Isabel 2, Siempre A Tu Lado

Isabel

- Marcia que bueno fue venir a tomar este masaje... --digo ya bastante relajada después de ese merecido masaje--

- ¡Tú que no querías venir! Amiga, te dije que eran excelentes, yo no te traería si hubiesen tenido malas referencias --dice al tomar su jugo-- Mmmm! Este batido está delicioso! --ella siempre busca lo bueno para compartir conmigo y especialmente en estos días se lo agradezco muchísimo porque he estado muy estresada en casa--

- ¿Cómo está, mamá Rocío?

- Ya sabes! Cada día más temática...

- Marcia, no digas eso.--digo con risa porque la cara de Marcia es un poema--

- La gente cuando está vieja es un caso --lo dice con su característica cara chistosa, ella no lo dice en serio, Marcia adora y cuida mucho de mamá Rocío-- Isa, vas a tener que hablar con ella, tal vez a ti si te hace caso.

- Por qué?

- La consulta para su chequeo médico de rutina era la semana pasada y no quiso ir por nada del mundo, entonces decidimos dejarla tranquila para no estresarla y puedes creer amiga que al día siguiente supuestamente le dolía la espalda, luego la pierna, la uña... En fin ni ella misma sabía que le dolía y luego le digo vamos a llevarte al médico y allí se le quita todo... No quiso ir al médico.

- Marcia, es que cada vez que van le mandan a hacer exámenes y recuerda que desde la última vez que la enfermera le maltrato la vena para sacarle sangre ella ya no quiere ir, pero no te preocupes yo igual voy a hablar con ella...

- Gracias... Isa, amiga cuéntame como va todo con Astrid? --respiro profundo--

- No sé si igual o peor, ahora casi no la veo en casa, se la pasa casi todo el día en la universidad y cuando no, está encerrada en su habitación...

- Tal vez esta enamorada... --dice con su cara muy

- No creo, porque no he visto ese brillo en sus ojos... Para estar enamorada tiene su mirada muy apagada.

- A ella le pegó fuerte lo de Nicole.

- Marcia, a todos nos dejó destrozados, pero hay que seguir adelante, principalmente por Sabrina, hay que hacerla feliz.

- Cierto! Isabel, ya en unas semanas Sabrina cumplirá su primer añito ¿Que piensan hacer? Sabes que cuentas conmigo! --Eso lo sé desde hace mucho tiempo, Marcia es esa fuerza que te sostiene cuando te sientes caer, ella y yo somos muy unidas--

- Tengo que conversarlo con Jhon Santiago, estoy segura de que lo querrá celebrar, pero no sé que tan íntimo o grande lo quiera.

- Lo tiene un poco difícil amiga, también será el primer año de Nicole y para Santi esos días no serán nada agradables.

- Mi hijo no está solo amiga, nos tiene a nosotros para seguir ayudándole...

- Y a la tía madrina siempre pendiente de ellos y de la madre también.

- Marcia, gracias por ser y estar.

- Amiga, tú eres la hermana que la vida me regalo, te quiero mucho...

Días después decidí ir a visitar a mi hijo a la agencia...

- Buenas tardes! ¿Estefanía cómo estás? --digo con mi sincera sonrisa--

- Señora Isabel! Gusto en verla, más hermosa --dice Estefanía, ella siempre dice que no parezco la madre de mis hijos, porque no aparento la edad que tengo-- Tenía tiempo que no venía a visitarnos.

- Gracias, he estado algo ocupada... ¿Está mi hijo en su oficina?

- Sí, pero está reunido con el señor Relish.

- Perfecto! Voy a pasar, no le avises, gracias... --Estefania me miraba algo confundida, pero no dijo nada. Seguí hacia la oficina, toque la puerta y espere que me diera permiso para pasar, no soy ninguna abusadora--

- Adelante! --escucho la voz de mi hijo al otro lado de la puerta--

- Hola! --digo con mi gran sonrisa, pues no importa el tiempo que pase, pero ver a mi hijo me llena de emoción-- Interrumpo algo?

- Madre! --automáticamente se levanta de su silla y me recibe con los brazos abiertos-- No interrumpes nada... ¡Que hermosa visita!

- Claro! Ya no te das una vuelta por la casa de tus padres.

- No digas eso mamá, ya sabes...

- Sí, el trabajo y Sobrina... Lo sé, muy bien --le digo en una sincera sonrisa, aún en el abrazo de mi príncipe-- No piensas presentarme al señor?

- Mucho gusto Señora, soy Maximiliano Relish a su orden --dice tomando mi mano con delicadeza y dándome un suave beso en el dorso--

- Un gusto Señor Relish, lamento interrumpir su reunión de trabajo, no es necesario que se retire...

- No se preocupe. Gracias --dice mientras tomamos asiento--

- Gracias, hijo solo te quitaré unos minutos, como sabes ya se acerca el aniversario de Nicole y por supuesto el primer añito de la princesa. Quería preguntarte, qué piensas hacer?

- No quería pensar en eso, pero es imposible. Con Nicole, algo muy íntimo preferiblemente algo familiar y con Sabrina de eso te puedes encargar con la tía Marcia, ustedes son muy buenas en eso, no sé algo de parque, niños, quiero que mi Sabrina disfrute su día.

- Perfecto! Entonces no les quito más tiempo, Señor Relish espero verlo en la reunión.

- Gracias. Con gusto estaré compartiendo con ustedes.

Me despido de mi hijo con un gran abrazo y un beso, y del Señor Relish con un beso en la mejilla, este señor tiene buena presencia, es educado y si es amigo y socio de trabajo de mi hijo quiere decir que es una persona bastante responsable. Al salir de la agencia fui a visitar a Marcia que se volvió como loca cuando le dije que podíamos planear el cumpleaños de nuestra Sabrina. Empezamos con algunos pequeños detalles como la agencia de festejo, el pastel y el motivo será de flores y mariposas, queremos todo bien colorido con muchos globos para que nuestra princesa esté feliz en su primer cumpleaños.

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