La Bruja Y El Príncipe.

Estando de regreso en Silver, William se reunió de inmediato con su padre, para hacerle saber que Alexa le había otorgado el divorcio, por supuesto, el Rey estaba encantado, aunque no por mucho, ya que William le hizo saber que deseaba volver al Imperio y permanecer a lado de la reina.

- William, hijo, caso tú ¿te has enamorado de esa mujer? No es conveniente, es una mujer cruel...

- no lo se padre, solo se que deseo estar a su lado, conocer más de ella.

- oh! Hijo, pero tu eres mi heredero, no podré dejar Silver en tus manos.

- padre, cualquiera de mis hermanos es digno del trono. Déjame ir de regreso, estaré bien.

- lo pensaré, aunque, te conozco y aunque diga que no, se que te irás, por lo menos, quédate unos días más , hazlo por tu madre.

- claro que si padre, no se preocupe.

Dicho esto, paso a retirarse, ya que su padre tiene asuntos importantes que atender; camino a su alcoba, se desvió para ir a ver a su madre, espera que ya este mucho mejor que la última vez.

Por otro lado, Alexa seguía cumpliendo con sus deberes, aunque mantenía vigilado el país, por si el rey del Oriente planea algo, no quiere que le tome por sorpresa.

Ya había pasado cuatro días desde que William se fue y era extraño comer sola, aun así esta segura que tomo la decisión correcta.

Así, paso casi un mes, William se la pasaba entrenando, pero aun así, seguía cuidando de su madre, finalmente ya ha llegado la hora de partir, ha pasado mucho y no quiere que Alexa piense que finalmente la abandonó; su carruaje ya estaba listo para llevarlo de vuelta al Imperio, su padre para dejarlo ir, le obligo a llevar con él, algunos guardias, aun cuando el Imperio no queda muy lejos, quiere que su hijo vaya seguro.

- príncipe ¿esta seguro de esto? Sigo pensando que es mejor que se quede.

- Carol, ya tomé esta decisión, por favor, te encargó cuidar bien de mi madre.

- lo haré, si ve que la situación es difícil no dude en regresar.

Carol aun se preocupa porque William regrese con la bruja escarlata, no se sabe si lo recibirá de nuevo en su castillo o lo echara sin la más mínima compasión y como William suele ser insistente, la podría hacer enojar. Se subió al carruaje ya empezando su regreso al Imperio, como han partido desde temprano, si avanzan rápido y solo descansan un poco en la noche, llegarán al día siguiente por la mañana.

En el Imperio, Alexa tenía noticias del Oriente, al parecer el Rey se había aliado con el país de Granate, algo que no era muy conveniente, pues sabe que sus motivos eran la venganza y como el rey de Granate ha querido gobernar el Imperio durante un largo tiempo, debe estar aprovechando la oportunidad; por ello, Alexa ya mando organizar a su ejército, quienes estaban lejos cuidando de los pueblos cercanos a las fronteras, fueron llamados para volver, claro que dejando a algunos soldados para cuidar, el Imperio ya estaba nervioso por una posible guerra, pero Alexa planea evitar que esa guerra llegue a su ciudad, por eso, su ejército se establecerá lejos, para evitar que el enemigo avance, de ese modo, evitarán que las personas inocentes sufran.

- ¿como va todo Walter?

- su ejército ya se ha organizado en diferentes puntos del Imperio, los pueblos cercanos a las fronteras fueron desalojados y llevados a lugares seguros.

- bien, no podemos dejar que el enemigo avance, ese par de reyes, creen que se les hará fácil.

- siento pena por ellos, conocerán el porqué es llamada la bruja escarlata.

- exacto Walter.

- luce feliz alteza.

- es porque finalmente puedo usar de nuevo, todo mi potencial.

- un año alteza, hasta ahora solo ha peleado con bandidos de bajo nivel. Iré a preparar sus armas y su traje, la reina debe lucir espléndida en la batalla.

- gracias Walter.

El mayordomo hizo una reverencia y salió del estudio, tal como dijo, irá a preparar todo lo que la reina usará en batalla, después de un año, finalmente podrá verla de nuevo en acción.

Ya en la madrugada, William empezó de nuevo su viaje, después de haber descansado un poco, su carruaje avanzaba cuando de pronto uno de sus escoltas le avisa que a lo lejos alguien parecía venir a toda prisa, William bajo del carruaje y subió al caballo extra que han llevado, también tenía su espada en la cintura por si era un enemigo; a medida que se acercaba, William fue notando que era una chica a caballo y que tras ella venía un grupo de hombres, cuando estuvo un poco más cerca notó que esa chica era la princesa Lilian, lucia algo sucia y el vestido roto, también se podía ver que estaba asustada y huyendo de los hombres que van tras ella, William avanza en su dirección junto con sus guardias.

- príncipe William.

La chica se sintió aliviado de ver a un conocido.

- ve al carruaje.

Señaló, la chica avanzó rápidamente dejándole atrás para ir donde se le indicó, los hombres llegaron hasta William pero este y los guardias lucharon contra ellos; era pocos así que no fue difícil derribarlos, gracias a los arqueros que iban con él.

- príncipe, estos hombres, sus armaduras, son soldados del Oriente.

- ¿que? No tiene sentido, esa chica es la princesa.

- también podrían ser impostores.

- puede ser, ella debe saber.

Regresan donde el carruaje y la chica ya ha bajado del caballo, pero aun sigue asustada.

- gr-gracias príncipe William, yo, quería ir al Imperio...por favor, ayúdeme.

- ¿que paso? ¿Esos hombres tenían el uniforme de los soldados de tu padre.

- mi padre esta muerto, el rey Julius lo asesino y tomo el mando, apenas pude escapar...

- ¿que? Pero, bien, creo que es mejor que vayamos con la reina Alexa.

- si, por favor, necesito verla, ella debe saber todo. Mi hermano Adam, el heredero, huyo también pero nos separamos, quiero que me ayuden a encontrarlo.

- tranquilo, primero debemos llevarte a descansar y

William ya pudo seguir pues la chica se desmayó, William rápidamente la cargo para subirla al carruaje e indicó que se dieran prisa para llegar al Imperio.