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La Espada Protectora De Arsadan.

La Espada Protectora De Arsadan.

Status: En proceso
Genre:Apoyo mutuo / Amor en la guerra / Batalla por el trono / Mundo de fantasía / Salvando al mundo / Mundo mágico
Popularitas:6.3k
Nilai: 5
nombre de autor: Anyela.

Brenda es una princesa que siendo aún una niña tendrá que enfrentarse a criaturas mágicas que amenazan con destruir el imperio Arsadan, al iniciar su viaje descubrirá que no será tan simple terminar con aquellas criaturas.

¿Podrá la princesa devolver la paz al imperio?

¿Qué encontrará en su viaje?

¿Cuánto tiempo le tomará cumplir su promesa de regresar a su hogar a cada uno de los integrantes de su pequeño ejército?

NovelToon tiene autorización de Anyela. para publicar essa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

Capítulo 3.

...III....

En la mansión del marqués empezaban a preocuparse porque la pequeña morita aún no regresaba, Cadmun estaba organizando a su gente para ir a buscarla cuando ella apareció frente a ellos cubierta de sangre.

Al verla, Beatriz corrió a su encuentro, la abrazo y después de asegurarse que no estaba herida, la llevo a su cuarto para darle un baño.

— Beatriz, ¿qué pasará con tu boda? — preguntó la niña mientras jugaba con la espuma de la bañera.

— Nos vamos a casar cuando Cadmun termine con esos monstruos— respondió ella fingiendo tranquilidad.

Después de un corto silencio, tomando con fuerza las manos de la mujer, en tono serio volvió a preguntar.

— ¿Y si se casan mañana en la noche antes de ir a la capital?

Beatriz, esto no terminará pronto, créeme.

Si se casan ahora, podrías acompañarlo.

— Me encantaría ir con él, pero solo sería una carga.

— ¿Por qué, acaso, no tienes entrenamiento y magia de sobra para pelear contra los ogros?

Después de esa breve interacción ninguna de las dos dijo nada más, al cerrar la puerta de la habitación donde ya dormía la niña, ella fue con su prometido para comentarle lo que le había dicho morita.

Para su sorpresa, Cadmun apoyo la idea de la pequeña, así que al día siguiente prepararon todo para casarse esa misma noche, incluso el marqués acepto sin problema la apresurada ceremonia.

La noche de bodas fue mágica para ambos, quienes estaban felices de que por fin su sueño de ser una pareja casada se hubiera hecho realidad, algo que llevaban esperando desde niños.

Al amanecer los recién casados y la pequeña partieron a la capital, después de algunas horas a caballo y cruzando portales, llegaron a la mansión de un rico comerciante.

Allí le propusieron a la hija mayor del hombre, Zaida, acompañarlos a la lucha, ella era una gran hechicera e investigadora quién acepto enseguida feliz de poder usar sus conocimientos para ayudar al imperio.

Cuando las empleadas terminaron de empacar sus cosas, Zaida en voz alta recitó un hechizo que guardo su equipaje dentro de un anillo mágico que funcionaba como bodega. Subió a un hermoso caballo blanco que le regaló su madre y retomaron la cabalgata rumbo al palacio.

Al llegar ya el sol se había ocultado y el soberano se negó a atenderlos en ese momento porque estaba ocupado asegurando el linaje del imperio, como él le llamaba a acostarse con alguna de las más de cuarenta concubinas que vivían en el harem.

Los cuatro caminaban por los pasillos del palacio, siguiendo a las sirvientas que los llevarían hasta las habitaciones que usarían para descansar esa noche, de repente una voz conocida para la pequeña se escuchó a lo lejos.

Sin que las doncellas se dieran cuenta se acercó al salón del que provenía la voz, usando magia abrió un poco la puerta para ver que sucedía adentro, al hacerlo miró como su medio hermano mayor besaba las manos de la concubina Ofelia.

— Mi querida madre es la mejor, sabía que podía contar contigo.

— Basta Quidam, no tienes que seguirme agradeciendo. ¡Aaah! Esto es más que perfecto, tú no irás a la batalla y podremos librarnos de los molestos Duques Fortius y Tranthya.

Ambos reían por su hazaña, la niña, al notar que sus acompañantes se habían alejado bastante, corrió para alcanzarlos. Al lograrlo, tomo la mano de Cadmun, con sus pequeños dedos rozó el anillo de bodas que él portaba con tanto orgullo.

No le dijo a nadie de aquella conversación, pero ahora gracias a lo que escucho estaba convencida de que su decisión era acertada.

Al día siguiente, muy temprano, los sirvientes los despertaron para qué se arreglarán, ya que el emperador estaba ansioso por reunirse con el duque.

De los cuatro, la más nerviosa era Zaida, quien no quería estar en la audiencia, al entrar al salón del trono, hicieron reverencia al emperador y a la emperatriz que miraba a todos con superioridad y frialdad.

— Ha pasado mucho tiempo desde nuestro último encuentro querido primo— le dijo el emperador a Cadmun— Beatriz, cada día estás más bella, verte es todo un placer, y — mirando a la chica y a la niña que estaba usando una capa que cubría su cabello se quedó en silencio, buscando en su memoria si las conocía.

— Bienvenidos, cuanto tiempo sin verte amada hija— intervino la emperatriz saludando a la pequeña.

Al escuchar como la llamo, el monarca forzó una sonrisa, avergonzado de no haber reconocido a su hija, cuya existencia siempre olvidaba.

Ya acostumbrada a la indiferencia de sus padres, morita solo sonrió mientras decía que estaba feliz de volver a casa.

Zaida fue presentada por Cadmun y después de eso, se reunieron en otro lugar con el resto de nobles. La emperatriz pidió que instalaran a la princesa en el palacio cristal, hogar de la emperatriz.

Hablaron por largas horas sobre los pasos a seguir para eliminar los peligros que estaban destruyendo el imperio, los dos representantes de las fuerzas militares, expresaron que sería difícil que el ejército aceptara que fuera el duque en lugar del emperador, ya que era sabido por todos la mala relación que tenían y el poco interés de Cadmun por el imperio.

El monarca ignoró sus comentarios y puso fin a la reunión porque había prometido a una nueva concubina, mostrarle el palacio, y para él eso era mucho más importante.

Antes de que la emperatriz se marchara, Beatriz se acercó a ella para pedirle que les permitiera despedirse de la princesa.

— No se preocupe, duquesa, me encargaré personalmente de que puedan despedirse adecuadamente.

— Se lo agradezco mucho su majestad— respondió la joven mientras apretada su vestido al hacer la reverencia. Le molestaba que su pequeña morita tuviera que quedarse bajo el cuidado de tan malos padres.

Al anochecer la emperatriz, mando a su asistente a informarle a su hija que bajara a cenar con ella.

— Me dijeron que querías hablar conmigo, lamento no haber atendido antes tu petición, estuve muy ocupada.

— No se preocupe su majestad, me imagino lo difícil que es ser emperatriz de un imperio tan grande y caótico.

— Le dije a la duquesa Beatriz que mañana podrían despedirse, supongo que era eso de lo que querías hablarme.

— No, no habrá necesidad de despedidas, ya que iré con ellos— al escucharla su madre soltó sus cubiertos para luego tomar la servilleta con la que limpio sus labios.

— Su majestad, usted sabe que los soldados no estarán satisfechos con que el duque sea el representante de la familia real y aunque sea una niña, tengo suficiente poder mágico para hacerle frente a esas criaturas.

— Acaso no confías en las decisiones que el emperador toma, no crees que él logrará convencer a esos soldados, princesa.

— Ese hombre es un incompetente y la única razón por la que el imperio ha sobrevivido todos estos años es gracias a ti, por eso te pido que apoyes mi decisión y no a él.

La emperatriz se puso de pie y con elegancia camino hasta el otro lado de la mesa, donde se encontraba su hija.

— ¿Estás segura de querer ir a pelear, por un imperio que heredará el tonto de Quidam, quien seguramente te obligará a casarte con algún noble adinerado cuya posición lo beneficie?

— Si no hacemos algo, ninguno de nosotros tendrá un futuro del que preocuparse, no me importa lo que Quidam decida hacer conmigo al convertirse en emperador, solo deseo proteger a las personas que confían en que sus gobernantes los salvarán.

— Hija mía, siempre escuché a otras mujeres decir que tener un hijo era algo maravilloso, que se sentía un amor infinito por esa pequeña criatura, pero a mí no me sucedió nada de eso al tenerte, tú solo eres una de mis muchas obligaciones como emperatriz, lo único que comparto contigo es nuestro gran amor por este imperio. Te confieso que nunca me preocupe por como estabas, pero no quiero asistir a tu entierro, no quiero que mueras.

— No moriré, no hasta que la paz y tranquilidad regresen a este imperio, te pido me tengas confianza.

Además de traerme al mundo, nunca has hecho nada por mí, me lo debes— dijo la princesa con firmeza, esperando que su madre la ayudará a lograr su objetivo.

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Lizeth Suarez
Quiero más capítulos 🙌
Lizeth Suarez
Me encanta como lo narras y las descripciones de cada escenario
Ye.: Muchas gracias, apreció mucho tus palabras.
total 1 replies
Lizeth Suarez
Muy bueno el capítulo. Más porfis 🙌
Lizeth Suarez
Más capítulos 🙏😊
Lizeth Suarez
Excelente
Lizeth Suarez
Empezamos a leer🤗
Gris Lopez
Quizás se encuentren de nuevo a Aridam...
Ye.: /Chuckle/
total 1 replies
Gris Lopez
Ojalá Sol reaccione y cambie su actitud...porque si sigue así...sería capaz de traicionarlos
Isabel Conde Lema
por favor más capítulos que está muy interesante gracias 😸☺️/Pray//Pray//Pray//Pray//Pray//Pray/
Isabel Conde Lema
pequeña pero muy lista 😊😸
Isabel Conde Lema
ésto se pone más interesante 🤣😃
Isabel Conde Lema
me gusta mucho la historia gracias 😻
badboys
Esto es increible, pense encontrar cobre, pero encontre oro me encanta autor realmente eres muy increible 😁😁😁😁😁😁😁😁/Joyful//Joyful//Joyful//Joyful//Joyful//Joyful//Joyful//Joyful//Joyful/
💚Cony mini greensita🍀⭐ tey •
me encanta /Smile/
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