Erik Brown, en la fiesta de navidad se entera del compromiso de su novia con su hermano mayor. Con el corazón destrozado, toma el vehiculo de su amigo, en medio de una tormenta, en su alocada carrera pierde el control del auto cayendo por un precipicio, hundiendose en el mar. Erik es rescatado por una Sirena, que resulta ser su vecina en la playa llamada Aria, quien lo lleva a su cabaña, para refugiarse de la tormenta. Al pasar tiempo juntos se enamoran y deben enfrentar los desafíos de su singular relación y como mantener el secreto de Aria.
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21- Nuevas amigas
#ARIA DELMAR
Me lance al mar a media noche, nade libre, alegre, por fin vivia nuevamente esa libertad y no me sentia encerrada como en la pecera en la casa.
Mi dicha no solo se debia a que podia nadar libre, sino que estuve con Erik, disfrute sus caricias y besos, tan intensos, apasionados, deseoso por sentirme completa, nuevamente en el ático, fui de él y él mio. Los dos nos fundimos en la llama de ese desenfrenado deseo que ahora disfrute sin miedo, la primera vez era algo nuevo e intrigante, pero ahora me sentia mas segura.
En medio de mi diversión me quede quieta, aparecio otra sirena, nos quedamos mirando una a la otra, ella nado a mi alrededor, me miro a detalle.
Yo me quede congelada, jamás había visto a otra.
"Fuiste traida por la tormenta" Indagó.
"Por la tormenta" pregunte con sorpresa.
"Con mi hermana fuimos alejadas de nuestro hogar" Señalo hacia una dirección.
"No pudimos regresar, ella se lastimo contra las rocas, espero mejore, ahora le llevo de comer"
Me cuenta.
"¿Dónde esta?" Le pregunte
"Sigueme" Me dijo.
La segui rumbo a una cueva que quedaba bajo el agua, al ingresar salimos en un tipo caberna, estaba oscuro, solo se veia por el brillo de nuestros adornos en el cabello.
Habia una joven sirena recostada sobre la roca, tenia su brazo lastimado, sostenido con una alga que se ve su hermana lo hizo.
"Por cierto soy Coral y ella es Perla, por la emocion de conocerte se me paso" Me dijo.
"Yo soy Aria" Me presente.
"Coral" La voz debil de su hermana.
"Deben salir de aqui, es frio y humedo" Les digo
"NO, LOS HUMANOS NOS MATARAN" Exclama asustada Coral.
"NOS VAN A QUERER SACAR NUESTROS TESOROS"
"No deben decir lo que son" Les aclaro.
"¿Cómo sabes?" Me pregunta.
"Mi padre me enseño" Les dije.
"¿Quién es tu padre?" Me pregunta.
"Él es humano, me salvo de unos piratas cuando era una niña"
"¿Tu padre?"
"Te usa para su beneficio"
Escuche que dijo Perla
"No, él me cuido siempre" Le respondí defendiendo a mi padre.
"Nuestra madre fue asesinada por un humano que la enamoro, nos dejo y solo mi tia nos crio" Me cuenta Coral.
"No todos son asi" Les dije.
"Vamos, debe curarse tu hermana, las ayudare, pero aquí no puede quedar"
"Si nos ven nos matan" Insiste Coral.
"Si no dices lo que sos y actuas como uno de ellos no te pasara nada"
"Me duele mucho" se queja Perla entre sollozos.
"Bueno, iremos contigo, pero lejos de los humanos, vi un lugar que podriamos usar como refugio, estuve evaluando esa posibilidad" Escuche que dijo Coral, al parecer es la mayor y toma las decisiones.
La ayude a cargar a Perla hasta salir de ahi, fuimos hasta la costa donde habia una cabaña que parecia abandonada, tenia una piscina que se alimentaba con agua del mar y la vista estaba oculta con árboles.
Cuando salimos del mar note con que torpeza caminaban, se ve que no estaban acostumbradas.
"Hace frio" Tirito Perla.
"Dejame ver la chimenea" Les dije.
Limpie un poco y arme una pequeña montaña de troncos que encontre afuera, encendi como mi padre me enseño en caso de no tener fosforo.
"Es bello" Admiro Perla queriendo tocar.
"No lo toques te puede quemar, da calor y cocinas los alimentos, pero no toques, te provoca ampollas muy dolorosas". Le digo Enseguida.
Me dirigi a casa, quedaba a pocos metros de la nuestra, tome algunas cosas.
-¿Qué haces? Me sobresalto mi padre.
-Conoci una amiga, esta de paso y se lastimo... ¿Sabes si la cabaña que queda en esa dirección tiene dueño? Le pregunto.
-Si, pero los dueños estan en el extranjero. Me respondio.
-Menos mal. Le digo tomando una manta.
-Aria... Por las dudas tu amiga es como tu. Me dijo.
Mi padre me sabia leer como a un libro abierto.
-Si... Pero no confian en los humanos. Le digo.
-Solo la ayudas... No piensas... Digo, si te invita a ir con ella.
-No te dejare, no tengo esa intención. Le respondo al ver su cara.
-Siempre pensé que si se presentaba la oportunidad te dejaría ir, entendere si quieres hacerlo.
Me aproxime dandole un beso en la mejilla.
-Eres mi padre, y te quiero, gracias por decirlo.
-Llevale un poco de comer. Me señalo las tortas y el tarro de leche.
Tomo las cosas y me dirigi hacia la cabaña.
"Les traje para que se abriguen" Les enseñe la manta.
"Un poco de comer" Les dije colocando ante ellas.
"¿Qué es?" Pregunto Perla.
"Leche y torta"
"No comemos eso" Anuncio Coral
"OK, deja que te cure" Le dije revisando donde se lastimo.
Tenia su brazo con una herida cortante.
"Esto necesita atención medica, es profunda la herida" Le indicó.
"No, me niego" Dice Coral.
"Deja que aunque sea la vea mi padre, en él podés confiar"
"De acuerdo, pero que sea en medio del mar" Dijo Coral.
Sabia que no confiaba y se sentia mas segura si era asi, por cualquier cosa escapar.
Regrese a casa.
-Padre la herida de Perla es una cortadura profunda, ¿puedes curarla?... Y solo acepta si vamos en el bote en medio del mar. Le señalo.
-Entiendo, si es asi, vamos. Respondio pensativo.
Se dirigio a su cuarto y salio con su maletin de primeros auxilios que siempre llevaba en cada viaje.
Nos embarcamos y esperamos en medio del mar hasta que sentimos un golpe al costado de bote.
Me aproxime iluminando con la linterna y le baje la soga con la red para subir a Perla, Coral se quedo en el agua atenta.
Mi padre observo a la joven de ojos oscuros y cabello largo oscuro.
-Hola Perla, soy el papá de Aria. Le dice al saludarla con una voz tierna.
-Te reviso. Le dijo al tomar su brazo.
Mi padre con cuidado le limpio, le coloco el remedio y le coloco la gotita.
-Te pongo la gotita porque asi se va a curar, debes tomar algo para el dolor.
-Mi tia sabe como curarme. Comento Perla.
-Listo, fuiste muy valiente. Le dijo mi padre, al rato veo a Coral atras de mi padre.
-Hola, y tú. Indago mi padre.
Observe que se mostraba amenazante ante mi padre, me interpuse a defenderlo.
-A mi padre no lo tocas. Refute molesta.
Ella quiso quitarme de en medio, las dos forsejeamos y caimos al mar, en mi estado de sirena tengo instinto de casadora, Coral no predijo mi tenacidad.
"HERMANA PARA, NOS AYUDO" Aparecio Perla queriendo separarnos.
De un coletaso aleje a Coral.
"DEJALA ARIA, ELLA SOLO ME PROTEJE, LE CANTE A TU PADRE PARA QUE NO RECUERDE"
Me dijo
¿Perla emitio un canto?
"¿Qué hiciste? " Le pregunte.
"Mejor prevenir, agradezco tu ayuda, pero no queremos arriesgarnos"
Me respondio Perla llevando a su hermana que venia embalada al sentir su orgullo herido al ser derrotada por mi.
Nunca use un canto con mi padre y esta lo uso, me enoje con ella, la observe irse.
Suspire colocandome ante mi padre emiti un canto sacandolo del trance.
-¿Qué hacemos aqui? Me pregunto
-Buscabamos peces. Le menti.
-Ha.
-Vamos y mañana temprano. Le indique.
-Es lo mejor. Respondio y regresamos a casa.
Estaba molesta con Coral por querer dañar a mi padre y con Perla como se atrevio a hacer eso con mi padre despues de haberla ayudado.
A la mañana temprano mi padre se levantó con la idea de buscar los peces que no pudimos a la noche.
-Que raro, esta todo muy tranquilo. Expreso.
Sabia a que se debia eso, de seguro Coral junto a su hermana se dieron el festin y espantaron a los peces.
Mientras estábamos escuche un golpeteo al costado del bote, me aproxime y vi a Perla.
"¿Que haces aqui? Le pregunte con los dientes apretados.
"Lo siento, pero me duele, tu padre dijo que podia tomar algo" La escucho decir.
"Analgésico" Le respondi seria en un susurro.
"¿Donde consigo?" pregunto.
"En una tienda te dan a cambio de dinero que usan"
"Si, lo conozco" Expreso pensativa
Ella me señalo un par de peces que los lanzo al bote.
"Por la ayuda" Me dijo alejandose.
-Aria, es de dia, no puedes hacerlo. Escuche que me dijo mi padre al ver los peces.
-Saltaron solos aqui. Le señale.
-Eso es suerte, con esto tenemos. Expreso al ver a lo lejos el bote de su amigo.
Ese fue el modo de Perla de dar las gracias, al ver a Erik se me paso el enojo, él me traia alegria.
El abuelo de Erik se quejaba de que no pesco nada y mi padre le invito comer con nosotros.
Al llegar a la playa Erik me bajo en sus brazos.
-Me enloquese verte asi, y a la vez me pongo celoso, no quiero que nadie mas te vea. Me susurro.
-Estamos en la playa, es normal vestir asi. Le respondi.
-Eres muy hermosa, dulce, encantadora, me siento afortunado por tenerte. Me expresa.
Sonrio sonrojada.
Su hermano propone buscar las bebidas para acompañar lo que estaban por preparar mi padre y su abuelo.
No queria separarme de Erik, cada momento que podia pasar con él queria aprovecharlo.
Al salir de la tienda veo a Coral, se ve que fue a conseguir el remedio para su hermana, me quiso hablar pero no le di cabida, me sentia molesta porque quiso atentar contra mi padre, estaba convencida que defenderia con uñas y dientes a los que amo.
En la playa hicimos el pescado asado, el aroma habría el apetito.
-Buenas, ya llegué. Apareció Luis junto a su madre.
-Hola, trajimos un pastel. Dijo Damaris saludando con una sonrisa, al parecer mi padre los invitó.
-Espero que no le moleste mi presencia, Luis me dijo que venia hacia aqui y me cole con él. Comento Damaris, al parecer mi mirada decia que me molestaba su presencia.
-Para nada, son bienvenidos. Dijo mi padre.
-¿No es asi Aria? Me pregunto.
-Claro. Le respondi no muy convencida.
-Vamos a caminar por la playa. Propone Erik.
-Los acompaño. Se nos unió Federico que al parecer estaba pasando por un momento dificil su cara lo decia todo.
-Voy con ustedes, no sere muy útil aquí. Agrego Luis.
Caminamos un trecho por la playa, los chicos comentan donde pasaran fin de año, mientras estoy atenta a una escena no muy lejos de ahi, veia a Perla con gestos deseperados y a Coral recostada sobre la playa.
Cuando Perla me ve me hace gestos.
"AYUDA POR FAVOR" Grito.
-Mira al parecer necesitan ayuda. Comenta Luis.
Nos aproximamos y observo a Coral con una herida cortante en el pie.
"MI HERMANA PISO ALGO Y CAYO, SE GOLPEO LA CABEZA" Comento Perla señalando a su hermana desvanecida.
-¿Cómo te llamas? Le pregunto Luis.
-Perla.
-Tu también estas herida, le señala el brazo que tenia rojo con la cortadura.
-No, es nada, ayuda a mi hermana. Me pide suplicante mirandome a mi.
-¿Cómo se llama? Indaga Federico.
-Coral. Respondio agitada Perla.
Me aproxime a ella.
-Llevémosla a casa, ahi se le puede curar. Solo se desmayó. Le digo de manera pausada.
-Yo la llevo. Se ofreció Federico a alzarla en brazos.
-Espero no intentes nada contra mis amigos o no tendre consideración. Le adverti en el oido a Perla.
-No, no lo hare, lo siento por lo de antes, solo ayudala. Me pidio suplicante.
-Perla se te ve con los ojos vidriosos. Le dijo Luis apoyando su mano en su frente, ella se retiro nerviosa.
-Solo compruebo tu temperatura, parece que tienes fiebre. Le dijo Luis.
-No es nada, ya tengo el remedio. Enseño la bolsita que tenia en la mano.
-¿Tomaste uno? Le pregunte.
-No, estaba por hacerlo cuando le paso eso a Coral. Me responde.
-A tu hermana la cruce en el negocio, como llego rápido, si la vi caminando.
-Es que nado. Le dijo Perla.
-Ah, se lanzo al mar desde allá y llego hasta aqui. Evaluo Federico mirando el panorama.
-Debe ser muy buena para recorrer a nado esa distancia. Expreso Erik.
-Asi, es asi. Dijo Perla nerviosa.
-¿Qué hacían por estos lados? Pregunto Luis.
En eso llegamos a casa e interrumpi la charla porque note a Perla nerviosa al no saber que responder.
-Colocala sobre el sofa, le curare el pie. Señale a Federico.
-¿Sabes como hacerlo? Podemos llamar a un doctor. Dijo Federico.
-Tardara en llegar y siempre con mi padre nos curamos las heridas, ya se como hacerlo. Le dije.
Al terminar de curarla Federico insiste.
-Llevesmola a emergencias.
-No, no es necesario. Perla se altero.
-Pero sigue desmayada, si es algo grave, hay que llevarla.
-No, no le gustan esos lugares.
Sabia el porque su negativa, pero Federico estaba muy insistente.
-No se te ve bien. Le dijo Luis
Podia sentir la tensión, Perla no se veía bien, al parecer su temperatura se elevo y ella cayo desvanecida.