuchar "Yo os declaro unidos en matrimonio. Enhorabuena, podéis besaros”, nosotros nos quedamos mirando, Cristóbal se acerca, yo levanto mi rostro y voy cerrando mis ojos, al sentir sus labios encima de los míos, fue un beso tierno, pero largo, como si todos los demás hubieran desaparecido; para luego volver en sí, sonreír y escuchar a los invitados aplaudirnos.

Cuando volvemos a recorrer el camino ya como marido y mujer, los pétalos de flores lanzados por los invitados acompañan nuestro caminar; estoy muy nerviosa, pero aprieto fuertemente la mano de Cristóbal; debo suponer que él también debe está nervioso, pero lo disimula mejor que yo; me pregunto cómo serán nuestras vidas después de hoy.