Tanya fue la villana de la novela que murió de manera trágica, pero ahora que Karla reencarno en ella, evitará ese destino tan terrible y vivirá una vida tranquila. ¿podrá lograrlo?
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capítulo 24- quedar mal
Después de eso incidente, muchas se reían a espaldas de Ania, dudando de si realmente en el pasado, Tanya le hizo daño o solo eran invenciones suyas para desprestigiar a la emperatriz, Ania escuchaba esos chismes, así que con su grupo de amistades, trataba de hacerse ver como una víctima, la cual fue engañada para hacerla ver como una mentirosa.
- pero yo confío en que la verdad saldrá a la luz, se que su majestad el emperador, es quien me cree y estoy bien con eso.
- nosotras creemos que la emperatriz esta celosa de usted, por eso busca hacerla quedar mal.
- si, usted es hermosa y se lleva bien con el emperador, mientras que ella, no tiene el cariño del emperador.
- cierto, el emperador se caso con ella, porque lo obligaron a contraer matrimonio con ella.
- gracias señoritas. Si, el emperador me ha dicho que me apoya, es un buen hombre, yo se que no dejará que me hagan daño.
Ania se muestra triste ante todas ellas, para que sientan pena por ella, pero, los que estaban presentes aquel día, siendo nobles mayores, muestran su desaprobación, pues mentía al decir que Tanya la agredió cuando en realidad, ella no estaba ahí. Tanya por su parte estaba en su estudio, feliz porque su plan ha ido bien, ahora es Ania quien estaba en la mira de los nobles por haber mentido ante una multitud de nobles, Alek que en ese momento estaba con ella, puede notar que esta de buen humor.
Al terminar con los pendientes, Alek sale del estudio, viendo como Ania ya había llegado al palacio, para ver a su padre, ambos caminaban por los pasillos, así que Alek se acerca a ambos saludando con amabilidad.
- majestad, es bueno verlo, mi hija dice que ha sido muy amable con ella, sobre todo en estos momentos.
- si, lamento lo que esta pasando, se que usted nunca haría nada malo, señorita Petrova.
Alek le sostiene la mano entre las suyas mientras la mira con preocupación, en la puerta del estudio, tanto Ania como su padre pueden ver que Tanya los observa y se notaba molesta, pero se da la vuelta y regresa al estudio, ambos hablan un momento con Alek y se retiran, ya están planeando algo más, deben deshacerse de Tanya pronto, así que Ania sabe lo que tiene que hacer. Un día mientras ella lleva una bandeja de té, al pasar cerca de Tanya, tira la bandeja sobre si misma y grita, en las salas donde suelen trabajar algunos nobles, estos salen, pero ven a Ania llorando, pero cuando ella dice que fue la emperatriz, no la ven por ningún lado, incluso Alek se acerca para ayudar a Tanya dándole una capa para cubrirse.
- majestad, fue la emperatriz quien me hizo daño...
- señorita, la emperatriz, no se encuentra en el palacio hoy.
- ¿eh? No, no es así, majestad dígalo, usted sabe que la emperatriz me tiene celos.
Todos miran confundidos, pero con algo de desaprobación al ver como Ania se aferra al brazo del emperador, uno de ellos se acerca.
- señorita Petrova ¿donde esta la emperatriz? Si dice que fue ella, no pudo desaparecer.
- b-bueno...yo...quizás...corrió...
- pero señorita, yo acabo de ver a la emperatriz volver...
Menciona una noble, ella explica que su carruaje llego al mismo tiempo que Tanya, quien venía a caballo, todos miran a Ania, quien se encoje de hombres, era imposible, ella misma vio a la emperatriz cruzarse con ella. Al levantar la vista, Alek la mira preocupado.
- c-creanme...yo la vi, ella me empujo...
- calumnias a la emperatriz, le puede costar la vida, señorita Petrova.
Menciona uno de los presentes, pronto ven llegar a Tanya, quien se muestra confundida al verlos reunidos en ese lugar.
- ¡oh! ¿Que pasa aquí? ¿Es una bienvenida sorpresa?
Ania aprieta las manos en la ropa de Alek, estaba furiosa y no entendía como esa mujer se había movido tan rápido como para hasta tener testigos de su regreso, incluso puede sentir las miradas de los presentes en contra de ella, el único que se muestra de su lado es Alek, pero, si él se pone en este momento en contra de Tanya, esa mujer podría echarlos a manos del palacio por infidelidad.
- señorita Petrova...veo que de nuevo busca mucho a mis esposo.
Ania le suelta de inmediato, pues tiene las miradas puestas en ella, lo que le hace sentirse enojada, por esas miradas.
- yo...él solo me ayudo a levantarse.
- que amable, pero tenga cuidado, las cosas se pueden mal interpretar no querrá tener la fama de amante ¿verdad?
Se puede escuchar los murmullos, por lo que Ania se retira rápidamente, mientras que Tanya saluda a todos, incluso los invita para quedarse a cenar. Para los siguientes días, el incidente nuevamente estaba en boca de todos, como siempre, Ania era la que quedaba mal, al acusar a la emperatriz de dañarla, cuando Tanya nisiquiera estaba cerca de ella, incluso las que eran cercanas a Ania comenzaban a dudar de ella, Petrov tampoco estaba bien, pues debido a ese incidente, escucha burlas sobre eso.
- ¿viste la cara de Ania? Fue tan genial verla así.
Tanya estaba recostada sobre el pecho de Alek, mientras el chico juega con un mechón del cabello de la chica.
- solo esta obteniendo lo que merece, ella te hizo pasar por esas mismas humillaciones.
- si, yo se lo devolveré con creces, ella y su padre caerán.
- lo harán, eres más ingeniosa que ellos.
Alek la abraza, girando para quedar encima de Tanya, ella le abraza por el cuello, para después unir sus labios en un apasionante beso, mientras Alek aparta las sábanas dejando ver sus cuerpos desnudos, como siempre, planean aprovechar la noche.