La Luna Indomable Del Alfa

El guapo hombre, cuando terminó de bañarse, se regresa a la habitación y allí toma el traje que ya le preparó su nana.

Luego, salió de la habitación y dio orden de que reuniera a todos los empleados que trabajaban dentro del palacio.

No pasó mucho para que eso pasara, y los empleados estaban asustados, pues Luciano era un hombre en verdad aterrador, cuando así lo deseaba.

—Bien, no voy a preguntar dos veces: ¿Quién de ustedes puso ese afrodisíaco en mi cena? Si lo declara, prometo perdonar su vida— dice el hombre de una manera amenazante.

Todos los empleados estaban temblando de miedo, y algunos estaban llorando. Nadie tenía conocimiento sobre nada, pues ninguno allí es tan valiente para ejecutar un plan así de suicida.

La jefa de cocina, quien es una mujer ya mayor, dice como defensa de sus compañeros.

—Señor, pido permiso para hablar — dice ella haciendo una reverencia.

—Habla— responde este de mala manera, está de mal humor.

—El día que pasó aquel inconveniente, yo estaba pendiente de todo en la cocina, y los ingredientes a usar, yo fui quien los autorice, allí no había nada raro, lo que significa, que los encargados de servir la cena, son los responsables — dice la mujer temblando como una hoja seca.

Los encargados de servir la cena, empezaron a llorar fuerte, y todos pasaron a delante y se inclinaron en su rostro.

—Señor, nosotros esa noche no servimos su cena, perdone nuestras vidas— dice el líder de esos hombres.

Luciano, al escuchar semejante cosa tan ridícula, tomó a ese por la ropa y lo estrelló en el piso con furia.

—Tu inútil, no se supone que ese es tu trabajo. Si no puedes cumplir algo tan simple como eso, será mejor que mueras aquí mismo— dice él, y comienza a estrangular a aquel sirviente inútil.

Unos de ellos antes que maten a su compañero, hablan.

—Amo perdoné nuestras vidas, la señorita Sonia vino a nosotros y no pidió de favor servir ella la cena en nuestro lugar, es todo lo que sabemos — dice una doncella en defensa de aquel a quien estrangularon.

Luciano al escuchar el nombre de aquella mujer, sintió una más enojo que antes, y para no matar a ese empleado, se quitó de encima de él, y lo lanzó lejos de su vista, luego, él mandó a los demás encargados de la cena, fuera de su palacio y le mandó a dar unos 20 azotes a cada uno, por poner en peligro su vida, y los sustituyó por otros.

—Quien de ustedes no haga su trabajo, perderá la cabeza, ahora fuera de mi vista— dice él y los empleados salieron corriendo. Esa noche un total de diez personas se quedaron sin empleo, ahí estaban las amigas de Sonia.

—Tú, manda a buscar a la nana y ocúpate de revisar todos los alimentos y bebidas del palacio, revisa hasta el papal higiénico que usan todos— dice él y se va a la sala de espera, sin esperar una palabra de boca de su hombre de confianza.

No pasó mucho tiempo, y ya la nana estaba en presencia de Luciano y el hombre de confianza de este, estaba haciendo lo que se le ordenó.

—Nana, eres la persona más cercana a mí, y te tengo mucho cariño, eres para mí como una madre, pero me gustaría que impidiera que tu hija llegara a mi presencia, Sonia es el ser más despreciable que he visto en mi vida, estoy seguro de que ella tuvo que ver con lo que me pasó, no es normal, que el día que ella me sirvió la cena, pasará semejante cosa— dice el hombre con un semblante aterrador.

—Hijo, sé que Sonia es un poco terca, pero no la creo capaz de hacer algo como eso, ella desde niña te ha amado y no creo que intente hacerte daño— dice la mujer apenada.

—¿Qué tal si su plan era solo llegar a mi cama y le salió el tiro por la culata? — pregunta Luciano un poco irritado.

La mujer se quedó sin palabras, pues su niño tenía razón, pero ella como madre de Sonia, no puede creer que su hija tenga semejante comportamiento tan inmoral.

—No tenemos prueba de que fue Sonia quien hizo esa atrocidad, no pienso que ella sea ese tipo de persona — afirma la nana con seriedad.

—Bien nana, haremos de cuenta que algo como lo que pasó no fue culpa de nadie, estoy seguro de que tu hija tiene algo que ver, pero por ti, dejaré el asunto sin investigar, pero para la próxima, me olvidaré que es hija tuya, y perderá su cabeza — dice el hombre para luego irse de allí, la nana sintió un escalofrío por las amenazas de Luciano, y en su interior, promete investigar a su hija en secreto.

En cuanto a Luciano, este nada más salir de la sala de espera, se convierte en lobo y se va a las afueras del palacio, luego se va a correr al bosque, ya que tiene mucha ira, y tiene deseos de matar a esa mujer.

Nero su lobo también estaba igual.

Ambos se adentraron al bosque, en donde cazaron algunas presas y comieron también.

Al final de su recorrido, volvieron al palacio, pues la noche ya se dejaba ver.

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*Nota* * *

¿Qué tal les parecen estos capítulos?

Espero que estén bien, y por favor, dejen su apoyo al finalizar cada uno de ellos, de este modo, me ayudan a que esta historia sea tomada en cuenta.

Nos vemos el lunes con más.