Mariela es una chica sencilla que cursa su último año de estudios de derechos penales. Trabaja como auxiliar jurídico en un respetable bufete de la ciudad. Un día recibe de su jefe una propuesta "Poco convencional" Pero debido a sus problemas económicos decide aceptar no sin antes redactar un documento que respalde ese acuerdo
No obstante, surge otro imprevisto familiar mucho más grande al que hay que hacerle frente en el menor tiempo posible y es donde se ve obligada a aceptar otra propuesta que le hace su jefe. Esta vez hablando de mas tiempo y mayor cantidad de dinero y vuelve a redactar un nuevo contrato
Axel Miller es un chico al que Mariela le gusta desde hace ya mucho tiempo y al que no se le ha atrevido a acercar por miedo al rechazo; Sin embargo, el destino los lleva a encontrarse de manera inesperada al abordar ese inesperado viaje
¿Qué pasará con Mariela?
Está envuelta en la encrucijada más crucial de toda su vida, en una lucha por decidir... "Entre el amor y el dinero"
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Capítulo 22. Ella supo mover sus cartas
Capítulo 22
Ella supo mover sus cartas
De nuevo paso la mañana sola, parece que a Steven se le ha olvidado que pagó para tener compañía. El muy estúpido. Estoy odiando cada segundo que paso en este lugar, excepto en los que veo a Axel. Quisiera poder verlo ahora mismo, ni siquiera pude decirle que yo también muero por besar sus adictivos labios
Mientas soñaba despierta con ese hombre, aparece Steven y me invita a almorzar. Algo tranquilo, pues es obvio que nos tienen que seguir viendo juntos aquí, así que fui a prepararme para salir con él.
Al llegar a cubierta tomamos una mesa apartada de los demás
—¿Cómo te ha ido con Brenda? —pregunta con una mirada invasiva, parecía que quería escudriñar en mis recuerdos para averiguarlo por su cuenta
—Supongo que bien, aunque estaba pensando que lo que quería ella con todo esto era seguir provocándome durante nuestro encuentro y luego dejarme a merced de los lobos, como siempre lo hace. Pero supo comportarse al menos por esta vez. Lo que me sorprendió mucho a decir verdad. Steven, quiero que sepas que hay rumores de que el jefe Schneider se encuentra en este barco —le digo con preocupación y él ni se inmuta— Y... Hay algo mas
—Averiguaré si es cierto... Con respecto a lo de Brenda, yo diría que de verdad te está ofreciendo una rama de olivo. ¿Podrías ser más condescendiente con ella? Te lo estoy pidiendo de favor. Brenda se hace la dura por fuera, pero por dentro tiene un gran corazón. Ella puede ser muy buena persona, créeme
—Pues entonces estará ocultando esos sentimientos en la bóveda de seguridad del banco de España porque dudo que alguna vez hayan salido a la luz. Una cosa Steven... ¿Tú estás seguro de que no sigues enamorado de ella?
Le pregunto y noté como su mirada cambió de repente y vaciló un poco antes de hablar, sabía la respuesta que me daría y me da mucha pena por él, entregó sus sentimientos a una mujer caprichosa que no lo valora y no lo va a querer nunca de la misma manera en la que el lo hace
—Si gustas no respondas, no es relevante. Solo que no me parece nada agradable que me hayas traído aquí como tu novia tan solo para ver como vuelves a enamorarte de tu ex y encima quieras regresar con ella. No lo toleraré, yo sé que no puedo reclamarte nada, pero si te vas a involucrar con alguien que sea con una que si te quiera.
—Claro que no, como se te ocurre que voy a hacer tal cosa. Sabes una cosa Mariela. Es muy difícil olvidarse del primer amor. A veces resulta imposible y yo a esa mujer la amé con cada fibra de mi piel. Sé que ella me ama, su mismo esposo me lo ha dicho. Pero está casada y eso la hace prohibida para mí.
—No comprendo como puedes pensar así aun despuésde todo lo que ha pasado entre ustedes, debes luchar contra eso. Créeme cuando te digo que ella no te merece Steven, Brenda es de las que te usa y te desecha cuando ya no te necesita. Vas a caer al fondo de un acantilado por una mujer que no le interesa lo que pueda ser de ti en el futuro. Deberías alejarte de ella ahora que puedes
—No me entiendes... Yo quiero alejarme, pero se me hace imposible
—Por qué te entiendo y te aprecio es que me atrevo a decirte todo esto. Deja de pensar en ella y busca a otra mujer, una que te quiera como tú te lo mereces
—Brenda es la única mujer a la que he podido amar de verdad. Me entregué a ella en cuerpo y alma y a pesar de que han pasado muchos meses sin poder tenerla, siento que no puedo dejar de amarla
—Parece que ya tienes una decisión tomada y yo no soy quien para opinar en tus decisiones
Le respondo un poco triste, no quisiera verlo caer en el juego de esa mujer, pero asumo que nada de lo que tenga para decirle le va a hacer cambiar de idea
—Sabes algo, volver a verla después de tanto tiempo quizás haya sacado a la luz algunos sentimientos que tenía oprimidos en el pecho desde hace algún tiempo.
—Como digas, a fin de cuentas vas a hacer lo que tú quieras, Steven, así que Ajá... Tan solo me parece que no deberías dejarte llevar por ellos, solo son eso... Sentimientos
—Agradezco tus palabras y valoro mucho todo lo que te estás preocupando por mí luego de haberme comportado como un canalla contigo. Mariela, te prometo que seré cauteloso con esto.
—No importa lo que hayas dicho. Quisiera que no sigamos tocando ese tema. Somos compañeros, ahora socios, estaremos bien.
—Sabes una cosa, Mari... Cuando estás conmigo se me hace mucho más fácil dejar a Brenda a un lado. Parece que disfruto mucho de tu compañía
Este hombre toma una de mis manos y la aprieta un poco, puedo sentir que está siendo sincero conmigo yo tan solo sonrío y volteo a otro lado con timidez
En un momento le llega una llamada y Steven se levanta para atenderla en privado
Por lo que veo en su rostro no debió ser algo muy bueno, ya que la cara que puso me dio la impresión de que esta muy enojado
Al cabo de unos minutos el volvió a la mesa, con el ceño fruncido y su mirada hostil, algo con respecto a esa llamada no debió haber salido muy bien y comienzo a sacar conclusiones en mi cabeza
—¿Y bien? ¿Quieres hablar al respecto? Tienes cara de pocos amigos y eso me aterra ¿Puedo saber que es lo que te preocupa?
Pregunto directamente y tomo sus manos, pero el me esquiva de inmediato y eso me puso en alerta. Aunque también pienso en que se ha enterado de todo este asunto de Richard y el jefe Schneider
—Tranquilo, podemos ignorar esto, no pasa nada. ¿Quieres dar un paseo por la cubierta? —pregunto aun tratando de disipar esta situación—
—No quiero, tenemos asuntos más importantes que tratar
—Entonces tu me dirás
Le digo y me encojo de hombros y el me mira con... Ni siquiera puedo definir la expresión de su rostro en una sola palabra, su actitud me tiene toda confundida ahora
—Mariela me ha llamado Richard para informarme que el anillo de matrimonio de Brenda se ha extraviado justo esta mañana mientras desayunaba contigo ¿Quieres hablar tú respecto a esto?
Me costó tragar saliva al sentir una ligera acusación en sus palabras. Sabía que estaba en problemas, me di cuenta de que esta era la verdadera razón por la que esa mujer estaba siendo tan amable conmigo, me había tendido una trampa y yo caí redondita en ella sin sospechar absolutamente nada
—¿De que deberíamos hablar? ¿A caso no se le pudo haber caído durante el desayuno? Lo pudo haber perdido en el restaurante, ¿por qué no investigan por las cámaras?
—¿Que crees que es lo que deben estar haciendo ahora mismo? Por eso es que te pregunto. ¿Se lo ha quitado en algún momento frente a ti?
—No lo sé —respondo un poco nerviosa.
—No pudiste darte cuenta por lo menos si lo metió en el bolso o lo dejó sobre la mesa, Mariela esto es delicado
—La verdad no me di cuenta Steven, lo siento, yo solo estaba deseando salir de allí, que voy a estar pendiente de lo que haga ella con sus cosas. No soy su niñera y ni siquiera somos amigas. No es algo que me importe
—Pues debería importarte, ya que estabas junto a ella en ese momento
—Si pero para que voy a estar cuidando de sus cosas
—¿Te has quedado a solas con el anillo alguna vez?
—Claro que no, para qué ella iba a dejar su alianza de matrimonio contigo... No, no es cierto. Estás insinuando que... (Suspira pesado) ¿De verdad crees que me he robado el anillo de Brenda?
—Mmm... Mariela yo...
—Esto es insultante —lo interrumpo— ¿Cómo puedes creer eso de mi? ¿Tan mala opinión tienes tú de mi?
—Claro que no, Mari. Pero eres la única persona que ha estado con ella esta mañana. Es por eso que te pregunto, porque sé que ellos también querrán interrogarte
—Steven, sabemos que tengo muchísimos problemas económicos, pero eso no me hace una mala persona, jamás le robaría a nadie para solventar las deudas de mi familia. No soy una ladrona
—Mariela ahora mismo eres la única persona de la que todos sospechan.
Debemos hablar
—Ahora no, Steven —digo sintiendo como mis ojos se llenan de lágrimas— Quiero estar sola. Esto es más de lo que puedo soportar
Me levanto de la mesa y camino hacia el camarote. No puedo creer que Steven haya podido llegar a tanto. ¿Cómo puede dudar de mí? Yo sería incapaz de robarle a alguien.
Me tumbo en la cama y dejo caer mis lágrimas al fin, sin dudas este es el peor día que he pasado en este lugar
"Acusada de ladrona y sin poder irme de aqui"
Busco en mi bolso un pañito para secar mis lágrimas y de pronto veo el anillo de esa mujer ahí
Así que este era su gran plan, dejarme la evidencia de que le robé para que me saquen esposada de este lugar y desprestigiarme frente a todos. Vaya, ella si que supo mover sus cartas, ahora soy yo la que debe prepararse muy bien para la siguiente jugada. No voy a permitir que Brenda manche mi reputación de esta manera, voy a encontrar la forma de devolver ese maldito anillo y encima hacerla quedar en ridículo frente a todos. Ella no sabe con quién se ha metido, No pienso dejarme pisotear por ella ni de nadie