MI VENGANZA

********ESMERALDA

Descubrir que mi padre, solo quería a mi madre como una amiga y ella de igual manera solo quería a mi padre como un amigo, me dolió mucho, porque cuando era Carolina nunca pensé que solo había sido concebida por obligación más no con amor, bueno eso debo dejarlo en el pasado y seguir adelante.

Por otro lado, Yareli me tiene informada de cada paso que da mi querido tío, Pero no entiendo por qué le huye a mi padrino Valentino, cada vez que viene a la casa, ella se oculta en la segunda planta de la casa, aún no he visto a mi pequeño primo, sé que el no tiene la culpa de tener a un padre criminal.

- Hola bella dama, mi nombre es José. - Escucho una voz muy dulce, bajo la mirada y veo a un niño de ojos plomisos como son los míos y su sonrisa es tan tierna.

- Hola bello príncipe, mi nombre es Esmeralda mucho gusto. - Le contesto devolviendo la sonrisa.

- Mi mamá se llama Yareli y trabaja acá, no se me permite bajar a este sitio, por favor no digas a nadie que me vistes, porque el señor Marcos se enoja y me castigará en el cuarto oscuro.

- Me dice el pequeño, que se me rompe el corazón al verlo temblar de miedo. - No te preocupes, mi principe pronto está princesa te liberará de los monstruos malos

- ¡Gracias princesa! Sé que tú me liberas de las malas personas y por fin mi mamá dejara de llorar todas las noches.

- ¿Tu mamá llora de noche? - Pregunto indignada.

- Sí, el monstruo le llama por teléfono, para que mamá haga cosas malas y ella se niega, por eso llora, porque él me quiere llevar lejos, dónde esas personas que me pegaban y me dolía mucho.

- No te preocupes mi príncipe, aquí tu princesa no dejará que te alejen de mí. - Al ver el rostro de mi primo feliz, eso hace que mi corazón también se alegre.

- ¡José! ¡José! - Escucho el llamado de Yareli a su hijo, al verme agacha la cabeza avergonzada.

- Lo siento señorita Esmeralda, no se a que hora se me escapó de la habitación y bajo a la sala.

- Yareli, nunca agaches la cabeza ante nadie, escúchame bien, mi príncipe está permitido estar en la sala, yo lo estoy autorizando.

- Pero el señor Marcos lo prohibió, lo castigará si no obedece. - Dice Yareli, muy preocupada.

- Escúchame bien Yareli, ambas sabemos lo que hizo ese hombre, muy pronto pagará por el daño que nos hizo a ambas, si el te dice algo solo debes de decir que yo pedí que el niño esté cerca de mí.

- ¡Pero quién diablos permitió bajar a este mocoso! - Se escucha una fuerte voz, que viene de la puerta principal. - Me levanto del mueble y me acerco a él.- Yo lo quise que bajara, hay algún problema señor Marcos.

- Escúchame bien señorita Esmeralda, está es mi casa y usted es una recién llegada, no se tome atribuciones que no le corresponden, si yo ordene que ese mocoso se quede en su habitación así debe ser, usted no tiene autoridad en esta casa.

- Bueno, entonces le diré al señor Cristian que me voy, justamente ayer conversamos y me dijo que yo tenía autoridad en esta casa, por ser su invitada especial, durante mi estadía puedo hacer lo que quiera, eso me dijo el señor Cristian, bueno, señora Yareli ¿Puede ayudarme hacer mis maletas? Llamaré a mi padrino Valentino para que me lleve.

- ¡No! No le digas nada, disculpa Esmeralda hoy tuve un mal día, si quieres estar cerca de este mocoso, bueno hazlo este niño es inquieto, por eso no dejo que baje.

- Yo no lo veo así, él es dulce y muy bien educado, así que he determinado ser su madrina, desde hoy en adelante no lo vuelvas a decir mocoso, porque su nombre es José.

- Está bien Esmeralda, Pero es tu responsabilidad si este niño rompe algo. - Dice muy enfurecido.

MIENTRAS TANTO EN SUIZA.

DYLAN

Llegó a Suiza muy feliz, por haber hecho un buen negocio con la industria automotriz, llegó a casa y encontró a mi hermana tumbada en el mueble.

- Alejandra que cómoda te encuentras, supongo que la inmobiliaria está siendo como viento en pompa.

- Hermano, porque no te compadeces de mí, mi mejor amiga que era como mi hermana se fue a Estados Unidos y no cuando regresará.

- Como soy un buen hermano, se preocupa mucho por su única hermana, te informo que nos mudaremos a los Ángeles, ya que durante todo este tiempo he estado haciendo negocios y este último es el más grande, se trata de la empresa automotriz más grande e importante de los Estados Unidos.

- ¡Qué bueno hermanito! No sabes la alegría que me das, tú sabes que siempre he sido muy cuidadosa en escoger mis amistades y Esmeralda es la única amiga que he considerado como una hermana para mí.

- Que bueno que te guste la idea de emigrar a los Estados Unidos, Pero mi regreso es para solucionar un problema con Nelson.

- Si, pobre que feo lo que le sucedió a él y a su novia morir de esa manera. Menciona Alejandra, sorprendiéndome.

- ¿Qué le sucedió a Nelson? - Pregunto muy preocupado.

- Sucede, que de un momento a otro vendió la clínica y se fue al extranjero, luego nos enteramos de que Nelson y su novia, tuvieron un terrible accidente y ambos murieron calcinados en su automóvil.

- ¿Cuando sucedió eso?

- Hace un par de días, salió en las noticias, imagínate morir tan joven y de esa manera, pobre Nelson.

- Esto sí es una verdadera calamidad, ahora como averiguo a quien fecundaron mis espermas.

- Hermano, porque te quedaste tan pensativo, hay algún problema cuéntame por favor, sabes que estoy para ayudarte.

- Lo que pasa hermana, es que unos años atrás, deje mis espermatozoides en el banco de espermas de la clínica de Nelson, ahora que lo ha vendido, donde habrá ido a parar mis semillas.

- Lo que yo me enteré, es que muchos pacientes tanto hombres como mujeres, denunciaron a las autoridades sobre la perdida de sus semillas, pero ya no pueden hacer nada los nuevos propietarios, eliminaron todo lo que quedó en esa clínica, para empeorar todo Nelson y su novia fallecieron hace unos días, hermano eres joven puedes tener tus hijos de la forma natural.

* Un capítulo más, queridas lectoras, regáleme sus Links para seguir regalando les más capítulos de esta novela.