Bruja, Rompe La Maldición.

Dos días han pasado desde lo sucedido en el palacio, y Elias había estado lidiando con ello, los huéspedes de la conferencia, se han ido, y aunque la fiesta se arruino, todo salió bien, no habrá conflictos entre reinos y se pactaron algunos contratos de comercio. El rey por su parte, estaba inquieto, Elias le reclamo por como permitió que el demonio causará problemas con los Ashbourne, cuando ellos poseen una gran influencia en el reino, en especial ahora que tienen el apoyo de la princesa Chevalier.

—¿como iba a saber que ese no eras tú?— se excusa el rey.

—¿es que acaso no conoces a tu propio hijo?, que decepción padre.— expresa molesto.

—creo que estas exagerando. Elias, yo creí que finalmente estabas actuando de acuerdo a tu estatus y que querías el bien del reino.— responde el rey.

—¿y que bien nos trae haciéndome enemigo del archiduque Ashbourne y de la princesa Chevalier?— pregunta cruzándose de brazos.

Puede que el castaño sea amable, pero, en verdad estaba enojado por la negligencia de su padre, ya le han contado por su secretaria todo lo que el falso Elias hizo, su comportamiento déspota, sus intenciones con la princesa Chevalier y su pelea con Eldritch. Y es que tanto la secretaria como los guardias, habían notado su comportamiento, pero, ellos son solo sirvientes, y aunque le comentaron al rey este detalle, el rey no le dio importancia.

—¿enemigo?, no, el plan era que te casaras con la princesa, pero, el archiduque estuvo de entrometido, seduciendo también a la princesa.— responde molesto.

—no se si eso sea verdad, pero...—deja escapar un suspiro.— en fin, un poco más y el ejército de Trois Blanc seguramente estaría quemando el reino.

—no seas un exagerado, eso no pasaría, yo creo que si lo intentas, podrás conseguir ese compromiso, es nuestra oportunidad, la santa puede ayudar, ella quiere al archiduque, si trabajan juntos lograrán el objetivo.— asegura el rey.

—padre, ¿crees que soy la pareja de la princesa?, hasta donde sé, ellos no se casan con cualquiera...solo se unen a la pareja que su cuerpo acepta. ¿Es que acaso no lees?, la sangre y saliva de un Chevalier, es veneno puro, un solo beso y estas acabado, no hay cura.— le explica.

El rey ríe por las palabras del príncipe.— muchacho, no se donde sacaste lo ingenuo, eso solo son historias inventadas, hechas para alejar a los hombres. Pero si te lo propones.— le muestra un pequeño frasco de líquido rosa.— esa mujer será tuya y no le quedará de otra que ser tu esposa. Ese era el plan después de todo, pero se arruinó.

Elias tomo ese frasco y lo aventó contra la pared.

—no puedo creerlo...¿me pides que viole a una mujer?, que decepción padre.— reclamo.

—¿violar?, hay por favor, no es violarla si ella se te ofrece, esa poción, solo la hará despertar el deseo que siente.— sonríe ladino.

—que asqueroso eres...siento vergüenza de llevar tu sangre.— responde Elias.

Dicho esto, se retira del lugar, pero, pide le preparen un auto, es mejor hablar con Eldritch y la princesa, hacerles saber la clase de hombre que es su padre, y aunque le duela, el castigo que reciba, es porque se lo ha buscado.

......

Eldritch y Aleksey, estaban en la sala, la albina le comenta al archiduque que aquel que podría deshacer la maldición, había vuelto, al menos eso es lo que Blake le dijo, porque, Lucifer en cuanto nadie se lo espere, desaparece del castillo.

—eso quiere decir que, ¿iremos al infierno?, ¿como humano, puedo entrar?— eso le causa curiosidad, ya que el lugar debe ser muy diferente a ese mundo.

—no pasa nada. Pero debemos ir pronto.— antes que el señor infernal decida irse de nuevo.

—de acuerdo, podemos irnos esta noche, hablaré con mi madre para que se encargue de la gestión en mi ausencia.—

—bien, y no es necesario llevar equipaje, será un viaje rápido.— le informa en caso de que empiece a empacar.

Su platica se ve interrumpida por el mayordomo, quien le dice a Eldritch que el príncipe pedía verlo, así que el archiduque le pide que lo dejen pasar. Elias no tarda en entrar, saludando con cortesía y era bueno ver a la princesa, así tiene la oportunidad de hablar con ella también. Elias les cuenta lo que supo de su padre, y el porque este no le dio importancia cuando hubo un cambio en él. El rey estaba feliz de que su hijo tuviera sus mismos ideales, tanto que al parecer el falso Elias tenía como objetivo, casarse con la princesa, sin importar los métodos que usará.

—¿por qué no me sorprende?, mi madre siempre lo ha dicho, el rey no es apto para el trono.— comenta Eldritch.

—estoy de acuerdo con la archiduquesa.— responde Elias y mira a Aleksey.— lamento que mi padre haya intentado algo tan perverso.

—no se disculpe, aún si me diera a beber ese líquido, no funciona en mi, mi cuerpo se deshace de esa clase de pociones.— explica Aleksey con calma.

Pero, esta noche, antes de irse, el rey tendrá una visita, una que no será muy agradable para él.

—aun así, lo que mi padre y ese falso yo, intentaron hacer, esta mal y es un acto repugnante. Abusar de una mujer, es de bestias...que va...creo que ni las bestias actúan así.— Elias estaba furioso.— y encima...la santa cooperando con ellos...Eldritch...yo se que ella te...

—no, no es lo que piensas, no tengo interés en ella.— observa a los ojos a Aleksey quien esta sentado frente a él.— ya tengo a alguien a mi lado.

Elias nota la mirada de su primo, y puede ver que la albina le devuelve esa mirada de complicidad y coqueteo. Elias muestra una leve sonrisa.

—entiendo. Pero, tengan cuidado, no se que planes tenga mi padre y probablemente el templo este de su lado.— les advierte.

—agradezco su sinceridad alteza.— habla Aleksey.— y sabe que si su majestad intenta algo, yo podría ejecutarlo, ¿esta consciente de eso?

Elias guarda silencio, pues esa persona es su padre, por supuesto que le dolería se es ejecutado, pero, también sabe que, es su padre quien esta actuando mal y que el castigo que le den, es porque se lo ha ganado.

—lo sé, y, estaré preparado, sea lo que sea que pase.— responde con firmeza.

...