Los gemelos desiden su final

...Alessa:...

Estos días an sido difíciles, porque los bravucones de la escuela, no dejaban que yo entrara al entrenamiento que según solo es para barones.

Fabián y Max le pidieron al entrenador una oportunidad, aunque la mayoría piensa que debería está estudiando a como preparar te.

Alessa: juro que cuando sea emperatriz decretaré una ley donde se promuevan los derechos de las mujeres.

Ni en mi vida anterior fui un machista, desde que éramos niños mi hermana y yo siempre estuvimos juntos asiendo las mismas cosas, y cuando ella fue secuestrada papá no lo pensó mucho y la envió conmigo al colegio militar, incluso el estaba más orgulloso de ella que de mí, pero no tenía problemas con eso porque incluso yo siempre estuve muy orgulloso de ella.

Fabián: yo te ayudaré ok.

Eso es lo que me gusta del chico siempre esta ay para apoyarme. Y me trata al igual que él no como aúna niña indefensa.

Max: hermana, tú siempre apoyaste ahora me toca ami.

Aunque ellos no querían entrenar conmigo, pero Fabián siempre entrenaba conmigo, ya que no me consto tomar el paso de ellos, pies en entrenamiento lo conocía los movimientos y todo pero este cuerpesito de niña no tenía la fuerza al igual que mi hermano.

Así pasaron 3 meses conocí al protagonista de la historia al segundo día, pero me pareció un arrogante, y antipático, él todas mías como yo lo era en mi vida de William.

Alessa: así de payaso me veía yo?

Le digo a Casi, pues ella Como mi secretoria siempre tenia que le vantar mi ropa sucia.

Casi: si siempre, y cuando me tocaba terminar con tus novias por ti peor.

Max: no te preocupes hermano mientras ese tipo se mantenga lejos de nosotros todo bien.

Fabián: ola de que hablan

Max: de que mi hermana quiere que la lleves a dar un paseo por el jardín.

Fabián: mi lady le gustaría tomar el té conmigo.

Alessa: sabes que no me gusta el té, pero te aceptó un café.

Fabián: si, si vamos mocosa consentida.

Alessa: gracias bebe

Él se me queda viendo un poco sonrojado.

Fabián: va..vamos

Salimos rumbo a la cafetería, en estos días nos hemos hecho muy buenos amigos, y de cierta forma me siento muy cómodo con él, puedo ser yo mismo e incluso le platico todas mis inquietudes y mis planes a futuro, él siempre esta ay para escucharme y dar su opinión, sé que será un gran monarca algún día solo espero que la mujer que ame lo entienda bien, pues es será un gran hombre y aunque esté atrapado en este matrimonio yo jamás tendré sentimientos por el de esa forma.

Damos un recorrido por el jardin del patio de la escuela, y al bolver, a la cafeteria veo a Mi hermana? Besandose con Casi?.

Fabian: vaya ya se me asia mucha coinsidencia que se yevaran muy bien.

Alessa: no creeme no ay nada de eso entre ellos.

Fabián: pues eso no es lo que veo. Ni la escuela tampoco nada más mira.

Y si toda la escuela estaba en la cafetería.

Veo salir de esta al principito valiente muy molesto. Yo me acercó a mi hermana y le digo.

Alessa: hermana desde cuando te gustan las mujeres.

Max: desde que a ti te gustan los hombres.

Eso último lo dijo en un susurro.

Alessa: entonces ese beso que fue.

Casi: es que ya lo intenté de todo lo que me dijo Max para atraer su atención de mi gran amor. créeme pero ese no me da ni la hora.

Fabián: entonces intentaban darle selos.

Max: si, algo así aunque el beso no estibo nada mal.

Alessa: crees que con eso él pedirá que le des una oportunidad?

Casi: no lo sé ya lo veremos.

Durante los siguientes días se corría el rumor por todo el instituto acerca del beso que mi hermano le dio a Casi.

Y como todo el tiempo estábamos juntos los 4 el joven vizconde no tardo en aparecer.

Xxx: buenos días me presento, mi nombre es Izan Montreal, quería saver si podría tener la atención de la señorita Casiopea.

Alessa: de quien

Max: de Casi hermana y para qué la quiere.

Dice mi hermano con una falsa máscara de selos.

Izan: solo quería hablar unas cosas con ella joven príncipe si no se molesta

Casi: ok vamos

Izan: ok? Que cosa es eso disculpe mi ignorancia mi lady.

Ay pero que lindo a otro que le falta aprender mucho, pero con esta diablilla aprenderá de todo.

Casi: luego se lo explico sus altezas nos vemos a la hora de las clases.

Alessa: cuida bien de nuestra amiga.

Izan: si princesa no se preocupe

Max: no me preocupo por ella sino por ti.

Él no dice nada pero Casi se me quedo viendo como si le quisiera cortar la lengua. Ellos se van.

Max: ella da miedo cuando quiere

Alessa: siempre ha sido a si

Max: en serio.

Yo asiento pues a pesar de que ella era mi secretaria me conocía muy bien y siempre corría con ella para que me ayudara a desaserme de mis aventuras. Y siempre me miraba con esa cara.

A si pasaron los días asta que llegó el día del festival del pueblo yo jamás había asistido a un festival. Mi hermana menos, pero Fabián bino muy animado a pedirme que fuera con él y no tenía más opción. Pues no tenía con quien ir Casi, ya tenía una relación formal y Max solo quería descansar o eso me dijo él.

Pero vaya sorpresa que me lleve, ella andaba un poco feliz de la vida con una chica la cual se me hacía conocida asta.

Max: hermana te presento a la princesa Tea Benavides, princesa ella es mi hermana Alessa y el joven guapo de atrás de cabellera negra es Fabián su prometido.

Fabián: mucho gusto en conocer la princesa

No sé por qué pero esto me incomodo y la familiaridad con la que ella le habla a mi prometido menos

Tea: por favor solo digame Tea

Alessa: mucho gusto, su apellido se me ase conocido.

Max: es la hermana del príncipe Leonardo.

Alessa: o vaya no pensé que el principe tuviera una hermana.?

Leonardo: eso es porque no somos cercanos como para contarle de mi familia.

Alessa: eso es cierto, pero hermano que ases aquí me dijiste que esto no te gustaba y que querías descansar.

Tea: bueno eso es mi culpa, veran yo hoy yegue a visistar a mi hermano, porque queria conoser el festival, y vi al jovem principe y le rogue que viniera con nosotros.

Mi hermana estaba un poco incómoda, pues en el brazo izquierdo traía colgada a la princesa y en el lado derecho venía el principe aunque este no venía colgado de su brazo si le vi algo en su cara que no supe descifrar.