Última Parada

Salgo de la ducha y ese Pitufo no está.

Me siento en la cama, veo el paquete de tabaco y las ganas me pueden haciendo que me levante, prenda un cigarro y me vaya a la ventana a fumar, viendo el pasillo.

Este tipo de alojamiento para quienes estamos de paso son de dos plantas. Y este gili ha elegido la planta alta, la segunda. Suspiro y decido salir al pasillo para fumar apoyado en las barandillas sintiendo algo de aire fresco, viendo las luces de Las Vegas al fondo, donde se pueden distinguir los colores.

Fiesta, juego, gastar, salir... Gente a un lado y a otro, shows, oportunidades...

No creo que pudiera vivir en una ciudad que no duerme, cuando hay vida de noche, la ciudad se prepara para vivir de día. Es un no parar, ir y venir.

Quizás me he pasado un poco con él y no debería de ser tan rudo. Quizás su forma de ver las cosas desde fuera se ve como el las ve, es decir... ¿ Esa es la imagen que tengo ahora mismo?.

Saco mi teléfono y uso el modo selfie para poder ver mi rostro: cara blanca con restos de color rojo y un poco morado por la parte del ojo, y las ojeras me impactan. ¿ Se pueden tener unas ojeras tan pronunciadas incluso habiendo dormido 10 horas seguidas? Y... parece que haya envejecido 5 años o más.

Dejo de mirarme. ¿ Para que? En unas horas haremos la entrega y de regreso a casa. Pienso de veras en hacer caso omiso al descanso de 8 horas porque estar con éste es peor que estar en casa, donde ahora mismo no habrá nadie, donde ya no estará Orlando, ni pasará por allá la bruja esa ni su marido; donde no aparecerá mi hermana con su marido ni sus gemelos; donde no están los amigos, donde...

-" En verdad quiero soledad ". -- Lanzo la colilla hacia abajo. Suspiro el último aliento de aire, voy hacia dentro y veo al idiota ese sentado en la cama. -" ¿ Cuando has... Y donde estabas?".

-" He entrado mientras soñabas despierto y he ido a dejar panfletos. Todos, así no hay que preocuparse más ". -- Se estira en la cama, bostezando. -" Buenas noches". -- Se tapa con esas ropas algo pasadas de moda y yo me siento en el sofá mini que hay al lado de la cama. -" ¿ Qué haces?".

-" Sentarme. No voy a dormir allá contigo".

-" Claro. Quizás los americanos con orígenes mexicanos hacemos cosas raras mientras dormimos". -- Se da media vuelta.

Paso de responderle. No tengo sueño, y prefiero relajarme acá, mirando un poco la TV aunque sea con los subtítulos para no molestar.

Le escucho roncar, profundamente. Este niño tiene un sueño fácil, no como Orlando que antes de dormir daba 20 paseos por la casa, subía las escaleras para hacer unas flexiones arriba; comía algo... Era un chico muy nervioso, de hecho, parece ser que el universo le ha dado por hacer que termine haciendo lo contrario estando en coma.

Y de paso... ¿ Es malo decir que estando en coma puedo estar unas horas tranquilo cuando llegue a casa? Es decir... Horas de agonía cuando salió del quirófano, horas de pesadez con familiares y amigos... Aunque no haya estado en casa con él, nada mas que una noche, eso ha sido suficiente para ver lo peor de mí bebiendo, tomando las cervezas para intentar olvidar la realidad.

Me levanto despacio para ponerme otra ropa mejor, un chándal con una camiseta más gruesa y la chaqueta corta vientos.

Lo mejor será ir yendo con el camión hacia la base de la empresa y esperar en el muelle a que me puedan atender y ya regresaré a por este.

Que se quede durmiendo. Ya me llamará si se despierta antes de que termine yo.

Además, verlo dormido, con ese cuerpito pequeño, hace que venga a mí mente el torso que vi la otra noche, tan sexy, tan... diferente al cuerpo de Otlando, ya que el es, era más robusto, con más carnes y ahora se ha quedado como él de delgaducho pero no tiene ese toque ... Sureño, esas vistas que hacen que sin haberlo tocado ni nada, hagan que mi entrepierna se endurezca...

¡ Dioas! Debo de saciar más mi sed, tomarme un rato para mí y satisfacer mis deseos. Pero eso debo de hacerlo en soledad, tranquilo...