Estefan Drack, un vampiro marcado por una maldición invoca las fuerzas del mal para vengar la muerte de su amada, pero es engañado por el demonio quien le otorgó su deseo a un alto precio y tras acabar con el que creía era su enemigo, se convierte en inmortal. Estefan luchara contra la oscuridad qué consume su alma, Convirtiéndose en un verdadero villano que lo llevara a enfrentar la obsesión de una mujer fascinada su poder y su aura de misterio.
Sin embargo, por obra del destino, se encuentra con la reencarnación de su amada ahora conocida como Elena. La presencia de Elena despertará en él emociones olvidadas y lo llevara a cuestionar su propia existencia.
¿Podrá Elena corresponder su amor y eliminar la oscuridad qué atormenta la vida de Estefan?
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CAPÍTULO 18 más que una atracción
Estefan observa cada una de las facciones de su amada, trayendo a su mente los bellos recuerdos que creyó olvidar, perdoname no pude salvarte en aquel entonces, pero ahora es diferente y le agradezco al destino por enviarte en mi camino nuevamente dice él en un susurro mientras depocita un beso en la frente de su amada.
Eres muy joven, supongo que tu transformación surgió hace poco, pero por que no puedo sentir nuestro vínculo. Aquel que nos une como pareja, por toda la eternidad. Decidí quedarme con ella hasta qure despierte.
Un par de horas después ella despierta entonces le digo hola querida, como estas.
Ella observa todo a su alrededor una vez que se sienta en la cama y por un breve momento pude ver un destello rojo en el iris de sus bellos ojos lo que me permite comprender qué ella todavía no asimila completamente su propio cambio o no quiere dejar salir su parte vampirica.
Su mirada esta puesta en mí y eso me llena de alegría, pero puedo apreciar cierta desconfianza en sus gestos lo que me hace pensar que realmente no recuerda nuestras memorias como pareja.
—¿Quién Eres?... (Tú rostro me parece familiar pero no logro recordar de donde).
Mi querida Selena donde has estado, no sabes la falta que me has hecho, realmente no me recuerdas, trato de tomar su mano pero ella no lo permite. Perdoname, han trascurrido varios siglos en los cuales no hubo día en el cual no te buscará, pero simplemente me di por vencido al no encontrarte, pero ahora estas aqui conmigo nuevamente lo cual agradezco.
—Creo que te estas equivocando de persona, mi nombre es Elena, gracias por tu hospitalidad, cuando ingrese al castillo una extraña fuerza me golpeó antes de desmayarme. ¿Quien eres tú?.
(Veo que realmente no me recuerdas, se supone que nuestro vínculo es inquebrantable). Por ahora descansa dice Estefan con una sonrisa en sus labios ya que por el momento decide dejar en anonimato su propio nombre. Tengo qué salir, pero prometo seguir platicando a mi regreso.
—La puerta se cierra y rápidamente observó mi cuerpo y respiro con más tranquilidad al ver que todavía llevo mi ropa. Supongo que fui un poco descuidada, pero lo importante es que ya estoy en el castillo.
—La imagen que se proyecta atravez de la ventana llama mi atención, ahora entiendo por que es tan difícil allar el castillo durante el día y es que una espesa niebla cubre el lugar Convirtiéndolo un poco tenebroso. Me acerco a la puerta de la habitación y me percató que esta sin seguro, por lo cual salí, pues necesito completar mi misión.
—En el pasillo me encuentro con una empleada algo sorprendida al verme salir de la habitación... ¿Como entraste a esa habitación? Pregunta la empleada, al parecer nadie puede ingresar en ella.
—Me acabo de despertar y procedo a describir al vampiro que estaba junto a mi, supongo qué el me trajo. De inmediato la empleada comienza a tartamudiar a la vez que tiembla, disculpe se encuentra bien... ¡Si! Me dice ella así que procedo a preguntarle donde se encuentra el Conde Estefan de inmediato ella me dice que en el despacho ya que esta en una reunión. Yo asiento y como si leyera mi mente que no se llegar allí, procede a guiarme después de hacer una leve reverencia y llamarme ama.
—¿Disculpa como me llamaste?... La empleada sigue caminado sin contestar mi pregunta hasta llegar al final del pasillo, para proceder a bajar una doble escalera y es cuando me percató de un hermoso retrato de una mujer muy elegante, lleva un vestido antiguo y aunque la imagen está algo desgastada por el paso del tiempo, puedo asegurar que se parece solo un poco a mí, despertando mi curiosidad por la identidad de esta bella dama.
—Puedo hacerte un pregunta. La empleada se detiene y da media vuelta a la vez que me dice claro ama. Otra vez con lo mismo, parece de otra época. pienso.
¿Quién es la mujer del retrato?...
—Ella parece procesar mi pregunta antes de responder y lo que me dice no tiene lógica, como es posible que la mujer del retrato sea mi propia versión a menos que haya reencarnado con el rostro de aquella mujer, que interesante.
Ama hemos llegado dice la sirvienta mientras hace una reverencia, por lo cual agradezco.
—Me encuentro frente a una gran puerta de color marrón, bueno a lo que vine, no puedo defraudar a mi maestra. Pero antes de tocar la puerta escucho pasos que se acercan cada vez más. Así que decido ocultarme para pasar desapercibida. Si tan solo conociera apariencia del Conde sería más fácil, pero no me puedo negar que he tenido suerte en lo fácil que fue entrar al castillo.
—Veo que llega el mismo vampiro que me encontré en la entrada del castillo, él ingresa fácilmente y decido colarme rápidamente antes de que cierren la puerta utilizando un hechizo de camuflaje en el interior del lugar. Maldición creo que fui descubierta digo en un susurro al sentir la penetrante mirada del guapo vampiro que se encontraba cerca cuando desperté.Nuestras miradas se encuentran lo que hace que él me sonría.
—Su sonrisa me hace sentir un torbellino de emociones como fascinación, atracción, curiosidad y hay esta de nuevo esa sensación de familiaridad. ¿Quién eres en realidad? Digo en un susurro mientras cierro mis ojos tratando de controlar estas nuevas sensaciones que me han invadido y que nunca había sentido.
Estefan solo sonríe al ver a su amada a unos pocos pasos de distancia (Sí que eres inocente al creer que con ese pequeño truco te ocultaras de mí, tu misma te metiste en la boca del lobo y créeme que de aquí no saldrás hasta dejar unas cuantas cosas claras), pienso mientras termino de cerrar la negociación y es cuando Brayan mi mano derecha me entrega el reporte que había solicitado y de inmediato ordenó para que se retiren. Ella da media vuelta queriendo salir, pero la detengo a tomarla de la muñeca a la vez que le cerro el paso. Esta acción la toma por sorpresa, por lo cual le pregunto ¿Qué haces?.... Que sorpresa verte aquí.... Tanto me extrañas que no pudiste esperarme en nuestra habitación digo a la vez que hago contacto mi frente con la de ella, puedo sentir su respiracion un poco agitada lo cual me garantiza que no le soy indiferente. Mi mano libre viaja hasta su cintura permitiéndome acercar más su cuerpo al mío, me encanta su aroma, es como una droga para mi.
Nuestros labios se unen en una perfecta sincronía la cual duró muy poco debido a que ella detiene el beso al tratar de liberarse de mi agarre, pero yo quiero más que un pequeño rose así que rápidamente profundizó el beso el cual ella corresponde, dejando de resistirse. Al finalizar nuestro beso puedo ver un brillo especial en sus ojos acompañado por el color rojo en sus iris. Acarició levemente su rostro y puedo percibir cierto calor de el, por lo cual tomo un poco de distancia.
—Espera un segundo, él me acaba de besar o solo me lo imagine después de perderme en su voz y sus caricias cuando el tocó mi rostro desencadenando una sensación eléctrica qué recorrio todo mi cuerpo. Definitivamente algo está mal conmigo.
