Ahora Yo Seré La Villana.

Los días van pasando, el entrenamiento de Saya va mejorando, ahora su cuerpo ya no esta tan flácido, su fuerza va en aumento así como su destreza con la espada y otras armas, por otra parte, Aya fue enviada de regreso a la mansión para que pudiera recuperarse de sus heridas, pero el príncipe se negó a irse, no iba a dejar a su esposa en un lugar lleno de hombros, para que después se extiendan rumores mal intencionados, pero lejos de estar preocupado por la reputación de la princesa, está más preocupado por la suya.

Como ya se le había costumbre, esperaba que la princesa regresará de su entrenamiento para hacerle compañía durante su hora de merienda, Saya no estaba muy a gusto, así que hacía que los hermanos Izumi también los acompañaran.

- esposa, a veces me gustaría comer contigo a solas.

- alteza, ellos son mis entrenadores personales e hijos del general, les tengo apreció, así que, prefiero que ellos me hagan compañía.

Claramente eso era eso insinuaba que prefería que sea el príncipe quien se fuera, el príncipe lo entendía a la perfección, pero no esta en sus planes rendirse con facilidad.

- entiendo. Entonces, la visitaré su habitación en la noche.

Sonríe orgulloso, presumiendo que es él quien esta casado con la princesa, esta claro que el príncipe tiene una idea muy equivocada de las intenciones de los hermanos Izumi.

Saya hasta dejo caer su cubierto por lo dicho, pero frunce el ceño.

- de ninguna manera, soy una mujer decente, no pienso recibirlo en mi habitación y menos a solas.

- princesa Saya, muestre respeto, es su deber como esposa.

- si no aprovecho, cuando yo estaba cegada por usted, es su problema, ahora no quiero nada de usted, alteza, menos que me visite en mi habitación.

Le ha arruinado el apetito, al igual que a los hermanos Izumi, Saya se puso de pié, junto a ellos.

- hermana Saya, nosotros nos retiramos.

- vayan bien hermanos y gracias por su compañía.

Se inclino ante ellos, al igual que estos, le hicieron una reverencia para después retirarse.

- alteza, no se moleste en ir a mi habitación en la noche, porque no pienso recibirlo.

Dicho esto, se apresuro a alejarse de ahí, tiene que evitar a toda costa que ese hombre se le acerque, porque si intenta algo, es seguro que lo mata.

- princesa! No puede negarme mis derechos de esposo! Princesa!

Ahí se quedó gritando, golpea el puño en la mesa, no piense esa mujer que esto se quedará así, de una u otra manera, ella es suya y puede hacerle lo que quiera, sin duda, un pensamiento tan estúpido, creyéndose dueño de su esposa. Como quiere evitar al príncipe a toda costa, pidió de favor a Kaede que aparta de Lili, ella también se quedará a dormir en su habitación, la mujer se sorprendió, pero no se negó, ya que desde que llego, la princesa ha sido una persona amable con ella y el resto de las sirvientas; aunque si el príncipe se insiste, ella y Lili no serán de mucho ayuda; llegada la noche, se preparo para dormir, Lili y Kaede ya se habían ido a dormir, desde antes, así que para no molestarlas en su descanso, también se dispone dormir, pero justo cuando estaba por subirse a la cama, un ruido se escucha en la puerta, parece que intentaron abrir, ya podía suponer quien era, así que solo se paro cerca y coloco un mueble para bloquearla mejor.

- alteza, le dije claramente, que no dormiré con usted, perdió ese derecho hace mucho tiempo, yo no estoy dispuesta a tomar a ser sustituta de su amante mientras ella no esta.

- no puedes negarte, no me obligues a entrar por la fuerza.

- si hace eso, mi espada ya ha sido afilada esta mañana, espero sepa que no me importa si soy acusada de asesinar un príncipe, al menos mi habré defendido mi honor.

- ¿honor? ¿Tú? Juro que...

No, no, debe calmarse, no puede seguir peleando con ella, respira hondo para tranquilizarse.

- esta bien, no haré nada, a menos que tú lo permitas. Buenas noches, princesa Saya.

Por fin, al menos no se puso de necio y arrogante.

- descanse alteza.

Pero por si acaso, dejará la mesa para bloquear la puerta y al subir a su cama, coloco su espada bajo la almohada, solo espera poder descansar sin inconvenientes, ya no sabe ni que planea ese príncipe, lleva días intentando ser amable, lo que no significa nada bueno.

((aquí la autora, ya estos capítulos son como más relleno, pero necesarios jajajajaja

bueno, solo les puedo decir, ya pronto vendrá lo bueno y quizás llegue ese destinado para nuestra Saya🤭 por lo pronto, primero hay que darle una buena lección al príncipe, para que vea, que no puede recuperar a alguien, a quien le ha hecho mucho daño.

esperen pronto un nuevo capítulo y espero sus comentarios, me agradaría saber sus opiniones y sugerencias. siendo la hora que es por aquí. buenas noches))