Las gorditas no tenemos derecho a enamorarse.
NovelToon tiene autorización de Paola Andrea para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capítulo 23
Después de unos Segundo mirándome fijamente, se retira y dice — se que has estado trabajando en el bufete de Rodrigo Jaimes… abro los ojos y le digo — cómo lo sabe?… se sienta en mi cama y reponde — Mariana, pensé que ya habías entendido que no puedes hacer nada que yo no me entere… me congele, no sabía que responder, Justo cuando iba hablar, vi que Miguel estaba mirando fijamente mi bolso, el que había lanzado al piso, cuando me doy cuenta que se veía la prueba, lo miro y corro hacia donde está para tratar de ocultarla, pero él me detiene y la levanta, la ve y dice — Mariana estás embarazada?… lo miro con mucho miedo y lo primero que le digo es — no, claro que no, es de una compañera del trabajo… siento que no me creyó porque dijo — ok, mañana iremos con tu ginecólogo… con temor le digo — no es necesario, porque estoy bien y no estoy embarazada… se acerca toma mi rostro en sus manos y dice — bueno, pero quiero escucharlo de un profesional… deja la prueba de embrazo sobre la mesa de noche y sale.
Cuando cierra la puerta, mi cuerpo se desploma en el piso de rodillas haciendo que mi llanto sea incontrolable, me tomo del vientre y digo — bebé no quiero que tú papá nos separe, él no puede saber que vienes en camino… tomo fuerzas, me dirijo al baño, me ducho y me acuesto a dormir.
Al día siguiente, hago mi rutina normal, no pude dormir pensando en cómo logro escaparme de Miguel y creo que hablaré con Mary, es en la única que puedo confiar ahora.
Bajo a la cocina como todos los días, Rosita me saluda con nostalgia y me dice — buenos días, cómo amanece señora?… debo tener esos ojos hinchados de tanto llorar, aunque ese debería ser mi estado normal; la miro con una sonrisa y le digo — Rosita buenos días, todo bien, gracias por preguntar… una vez termino de desayunar, Rosita dice — señora el señor, dejo dicho que pasará por usted a medio día por el bufete… suspiro y digo — gracias Rosita… ella me empaca una ensalada de fruta y dice — que le vaya muy bien señora… la abrazo y le digo — muchas gracias… salgo de la casa y empiezo mi camino de todos los días.
No puedo evitar que Miguel se entere del embarazo, pero si puedo irme antes de que mi bebé nazca, eso lo firmo, no permitiré que él obtenga lo que quiere a costa de mi sufrimiento y el de mi bebé.
Cando llegó a la oficina, le digo Mary que si me regala un tiempo para hablar, ella asienta y dice que en una hora sube a mi oficina.
Arreglo los documentos que mi jefe necesita llevar al juzgado, una vez él se va Mary sube y dice — en que puedo ayudarte Mariana… le cuento todo lo que paso con mi vida hasta hoy, claro que omito muchos detalles, cómo el nombre y la posición de mi esposo; después le pido ayuda para irme de la ciudad.
Ella no logra disimular la sorpresa de mi historia, porque sus lágrimas caen sin control, la tomo de la mano y le digo — Mary gracias por escucharme y guardar mi secreto, necesito que me prestes dinero por favor, de alguna manera te pagaré… ella se limpia las lágrimas y dice —te espero a las 7 pm en mi casa, por mensaje te dejaré mis datos, ahí planearemos todo… la abrazo tan fuerte que por una vez en la vida puedo dejar mi carga por un tiempo y descansar.