El Renacer Del Hijo Intercambiado

"Daniella no está en su apartamento."

Esa fue la notificación que leyeron en sus respectivos teléfonos.

Ambos se sobresaltaron y observaron a su alrededor. Tal vez se les había pasado algo por alto.

"Voy al baño primero." Dijo Rey, que ahora se había levantado para dejar su asiento.

Los demás solo asintieron.

Cuando se dirigía al baño, se cruzó con uno de los empleados del restaurante.

"Oye, ¿conoces a Daniella? ¿Por qué no ha venido a trabajar hoy?" Rey aprovechó la oportunidad para preguntarle al empleado.

"Oh, Daniella... Hoy está en la sección de la cocina, lavando platos. Es que todavía le duele el pie. No puede caminar demasiado tiempo. Y todavía cojea, podría caerse la bebida que lleva." Con inocencia, la amiga de Daniella explicó.

"Oh, ya veo... Gracias por la información." Respondió Rey y entró directamente al baño.

Solo estuvo allí un momento. Al ver la situación tranquila, entró sigilosamente en la cocina. Y nadie se dio cuenta. Porque la gente estaba ocupada atendiendo los pedidos de los clientes.

"Daniella, ¿por qué no descansas?" De repente, una voz sorprendió a Daniella desde detrás de su espalda.

Rápidamente se dio la vuelta y miró. Cuán sorprendida estaba, porque no esperaba que la persona que la encontró fuera el tío de Jonas Robert.

"El restaurante está muy ocupado. Así que todavía no puedo descansar." Respondió Daniella con inocencia.

No sabía que su pensamiento era diferente a lo que Rey quería decir.

"Me refiero a por qué no descansas en casa. Todavía cojeas." Señaló el pie de Daniella.

"Oh, eso..." Ella pensó que era un descanso de unos minutos de su trabajo. Resultó que era un descanso para no ir a trabajar en absoluto.

"Si necesitas dinero, puedo dártelo. Tanto como quieras." Rey sintió lástima por la vida de Daniella después de que sus subordinados informaran lo que había sucedido hasta ahora a Daniella.

"No, no, no es necesario. Todavía tengo dinero. Trabajo solo como tu responsabilidad como empleado. El jefe también me ha dicho que descanse. Solo que, me aburro en casa. Es mejor trabajar aunque solo sea ayudando." En su mente, en este momento trabaja no porque le falte dinero. Porque sus padres le han dado suficientes ahorros.

"Tío Rey, ¿por qué me buscas hasta aquí?" Con su rostro inocente preguntó.

"Em.. Oh, esto... Iba a darte esto." Le ofreció un ungüento a Daniella.

Por supuesto, Daniella lo aceptó, porque la anciana lo había pedido, para que Daniella lo usara.

Y cuando sea su cumpleaños, no se verán horribles cicatrices en las manos y los pies de Daniella.

Esta mañana, Rey Robert había recibido un video de la grabación de cuando ocurrió el accidente de su abuela.

Y no solo en el lugar del incidente. Sino la grabación de dónde venía Daniella.

Así que se ve la grabación, cuando Daniella sale de la parte trasera del restaurante donde trabaja.

Recorriendo el pasillo de algunos callejones y girando directamente hacia una tienda. Y eso tiene que cruzar un pequeño callejón. Y en ese momento, su abuela también salió de la tienda.

Y de repente un coche gira hacia ellos y está a punto de atropellar a cualquiera que esté en la calle. Casualmente era su abuela. Con reflejos Daniella ve el coche y empuja a su abuela para que no cruce. Lo que resultó en que ella fuera golpeada por el coche.

Y hay otro video que muestra cómo Olivia ha estado parada cerca de la tienda durante mucho tiempo. Y cuando ve el coche blanco, como si diera una señal para que se pusiera en marcha de inmediato.

Pero en el momento en que pierde la velocidad con Daniella, se sorprende. Después de que ocurre el accidente, hay una sensación de decepción en el rostro de Olivia hasta el punto de que sacude el pie en la calle.

"Averigüen dónde está ese conductor." Ordenó cuando terminó de ver todos los videos.

Sus subordinados asintieron y se fueron.

"Gracias tío Rey." Respondió Daniella, interrumpiendo los pensamientos del hombre.

"No hay problema. Deberías irte a casa y descansar." Ordenó Rey, sin darse cuenta de que Daniella no era su subordinada y tampoco era la empresa que él dirigía.

"Lo siento tío, no puedo irme a casa cuando me plazca. Mi jefe me despedirá."

"¿Eh? Hmm.. Pediré permiso a tu jefe." Actuó como si fuera su tutor.

"No, no, no es necesario tío. Estoy bien. Deberías irte a casa." Le animó a Rey a salir del lavadero.