César: Buscando Mi Felicidad

Han pasado dos semanas y Sofía decidió que su amiga julieta se quedaría en la casa durante sus vacaciones en la ciudad, así que paso menos tiempo con ella, realmente me tiene abandonado, todo el día esta acompañada de su amiga, así que decidí ir a la oficina a distraerme porque hasta los pequeños pasan todo el día junto a ellas y ni caso me hacen, deje instrucciones con Gael y salgo de la casa.

Al salir me encontré con celeste que no la veía desde hace días y viene muy cambiada, no dije nada, pero le pregunte si se encontraba bien y ella por supuesto dijo que si

—Estos días no tengo nada que hacer, que tal si te acompaño, mi hermano no ha regresado porque tiene mucho trabajo así que por eso vine, pero escuche que sofía tiene visita así que mejor te acompaño a ti que dices hermano—pregunto sonriendo

—Bien vamos, igual a mi también me olvidaron—dije dramáticamente

—Le diré a sofía que te quejas de su visita—dijo burlonamente

—Bien olvídalo, vamos si no te dejo—dije caminando al coche

—Oye no seas malo hermano—dijo celeste corriendo a abrazarme

Sin percatarse alguien observo como jugueteaban entre ellos y le molesto como no tenían consideración a sofía.

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Al llegar nos encontramos con mi suegro, alexis y fernando, ya tenía la información de quien había adquirido la empresa de mi suegro así que le daría la información y lo ayudaría a recuperarla, celeste me acompañó y saludo cordialmente a todos.

Me di cuenta de que alexis aunque tratara de disimularlo no dejaba de verla, y celeste bueno ella simplemente lo ignoró, algo que todos notamos, pero no dijimos nada, entramos a la oficina y nos sentamos, alexis se iba a sentar junto a celeste, pero ella de inmediato se levantó

—Abuelo fer te extrañé—dijo sentándose a su lado

—Pequeña bribona me extrañaste a mi o extrañaste ganarme dinero en las cartas—dijo bromeando

— abuelo yo no tengo la culpa de ser tan inteligente—dijo orgullosamente

Rápidamente el ambiente se calmó y comenzamos a hablar temas del trabajo hasta que toco hablar del tema importante para el que nos reunimos.

—Bueno tardamos mucho en investigar quien fue la persona que compro la empresa Brown y descubrimos que fue un extranjero que planeaba poner su negocio en esta ciudad, pero hasta el momento no hizo movimiento alguno, nos dimos a la tarea de contactarnos con él y hablar de una posible compra de la empresa, por el momento se encuentra de vacaciones, pero dijo que en cuanto regresara podemos reunirnos y hablar de una solución—dije seriamente

—Pero yo no tengo el capital para poder recuperar la empresa—dijo mi suegro algo preocupado

—No debes preocuparte por eso hermano, yo te apoyaré económicamente y en cuanto te recuperes me puedes regresar la inversión—dijo rápidamente fernanado

—Asi es suegro, lo que debe preocuparle es como hacer para poder levantar la empresa nuevamente—dije dándole los documentos que junte de la persona que la compro

Después de eso todos regresaron a sus labores mientras celeste se quedó conmigo contándome como le iba con sus estudios y sus nuevos amigos.

—mmm hermano césar, me das permiso de llevar a un amigo a cenar a tu casa—pregunto tímidamente frente a alexis

—em bueno no tengo ningun problema y no creo que a sofía le moleste—dije algo incomodo por la reacción de alexis quien al escuchar lo que dijo celeste salio de la oficina algo alterado

—Muchas gracias hermano césar, entonces le puedo decir que venga a la oficina y lo llevamos

—Claro llámalo y dale la ubicación, que te avise cuando llegue para dejarlo pasar

Seguí concentrado en mi trabajo, hasta que celeste dijo que su amigo había llegado, antes de que pudiera decir algo alexis llego diciendo que alguien buscaba a celeste, le pedí que lo escoltara hasta mi oficina y él salió a hacer lo que pedí.

Regreso con un chico pelirrojo alegre y en sus manos traía un ramo de flores, celeste nos presentó y después de las presentaciones decidimos irnos ya.

Alexis nos llevó a la casa y todos íbamos en silencio hasta que fernando rompió la atmósfera

—Y dime muchacho como te llamas

—Disculpen por no presentarme, me llamo Andres Farrel

—Oh estás relacionado con Charlie Farrel de la Farmacéutica Farrel—pregunto mi suegro

—Así es, él es mi padre—dijo sonriendo

—Si abuelo fer, andres esta estudiando para ser médico como mi hermano—dijo celeste

—Eso es bueno, solo espero que trates bien a la pequeña celeste es una buena chica—contesto fernando

—Créanme que tengo las mejores intenciones con celeste

Después de esa corta plática llegamos a la casa, donde sofía ya nos esperaba, me baje del coche y cuando quise acercarme a mi esposa llego julieta a abrazarla no me dio tiempo de acercarme a ella y sin que nadie viera, julieta me sonrió burlonamente, realmente empezaba a molestarme su actitud, no dije nada y entre a la casa sin saludar a mi esposa que ni cuenta se dio de mi presencia.

Entre a la sala y le pedí a Gael que preparara todo para la cena y ordenara las habitaciones y una más en caso de que el amigo de celeste se quedara a dormir, le pedí que llevara mi cena al despacho. Aún tenía trabajo que hacer y aprovecharía para terminarlo.

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—Julieta deberías dejar de molestar a césar no te ha hecho nada—dijo mi padre

—Tío el trató mal a Sofía durante un tiempo y es lo que se merece—dijo orgullosamente

—Pero a ti no te corresponde meterte en la relación de sofía y césar—dijo celeste algo molesta—Sofía deberías pensar en como se siente césar últimamente, esta abrumado y no le prestas atención, se por lo que pasaste y no se lo deseo a nadie, pero también veo como esta césar y deberías pensar un poco más en él—dijo seriamente

—Niña no deberías decir esas cosas, él se merece este trato por como trato a sofía, tú no sabes nada de esto aún eres una niña—dijo julieta

—Tal vez tengas razón en decir que yo no se por lo que paso sofía, pero tú tampoco lo sabes y no tienes derecho en juzgar a los demás y menos tratar de separarlos

—Bueno y tú quien eres para meterte donde no te llaman o es que acaso eres una de sus amantes—grito julieta

—¡JULIETA!—grito mi padre

Todos nos quedamos estupefactos por lo que dijo julieta, sabía que se estaba pasando con lo dicho, pero en el fondo lo dude por una fracción de segundo, pero rápidamente me dije que no era verdad y cuando iba a intervenir alguien paso rápidamente y cuando menos pensamos celeste ya estaba encima de julieta, la tiro al piso y la abofeteo.

—Eres una vieja de mente retorcida, es como mi hermano como puedes decir semejante estupidez—dijo aún sobre ella

—¡Basta quítate de encima loca!

Celeste seguía sobre julieta jalándole el cabello o abofeteándola, les pedí que las separaran, pero por reflejo julieta le lanzó algo que tenía a la mano y solo se escuchó el grito de celeste, cuando quisimos tomar a celeste para examinarla llego césar y en cuanto vio a celeste en el suelo con sangre en sus manos corrió hasta ella y la cargo

—Señor yo puedo darle primeros auxilios—dijo andres

—Acompáñame a la habitación, Gael ordena que recojan todo

—Si señor

—Sofí ten cuidado donde pisas puedes lastimarte, atenderé a celeste y luego paso a buscarte—dijo viéndome con preocupación

—Si ve, te alcanzo más tarde—dije mientras él asentía y se iba

—Alexis por favor llama a un médico para que revisen a julieta, y haz que alguien llame a eduardo y venga a la casa—dije preocupada, realmente julieta hizo un problema grande

—Claro—dijo algo molesto, sabía que le interesaba celeste, pero por ser mayor que ella se mantiene al margen y toda esta situación lo dejo preocupado

—Sofí yo no quería herirla así yo solo le aventé algo y no me di cuenta de que era un trozo de un plato de vidrio—dijo julieta llorando

Mi padre llevó a los niños algo asustados a la habitación y Fernando fue con ellos, yo me quede esperando a que revisaran a julieta para poder ir a ver a celeste, cuando terminaron de revisarla le pedí a gael que la acompañara a su habitación en lo que yo iba a la habitación de celeste.

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—Hermano me duele—decía celeste llorando

—No toques, deja que andres limpie la herida—dije pacientemente sosteniendo sus manos, a pesar de estar en otra época no podía evitar preocuparme por la que alguna vez fue mi hermana de sangre.

—Si celeste ya casi termino, necesitarás unas puntadas, pero de eso se encargaría el médico que vendrá—dijo limpiando la herida

—Andres eso quiere decir que me quedará una cicatriz—dijo algo preocupada

—Tranquila es muy mínima no se notará

—Gracias por ayudar andres, puedes ir a una habitación a descansar

—Disculpe quisiera quedarme hasta que celeste este bien

—Les que dices tú—le pregunte

—No tengo ningún problema

—Bien esperemos a que venga el médico, por mientras tranquilízate y no toques tu frente

—Hermano césar esa mujer dijo que yo era una de tus amantes, estaba hablando de ti como si supiera quien eres, yo no podía quedarme sin hacer nada—explico celeste

—Les no es necesario que me expliques las cosas te creo, tu no mentirias y harías algo como golpear a la gente solo por que si, así que cálmate—dije frotando su cabello

—Pero hermano no quiero que sofía piense que es verdad, vi dudas en sus ojos no quiero que piense que me gustas o somos algo, yo te quiero como a mi hermano tu sabes cuáles son mis sentimientos—dijo llorando sin percatarse que el pelirrojo la veía curioso por saber a que sentimientos se refería

—No te preocupes, se lo explicaré a sofía y si desconfía debe de ver la realidad y saber que solo te veo como una hermana, saldré a buscar al médico, quédate tranquila ahora regreso—dije saliendo de la habitación

No podía creer lo que estaba sucediendo, me sentía frustrado todo se estaba complicando con la llegada de esa mujer, salgo de mis pensamientos cuando escucho a sofía hablarme

—Como se encuentra celeste—dijo preocupada

—Necesitará puntadas, iba en busca del médico—dije suspirando

—Hice que llamaran a eduardo debe de estar por llegar

—Bien gracias por eso, vamos a la habitación debemos hablar—dije caminando

—No esperarás a eduardo

—Él ya conoce el camino, en cuanto terminemos de hablar regresaré—dije entrando a la habitación

Al entrar a la habitación examine a sofía para ver que no estuviera herida, al terminar la ayude a sentarse y me senté frente a ella.

—Sofí he intentado demostrarte que he cambiado, he hecho hasta lo imposible por enmendar mis errores pasados, con la llegada de tu amiga te alejaste de mi más no te lo reproche porque se que no puedes salir mucho debido a tu estado, celeste es como la hermana que no tuve y la quiero como tal, pero déjame preguntarte algo, ¿Dudaste? Aunque fuese muy mínimo quiero saber si dudaste de mi relación con ella—pregunte algo afligido

—Y...yo ss...si dude unos segundos—dijo llorando

—Entiendo, en cuanto termine todo este asunto haré un viaje, no te preocupes por nada, no estarás sola—dije levantándome para salir de la habitación

—Nn...no te vayas no mm...me dejes, yo n..no quise dudar, pero lo hice y lo lamento—dijo llorando mientras se aferraba a mi

—Sofía no llores le hará mal a nuestros hijos, debo viajar por asuntos de trabajo, pero regresaré antes de que nazcan, tendrás todo lo necesario para que no salgas y te quedes tranquila en casa, cuando todo se calme hablaremos nuevamente de nuestra situación, debo regresar con celeste ella te quería ver, es tu decisión si vas a verla o no—dije saliendo de la habitación.

—Como esta mi hija—pregunto mi suegro con preocupación

—Se encuentra bien—dije suspirando

—Eso es bueno, eduardo ya llego y esta suturando la herida.

—Entiendo, iré a verlos

—Claro, césar lamento lo sucedido, julieta a veces puede ser muy orgullosa, pero nunca lastimaría a alguien con intención, en ese momento ella agarró lo que tenía a la mano y lo lanzó a celeste y como resultado ambas salieron heridas

—Suegro la verdad es que no quisiera seguir hablando de eso, toda esta situación es abrumadora y más si sofía dudó de mi relación con celeste, ustedes conocen a les, ella es una niña aún y es la hermana de mi mejor amigo jamás me fijaría en ella, pero que llegue la mejor amiga de sofía y diga que yo tengo algo que ver con esa niña sobrepaso mis límites, así que saldré de viaje por trabajo usted tiene toda la información por si sofía duda que este en un viaje de negocios, me retiro—dije con pesadez

Al estar frente a la habitación de les suspire y entre, eduardo estaba terminando de guardar sus cosas, me acerque para preguntar como se encontraba les

—Como se encuentra

—Está bien, fueron unos cuantos puntos, nada grave y no quedará cicatriz, solo una pequeña mancha tenue

—Perdón por no cuidar bien de ella—dije sinceramente

—Ella ya me explico lo sucedido, no tienes por qué disculparte no fue tu culpa y si necesitas hablar cuenta conmigo—dijo tocando mi hombro

—Gracias, les saldré de viaje, tú decides si te quieres quedar aquí o regresar con tu hermano, lamento toda esta situación

—Lo mejor será que regrese con mi hermano a casa

—Bien, hoy nos quedaremos y mañana cada quien toma su camino, andres hice que preparara una habitación para ti, en cuanto digas puedes ir

—Gracias—agradeció el chico

—De nada, iré a descansar—dije saliendo de la habitación

Camine rumbo a la tercer planta y me encontré con mi nana quien al verme se acercó y me abrazó

—Mi niño se que has cambiado, no te sientas triste por lo que dijeron y si la niña sofía dudó no te desanimes trata de comprenderla, la hiciste pasar por mucho

—Gracias por estar siempre cuando te necesito nana, por favor prepara una maleta ligera, saldré de viaje mañana por la mañana

—Si mi niño

Entre a una habitación de invitados y me di un baño, realmente me sentía muy cansado que al salir y acostarme me quede dormido profundamente.