“ Together Forever ”

                  C.19

         “Dulces sueños, Estrellita”

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Narra Rachel

—Mi cabello es un asco. Gracias delfines—, desde la tragedia de hace rato estaba intentando cepillar mi cabello, parecía un estropajo.

—Por idiota, mírame a mí, mis trenzas están perfectas—, Tom empezó a presumir sus trenzas y claro que tenía envidia, se veían tan brillosas y con vida, no como mi cabello.

—Si no fuera por mí no tendrías esas trenzas y tendrías tus asquerosas rastas—, Es un malagradecido, estoy a nada de agarrar mis tijeras y le corto las trenzas.

—Mejor me voy a bañar por cuarta vez, tal vez con eso se me quite—, Tom me miro espantado—, Pero, acabas de bañarte.

—Déjame, no me va a dar hipotermia—, agarre mis cosas y encendí la ducha, estaba claro que no iba a dejar que mi cabello se viera así, es lo peor.

Escuchaba como Tom hacia desastre en la habitación, estaba a nada de salir así y pegarle, pero me acordé que soy una hija de Dios y que no hago esas cosas.

Me estaba lavando cada centímetro de mi cabello, no podía dejar que se viera así, hasta que no lo tenga bien, no dejaré de lavármelo.

Después de unos largos minutos, salí con mi pelo reluciente. Cuando por fin salí mire a Tom acostado a punto de dormirse. —¿Ya no más baños?—, Dijo mientras se restregaba los ojos.

—Para mí no, para ti si—, Dije mientras terminaba de desmaquillarme, estaba muriéndome del sueño, pero no podía dormir sin antes hacer mi skincare.

Tom se levantó de la cama de mala gana. —Solo lo hago porque quiero dormir en la cama—, Rodee mis ojos y deje que se metiera a bañar, estaba claro que no lo iba a dejar dormir en la cama.

Cuando por fin deje de hacer mi rutina, me acosté tranquilamente en la cama. Mientras me acomodaba en la cama, Tom salió del baño envuelto en una nube de vapor. —Listo, ya huelo bien, ¿puedo dormir?—, Me pregunto Tom, lo miré con una sonrisa fingida en mi rostro y le dije.

—Ahora que lo pienso, mejor duerme en el piso—, Tom me miro totalmente enojado, estaba en total desacuerdo con mi propuesta.—Me vale tu opinión, estrellita—, Tom se arrojó a la cama junto a mí.

No iba a dormir con él, ni en mis sueños. —Que te vayas al piso—, Comencé a darle patadas y empujarlo con mis manos para que cayera al piso.

—Recuerda como acabaste la última vez que me intentaste dejar caer—, Por un momento deje de golpearlo, de nuevo ese pequeño rasguño que duele como el infierno no. —Acá, no ahí, una mesa de vidrio así que cagaste.

Con eso, dicho le di una patada muy fuerte a Tom y lo dejé caer al piso. —¡IDIOTA, ME QUEBRÉ LA CADERA!—, Me reí por la gran tontería que había dicho Tom, claramente no se quebró nada, solo es un dramático.

Agarre unas cuantas almohadas y cobijas, se las tire todas al piso— Dulces sueños, Tom—, El de mala gana comenzó a hacer su pequeña cama. Cuando por fin la tuvo lista, se acostó y comenzó a cantar.

—Ella durmió al calor de las masas, y yo desperté queriendo soñarla, algún tiempo atrás pensé en escribirle, que nunca solté las trampas del amor.

—Pero—, fui interrumpida por Tom.

—De aquel amorrrrr.

—De música ligera, nada nos libra, nada mas queda.

Tom siguió cantando hasta dejarme sorda, estaba que le tiraba algo para que se callara. —¡YA CÁLLATE Y SÚBETE!—, Él no lo pensó ni dos veces, se tiró de un salto a la cama. — Te encanto mi serenata por lo que veo—, Dijo Tom con una sonrisa picara.

—No te hagas ilusiones, cantas pésimo y solo lo hice para que te callaras—, Tom volteo a verme con una cara bastante pícara. —Te voy a cantar otra.

Antes de que este pudiera abrir su puta boca, agarre una almohada, me levante de mi lugar y me puse enzima de su cuerpo callándolo con la almohada.

Él intentaba gritar a través de la almohada, intentando que me bajara de él. Ya se había callado, pero yo todavía no me iba a detener, solo quería paz y tranquilidad.

Él comenzó a desesperarse por quitarme de encima, obviamente no me iba a dejar quitar tan fácil, le costará dinero. Sentí como el paso su mano por mi cintura dejándola ahí quieta, sabia lo que iba a hacer.

Él comenzó a hacer movimiento en mi cintura, causando un cosquilleo en ella. —No, no lo hagas—, Tom levanto sus cejas y luego me sonrió, sus movimientos comenzaron a ser más rápidos.

Por las risas y mi desequilibrio gracias a las cosquillas, me bajé de él, pero aun así el no paro de hacerme cosquillas, ahora él estaba encima de mí.

—YA COÑO, PARA—, Dije entre risas, pero como este es un imbécil no entiende nada, le tuve que pegar en las bolas para que me dejara en paz.

—Mis hijos...

—Por necio.

—Me di la vuelta y me puse mis audífonos evitando oír los gemidos de dolor de Tom, se lo merecía y eso no lo discuto con nadie, comencé a entretenerme con mi celular, mientras Tom hacia lo mismo con el suyo.

Cuando estaba a punto de agarrar la cobija y acomodarme, pero Tom agarro la cobija y la tiro a su lado, respire hondo y la agarre a mi lado. —¿Crees que puedes apartarte y seguir como si nada?, ¡Solo estábamos jugando!—, exclamo Tom con frustración, mientras su mirada chocaba con la mía.

—¿Y qué esperabas?, ¿Qué te dejará seguir haciéndome cosquillas? ¡No entiendes los límites, Tom!—, Respondí, con la voz cargada de enojo.

-¡Tú siempre pones muros! ¡No puedo ni intentar acercarme a ti porque pones una barrera!—, Reclamo él, su tono de voz rebelando una mezcla de enojo y decepción.

—¿Y tú siempre tienes que ser tan... tan... molesto? ¡No entiendes que no todos quieren tus estúpidos juegos!—, contraataque, sintiendo como la tensión entre nosotros aumentaba con cada palabra.

La habitación se llenó de un silencio incómodo. Ambos nos miramos en silencio, respirando agitados por la discusión.

Finalmente, Tom suspiro y dijo con un tono más calmado, —No entiendo por qué siempre te empeñas en alejarme. No somos tan diferentes, ¿sabes?.—

Me crucé de brazos, sin querer darle el gusto de ver que sus palabras cambiaran de opinión. —Entiéndelo de una buena vez. ¡Somos muy diferentes!—, Exclame enojada.

—Ya cállate.

—Cállame.

Tom me miro por última vez de manera penetrante, él se arrojó a mis labios y los junto con los suyos. El beso fue inesperado pero apasionado.

Tom colocó sus manos en mi rostro, acariciándolo suavemente mientras nuestros labios se encontraban, mientras yo sentía un cosquilleo que recorría todo mi cuerpo. Nuestros labios encajaron perfectamente, moviéndose en sincronía mientras el beso se intensificaba.

Sentí el calor de su aliento en mi piel y mi corazón latía con fuerza en mi pecho. Mis brazos rodearon su cuello, acercándolo más a mí, y nuestros cuerpos se fundieron en un abrazo apasionado.

El tiempo parecía haberse detenido a nuestro alrededor mientras nos perdíamos en ese beso. Cada beso, cada caricia, era como una declaración silenciosa de todo lo que habíamos estado reprimiendo desde nuestro último beso.

Cuando por fin él se separó de mis labios, quería actuar enojada con él, pero ese enojo había desaparecido, ya no sentía estrés al verlo.

—Dulces sueños, estrellita.

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Autora ~ Esme_Klzz

             ★HOLAAAA★

★Trate de subir los capitulos rápido para no dejarlos con la intriga, estén atentos para los próximos capítulos.

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