El Frío Millonario

\~Alejandro\~

Entre a mi closet para vestirme y poder ponerle fin a los que sea que estuviera pasando por la mente de María y también pero aclararle a Amanda que es la única que me interesa —porque duda tanto de mi— no lo entiendo además que tampoco se cómo María supo que estaba aquí.

\~Flash back (tiempo atrás)\~

Estaba con maria como casi todas las noches que pasaba con ella y en ese momento había perdido a mi padre me sentia solo y solo quería ahogar mis penas así que tome de más y llame a maria para que amaneciera conmigo, después de 15 minutos maria apareció en el club en el que estaba bebiendo como era de costumbre salió conmigo del bar después de haber pagado la cuenta, fuimos a un hotel 5 estrellas el mejor de la ciudad en donde tenía la suit presidencial más lujosa solo para mi.

Cuando llegamos me recosté en la cama y me puse a pensar en todo lo que había vivido con mi padre ya que había decidido olvidar los momentos tristes y solo quedarme con lo mejor cuando de repente una voz me saca de mis pensamientos.

-María: en que piensas? (Preguntó mirándome mientras se quitaba na ropa)

-Alejandro: solo pienso en todos los buenos momentos con mi padre. (Dije triste y bajando la cabeza).

-María: porque te fuiste de la ciudad después del funeral? (Preguntó curiosa) pensé en que podría verte pero cuando lo intente Manuel me dijo que habías salido de la ciudad.

-Alejandro: Mmm… bueno mi padre me compro una cabaña en un hermoso bosque a las afueras de la ciudad, quise ir hay a pensar y ha estar un poco más tranquilo. (Dice mirandola a los ojos)

-María: y cuando me llevarás a conocer tu cabaña. (me pregunto con voz pícara)

-Alejandro: nunca (dije con voz fria) esa es solo mi cabaña y no llevo a nadie hay sólo voy cuando quiero aclarar mis ideas y estar solo, ese es mi lugar sagrado y nadie además de mi puede entrar cuando le plasca (dije enojado)

-María: discúlpame no quería hacerte sentir mal con mi pregunta. (Dijo con ojos llorosos)

-Alejandro: no pasa nada, solo no me vuelvas hablar sobre ir a mi cabaña, cuando no me siento bien dejo a Manuel a cargo de la empresa y me voy a la cabaña por unos días y me relajo con el silencia y la naturaleza. (Dije tranquilo) ahora dejemos de hablar y vamos a divertirnos. (Dije acercándola a mi y besándola)

\~fin del flash back\~

Ya recuerdo por que sabe que estoy aquí debió habérselo imaginado al saber que había dejado a Manuel a cargo de la empresa, salí del closet me vestí de negro desde mi polo hasta mis zapatos y me puse una chaqueta color crema, el negro es mi color favorito desde que tengo memoria.

Escuché el agua de la ducha caer al parecer Amanda se estaba bañando, así que salí de la habitación a ver si ya estaba el desayuno e irlo tomando ya que por lo que veo no podré desayunar tranquilo esta mañana, María viene de camino hacer mi vida un caos mientras que Amanda está enojada conmigo por el caos.

\~Amanda\~

Ya que Alejandro estaba en el closet desidi darme una ducha, entre al baño me lave el cabello y me duche cuando termine fui directo al closet y opté por algo más adecuado para la ocasión un poco de elegancia y también un poco de algo casual me gustaría mucho así que elegí un abrigo blanco con una chaqueta blanca también y unos jeans de color gris con unas botas de color marrón, la verdad me encantaba cómo me veía.

Al salir del closet me había dado cuenta de que pase tan rápido del baño al closet que no me había dado cuenta de que Alejandro no estaba en la habitación, cuando termine de arreglarme salí de la habitación y pude ver después de dar unos pasos adelante in hermoso desayuno y lo que más resaltaba en la mesa aparte de todos los esquicitos platos era un florero lleno de mis flores favoritas los girasoles, me gustó tanto que inconscientemente me acerque a los lindos girasoles para tomar uno y olerlo —huhuhu es cómo el paraíso— dije en mi mente con los ojos serrados cuando una voz me saco de mis pensamientos.

-Alejandro: vamos a desayunar ? O prefieres seguir oliendo los girasoles? (Dijo con tono frío)

-Amanda: si (dije tranquila)

Después de que terminamos nuestro delicioso desayuno nose sentamos en el sofá a tomar café el estaba al frente mío, la verdad es que había mucha tensión en el aire aparte del silencio absoluto en el que nos encontrábamos por momentos nuestras miradas chocaban y aumentaban mis latidos pensé que el corazón se me saldría del pecho. En un momento el me miro y pude sentir su mirada cuando lo mire me observaba con ojos de pasión y lujuria, y eso me hizo sentir cosquillas en todo mi cuerpo nuestras miradas se quedaron fijas viéndonos el uno al otro cuando de repente el se para del sofá y acercándose a mi, me levanta de un tirón y de manera audaz me cambia de lugar sentándose el y tirándome encima de él con las piernas abiertas cuando me senté encima de el era imposible no sentir su gran ereccion y eso me hizo calentar a un más lo agarre por el cuello y pegue mis labios a los suyos y nos dimos un apasionado beso el me comenzó a masajear los senos por enzima de la ropa sin dejar de besarme y nos pusimos muy intensos. Hasta que el timbre de la casa sonó sacándonos de nuestra fogosa escena, los dos miramos a la puerta y después nos miramos yo me baje de sus piernas y me acomode la ropa y el hizo lo mismo aún que el tenía un pequeño problema y era que su ereccion era muy visible, eso me dio mucha risa y mucho deseo a la vez. Se acomodó su pantalón y camino hacia la puerta, cuando la abrió había una chica muy hermosa —sabía que estarías aqui, puedo pasar— dijo con su voz femenina muy educada, puedo notar cómo Alejandro la mira de manera fría en silencio así que me acerco a la puerta, le digo que pase y se queda tan sorprendida al verme que se quedó parada sin decir nada.