El joven general más apreciado por el emperador luego de regresar de su última batalla enfermo gravemente, así que el emperador preocupado por su estado de salud llamó a un doctor y luego de que este no le diera esperanza sobre el estado de aquel general llamó a un profeta, el cual dijo que él debía casarse con un hombre cuyo cuerpo fuera único, capaz de concebir hijos y de absorber el mal que habitaba en el cuerpo de aquel general.
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dos por uno
Unos días luego de llegar a su destino, Li Qiu comenzó a sentirse mal, pero intentó ocultar de todo el mundo en especial de su sirvienta Mei Mei, los días siguieron pasando y la paz que sentían los tres fue lo mejor que les pudo haber pasado, ya que podían ir a donde quisieran y hacer lo que quisieran sin tener miedo de las consecuencias, lo primero que hizo Mei Mei fue comenzar a bordar me pidió un préstamo a Li Qiu, con ese dinero compró telas y confeccionó vestidos luego los guardó y después los vendió, después de obtener las primeras ganancias le ayudó a Li Qiu, quien comenzó a confeccionar ropa para bebé, algunas de esas prendas las dejaba para su hijo y el resto las ponía a la venta junto con los vestidos de Mei Mei.
Cuando ya había pasado un mes ambos estaban asentados perfectamente en el lugar, ya tenían un negocio propio y eran reconocidos por todos los que vivían en la ciudad, la gran mayoría de ellos pensaban que Li Qiu estaba casado con Mei Mei y que el pequeño Longwei era su hijo, lo cual era conveniente para ellos hasta que un día mientras Mei Mei servía el desayuno Li Qiu sintió náuseas, al principio pensaron que era algo que le había caído mal, pero cuando llevaban 4 meses en la ciudad el abdomen de Li Qiu comenzó a abultarse, en ese momento ambos supieron que Li Qiu estaba nuevamente embarazado, por lo que Li Qiu tuvo que quedarse en casa, Mei Mei tuvo que hacer una bola de trapo y ponerla bajo su vestido para simular un embarazo, ya que si las personas se llegaban a enterar de que un hombre estaba embarazado de seguro lo acusarían de brujería o correrían la voz y esto haría que la familia Lu los encontraran.
Luego de perfeccionar El plan, Mei Mei se encargó de que el mayor número de personas la vieran con una panza de embarazo, en cuestión de días se corrió el chisme, mientras Mei Mei hacia aquel espectáculo, Li Qiu se debió quedar en casa.
Mientras Li Qiu cuidaba de su hijo lloraba en silencio preguntándole a la vida y al destino:
-¿por que ahora?, ¿por que con el?, ahora hay otra vida que debo proteger de ese demonio.
Los días pasaron luego de saber aquella noticia y el pequeño Longwei dejo de tomar leche materna y comenzó a comer sólidos, cada día era más grande, fuerte e inteligente, ya recorría la habitación gateando, reía y gritaba, jugaba con los insectos y las flores, era un niño perfecto y feliz, Li Qiu amaba ser padre, ya que ver crecer a su hijo lo hacía sonreír y creer que su segundo hijo podía tener la esperanza de ser feliz y libre como su pequeño Longwei, además Li Qiu estaba feliz de haberse ido de la ciudad imperial, puesto que ahora podía dar a luz sin preocuparse por los sacerdotes de su tribu y por Lu Fang, pero en ese momento también recordó a tu suegra y se sintió triste, ya que la extrañaba demasiado, puesto que ella era la única que realmente no quería y lo apreciaba por quién era también lo respetaba, en ese momento se sintió culpable por haberla dejado sola y solo dejar una carta.
Mientras recordaba eso apareció Mei Mei, en cuanto ella se acercó a él se dio cuenta de que estaba sufriendo así que tomó su mano y le dijo:
- no sé qué es lo que no tiene triste, pero le aseguro joven maestro que todo el dolor que esas personas le causaron en el pasado será olvidado y se cubrirán con sonrisas y felicidad se le otorgaran sus hijos.
En cuanto Li Qiu escuchó esas palabras se sintió más tranquilo, Li Qiu le sonrió a Mei Mei y le agradeció su compañía y ayuda, tambien le dijo:
-sé que no nos conocimos en las mejores circunstancias, pero si hay algo que le agradezca a la vida y al destino es haberte conocido, te consideró como una hermana y amiga, eres la persona en la que más confió, gracias por estar conmigo.
Mei Mei sonrió, lo abrazo y luego dijo:
-usted es la persona más amable y tierna que jamás haya conocido, usted me protege y me quiere, para mí es un honor ser considerada su hermana.
Li Qiu sonrio y luego dijo:
-como somos hermanos puedes decirme Li Qiu o darme un apodo.
-pero...
-Mei Mei si te soy sincero me siento realmente incomodo cuando alguien tan importante para mí me llama joven maestro.
-entonces lo puedo llamar Qiu Qiu?
-sí, puedes llamarme Qiu Qiu.
Mei Mei sonrió, luego me soltó, fue al patio y desde allí dijo:
-Qiu Qiu, ven con mi sobrio a cenar.
Desde ese día nuestra relación fue más cercana y familiar, los meses restantes para el parto pasaron bastante rápido y un día mientras estaba arreglando el jardín alguien toco la puerta, Mei Mei me miro y luego dijo:
-hermamo, espera adentro con Logwei.
Yo obedientemente entre a la casa mientras que Mei Mei abrió la puerta, se escucho un fuerte golpe y luego...
