La Ex- Emperatriz Será Mi Esposa

Días posteriores. Mostraba el imperio un color festivo. El motivo sería la boda del príncipe heredero. Todo el festejo se iba a llevar a cabo en el palacio. Casi todo estaba listo, lo único que faltaba eran los novios. Que por ningún lado se encontraban en algún rincón del palacio.

Obviamente esto ponía de un poco de mal humor al emperador, a el le gustaba las cosas que se hicieran como era debido. Sin embargo, el retraso de su hijo con su futura esposa, podría complicar un poco las cosas. A lo cuál, el emperador sacó un gran suspiro y que le tocará esperar a su llegada.

Mientras que Akai y kana caminaba por las calles de la capital por una razón.

— ¿A donde me llevas?... Tenemos que regresar pronto por la ceremonia.

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— ya te dije. Es una sorpresa. Además, llegar tarde a nuestra propia boda no sería el fin del mundo. Es más divertido así.

Kana no podía creer que se sintiera feliz al romper casi las reglas. Para ella, ser puntual o hacer las cosas como se deben eran primordial, pero todos eso cambia cuando Akai decide incluirle a su vida alegría.

Él se detuvo en una tienda en específico. El negocio era pequeño, pero a su alrededor tenía accesorios hecho a plata puro.

— oh, joven príncipe. Me alegro que haya venido a tiempo a aquí está su pedido. Pero antes, me gustaría que la dama se lo probará a ver cómo le quedó.

— perfecto, kana, ven...— ella se encontraba emocionada de lo que podría ser el regalo. Así que se coloca al frente de Akai y él le coloca un anillo en el dedo anular.

— es precioso... Espera... Tiene algo escrito... Hasta la... Eternidad.

Kana fijo su vista hacia arriba chocando con la dulce mirada de Akai.

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— significa que nuestro amor será hasta la eternidad. Suena algo de niños, pero yo te he amado desde entonces y se que tú también sentías lo mismo, pero la sombra de Raiden no te deja a ver más allá de lo que verdaderamente sentías.

— hasta que volví a encontrarme contigo y me llevaste al camino correcto.

— y lo seguiré haciendo, como tú esposo y compañero de vida.— ambos escucharon la campana del palacio, que anunciaba que muy pronto daría inicio a la boda.

— al parecer, alguien va a llegar tarde a su propia boda.— comentó el vendedor.— esperaré mi pago después, tengo que asistir también.

Akai no esperó más y se llevó de mano a kana. Conocía un atajo donde ambos podían irse y llegar rápidamente al palacio.

Mas tarde, los preparativos ya estaban todo listo, los invitados esperando y los novios al pie de la entrada del templo, tanto Akai como kana tenian su vestuario similar con el otro, de un color rojo con tonalidades doradas. Era una gran costumbre que la pareja entrara al mismo tiempo para conmemorar su unión.

El emperador al fin sentía un alivio, ambos llegaron a tiempo para arreglarse y presentarse como futuros esposo. Sin embargo, detrás de su majestad, se presenta su asistente personal.

— ahora no. Te dije que hoy no tendría trabajo. Es la boda de mi hijo.

— es con respecto a las naciones. Dijeron que sí a su conferencia cuando acabe la tormenta pesada. El gobernador Gin hasta vendrá. Necesito una respuesta inmediata, de que confirmará esto.

— es más que obvio. Es por un bien mayor. Confírmalo. La reunión se hará cabo luego de que acabe la tormenta.

Asintiendo, el sirviente se retira. El emperador pensó brevemente sobre esa reunión.

“Es una fortuna que el clima no sea tan pesado este año, así, podremos adelantar la reunión y no esperar más."

El emperador vuelve en si al ver a Akai y kana sellan su unión con el beso. Donde los presentes aclamaron con alegría.

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Ya de noche. Luego de la celebración. Los recién casados yacían en su habitación preparada.

Ambos no eran tímidos el uno con el otro, los besos y las caricias subían cada vez mas tono. Ellos ya ansiaban está noche.

Kana encima de él aparta sus labios un momento. Ella se detuvo pensando en que no podría salir embarazada, ya que a pesar de no saber la verdad, siente que ella es la que está infértil de manera natural.

— ¿Que ocurre?

— Akai... ¿Y sí realmente no puedo tener a nuestro bebé? Podrías traerte problemas al casarte con alguien como yo.

— mírame... Yo te amo, y no dejaré que por medio de las tradiciones nos separen. Nuestro hijo llegará, eso te lo aseguro, pero si no es hoy o mañana, será pronto. Lo importante es que te tengo conmigo y puedo protegerte. No te preocupes más por ello y tengamos la felicidad que merecemos.

Kana le dió toda la razón, y con un besó suave, volvieron a las acaricia la insaciable.

___________________ al día siguiente.

Akai como siempre, fue el primer en levantarse. Mirando el cuerpo cansado de su recién esposa. Se sentía más que feliz al poder cumplir su mayor anhelo, ser esposo de la mujer que siempre ha amado. Para no despertarla, él se asegurá de darle un beso muy suave en la frente.

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Ella con una sonrisa lo recibe, y lo abraza sutilmente para envolverse nuevamente entre sus cuerpos y dormir un rato mas.

___________ Más tarde, a mediados de la noche.

Por otro lado del palacio. Aoi caminaba más allá de los jardines. Miraba como la nieve empezaba a caer. Iba a regresar, pero noto la figura femenina más adelante de él.

Aoi se acercó e intentó quitarse el abrigo e intentó ponérselo a los hombros de Yura.

— no es necesario.— refirió ella.

— para mí sí. Tienes muy expuesto los hombros, puedes agarrar un resfriado.

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Ella se ríe suavemente con burla.

— en mi familia somos de sangre fuerte. No tomaré un resfriado así de fácil. Además, he vivido en el frío más tiempo debido al clima del imperio. Tú la necesitas más. No eres de por aquí.

— así es, pero ya estoy acostumbrada al frío. Después de todo, vivi mi infancia arropado de la helada noche, hasta que conocí a kana. No te vi ayer en la boda. ¿Ocurrió algo?

— no sabía que te preocupabas por mí. Soy yo la que tendría que estar vigilandote. Pero... Ya no creo que sea necesario para demostrar tu inocencia aquí.

— que lastima. Me gusta tu compañía aún si no puedo verte.

—... Aoi, déjame preguntarte algo... Tú... Estuviste enamorado de kana ¿Verdad?

Aoi le tomó por sorpresa esa pregunta. Él indaga en sus recuerdos y en una pequeña sonrisa, le cuenta.

— La quiero sí, y como a una hermana. Pero jamás pude sentir algo amoroso por ella. Me salvó de un destino oscuro y por tal la admiro y respeto.

En ese momento, Yura no sabía por que esa respuesta la dejo más tranquila, más aliviada. El frió comenzaba a tornarse en una helada ventisca. Aoi de igual manera le ofreció su abrigo y se la llevó hacia el palacio, convenciéndola de beber un poco de té.

— De verdad tú no te rindes...— mencionó ella.

— el que persevera alcanza.

— ¿Y que piensas alcanzar?— preguntó en modo de burla.

— a ti.

— no lo creo... Y ya deja de hacer esas cosas que no me importaría golpearte.

— adelante.— pidió, con una sonrisa.

A lo que Yura suspira fuerte ya que siente que con este muchacho no será nada fácil. Aoi es masoquista cuando le interesa alguien.

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Tras haber pasado más de un mes. La emperatriz madre, ya no conocía lo que era la tranquilidad. Cualquier cosa que le era de avisar le molestaba, pero no era de menos, ya que posiblemente Aoi jamás vuelva con kana, o ya lo hubiera hecho, ni siquiera una carta o aviso de sus avances. Sin embargo, ya no habrá más a quien esperar, pues comenzará a trazar ella misma los planes para invadir e intentar apoderarse de las regiones.

Mientras que su hijo, el emperador, no ha hecho más que lamentarse, era increíble lo descuidado que estaba dejando el trono. Estaba cansada de una mala manera de verlo de esa así.

— Raiden...— ella entró a esa habitación llena de olor a licor. Era increíble que tan bajo cayó el emperador que una vez era admirado solo por haber estado al lado de kana.

— madre... ¿Vienes a darme otro sermón?

— mira lo patético que estás. Si kana estuviera aquí le darías vergüenza.

Con tan solo oír el nombre de kana, se levanta con gran quejadera.

— la quiero de vuelta... No me importa el método, pero la obligaré a estar conmigo. Solo... Necesito encontrarla.

— si tienes tantas ganas de que esté a tu lado otra vez, primero dile a las sirvientas que te prepare un baño, luego búscame en la sala de reunión.

— ¿Que piensas hacer?

— con o sin ella, continuaré mi plan. Confío que saldrá mejor sin kana guiándome. Aún así, la seguiré buscando hasta en los rincones del continente. Pagará por haber huido como cobarde.

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🥀 Muchas gracias por leer. lamento no haber subido unos capítulos, pero he estado preparando otra novela para subirla pronto. Ya saben que mis historias son cortas y está no será la excepción. espero que le haya gustado hasta lo momento y aún falta unos capítulos para el final. Gracias 💕